Siento que abren la puerta pero mi cuerpo está en busca de algún modo sucumbir el dolor. Solo con una mirada a la puerta me encuentra con la de Anny a cada paso que da su transformación va desapareciendo hasta ser la misma chica que conoci.
—¿Que hago? —Anny habla en un susurro cayendo de rodillas a un lado de la cama donde me encuentro pero creo que se lo pregunta más a ella misma que a mí
¿Se estaba preocupando?. Por mi mente cruzaron tantos, ¿porque? Pero a pesar de que se siente amargo me gusta que se preocupe.
Logré sentarme. Quiero eliminar esa mirada culpable.
—No te pongas así, todo estará bien —ella me da una mirada que sabe que es lo contrario igual que yo lo sé
Le ofresco la mano y me sorprende que la tome sin dudar.
Al sentarse junto a mi le da una mirada a todo lo que puede ver, hace rato me quite la camisa. Mi piel se esta tornando azul como la de ella hace unos momentos y lo peor no es el dolor si no que cuando tico estás no siento nada. La mirada de Anny cambio haciendo que me diera cuenta que ella ya lo sabía,
—Sangre de Sirena azul —susurro antes de verla levantarse
La furia comenzó a hacer de las suyas, salio de camarote azotando la puerta haciendo que todos regresaran a mirarla. Dio un recorrido por toda la tripulación hasta encontrar los hombres mojados en una esquina del barco y sus ojos se centraron en Fryrz que estaba sentado pero no intimidado por ella. Camino hasta el, para tomarlo de la camisa y elevarlo hasta quedar cara a cara con el
—La cura —su voz de Anny es gruesa y escalofriante sus ojos comenzaron a cambiar de color y sus colmillos ya estaban ahi
Me levanté lo más rápido que pude, escuché mucho de estas historias en puertos. Fryrz es un cazador de sirenas, sabia en lo que me estaba metiendo.
—Anny, ¡Ven aquí! —grito recargado en la puerta del camarote
—No hay cura —una sonrisa de satisfacción apareció
—Ven por favor — casi suplico extendiendo mi mano
Anny soltó a Fryrz dejándolo caer al suelo antes de darse la vuelta sin antes patearlo en el abdomen haciéndolo gruñir. Anny estaba a mitad del camino cuando volvió para tomarlo de la ropa y lo lanzó al mar.
Anny regreso a pasos largos y parece una niña regañada. En cuanto la tengo cerca tomo su mano de nuevo y la jalo dándole un abrazo tan fuerte cerrando la puerta como puedo e inhalo el olor que enmana de su piel ya que es muy raro y no puedo saber a que huele pero me gusta.
Se que la tripulación está preocupada aunque no dicen nada.
La beso tomándola por sorpresa sacándola de sus pensamientos. Pensé en ser rechazado pero soy correspondido, coloco mis manos en su cintura y la atrajo a mi. Coloca sus manos en mis hombros y se siente extraño su toque provoca que quiera mas de el algo que jamás había sentido. Me alejo lento y coloco mi frente sobre la suya.
—Me siento extraña... quiero más —susurra horrorizada
—Te regalaré mi última noche y tu tendrás la primera, me enamore de ti
Anny esta apunto de hablar cuando la cayo con un beso. Si la dejo hablar o reaccionar su miedo arruinara el momento y soy bastante egoísta. Aunque daré lo mejor de mi.
Una Sirena... ¡Claro que si puede sentir como un humano!, Hay que saber cómo tocar más que su cuerpo como a todo ser pero es un secreto que muere conmigo esta noche.