DÍA 14
Abro mis ojos al sentir el sonido de las piedras golpea la ventana de mi habitación. Tal vez es mi imaginación, me recuesto en mi cama nuevamente y cierro los ojos.
-¡Amara! –abro mis ojos, no, no es mi imaginación- ¡Amara! –me levanto deprisa, de mi cama y me dirijo hacia la ventana, corro las cortinas y ahí está él, Skyler en el patio trasero lanzando piedritas a mi ventana.- ¡Amara!
-Skyler shh…-le silencio con un dedo en mis labios-despertarás a mis padres…-a Skyler no le interesa, lo sé, lo veo en su actitud desinteresada- ¿qué quieres?
-Quiero entrar, ábreme la perta-señala la puerta de la cocina, sin dejar responderle él se dirige hasta ella a esperar a que la abra, hay Skyler…, salgo descalza de mi habitación y corro escaleras abajo hasta la cocina.
-¿Qué haces aquí, Skyler? Son las tres de la madrugada-le reprocho en un murmullo, él se encoge de hombros y me riba un beso.
-Quería verte-dice y se adentra completamente a mi casa, suspiro y resignada, cierro lentamente la puerta. Obligo a Skyler a sacarse sus zapatillas para que no haga ruido al caminar.
°°°
-Amara…Amara… ¡Amara! –parpadeo al escuchar mi nombre en los labios de Skyler, lo miro sonriente y él niega. Hoy es domingo, Margo me suplicó que le ayude con unos problemas de matemáticas, pero al parecer ella le comentó a Mateo que por cierto en su novio. Y Mateo se lo dijo a Skyler, así que estoy en compañía de ellos tres en mi habitación sentados en el piso haciendo los ejercicios de matemáticas.
-Mateo y yo iremos a traer los refrescos que preparó tu mamá, Amara-yo asiento al escuchar a mi amiga, los dos se levantan y salen de la habitación, dejándome a solas con Skyler.
-¿Otra vez recordando? –asiento sonriente mirándolo soñadora- ¿Cuál recuerdo esta vez? –yo niego, no se lo pienso decir-vamos dime-demanda, vuelvo a negar, no le pienso decir-Amara…dime Amara-ruega, me gusta cuando pronuncia mi nombre.
Razón N°14
Te amo cuando dices mi nombre, me siento especial.