CAPÍTULO 20

DÍA 19 
Ayer después de pasar la noche en casa de Skyler, me preparé para venirme inmediatamente a mi casa, no me sentía bien, creo que fue a causa de que no tomé mis píldoras ayer. 
Con el pretexto de tener que prepararme para i al colegio Skyler me dejó ir. Pero, no fui al colegio, no me sentía completamente bien, a mi casa llegué arrastrando los pies, gracias y mi mamá no estaba en la cocina, así que lo más rápido que pude entré a mi habitación y tomé las vitaminas. 
Y aquí estoy, postrada en la cama desde ayer, sólo me levanto con ayuda de mi mamá para ir al baño. El doctor dijo que la etapa final se estaba acercando y solo…que estemos preparados, mi madre explotó en llanto y yo sólo aguanté mis lágrimas para no verme más débil de lo que estaba frente a mis padres. 
 -Cariño, Mago está aquí-dijo mi mamá entrando a la habitación, vi detrás del hombro de mi madre la cabellera castaña de Margo, ella se hizo a un lado y mi amiga entró con una sonrisa más falsa de cuando saluda a la profesora Aveldaño de Matemáticas. 
 -Hola Margo-sonreí apenitas, ella caminó hacia mí y tomó asiento a mi lado en mi cama. 
 -No te voy a preguntar cómo estas…es obvio que no estás bien, así que… ¿hacemos algo para divertirnos? –sonrío con ganas, me gusta el estar con mi amiga, sabía que ella me seguiría tratando como una persona normal…no como lo que realmente soy, una persona enferma a punto de morir. 
A Margo la conocí desde que tengo mis recuerdos, creo que fue en jardín de niños en la sala de cinco años, era más alta que yo y siempre tenía en su rostro plasmada la determinación y seguridad en ella, admito que esa seguridad me daba miedo, no estaba muy familiarizada con aquella palabra y menos una expresión, yo era muy tímida, me costaba hacer amigos y para ser sincera no quería juntarme con Margo. Un día ella me defendió de unos niños que estaban jugando con mis coletas…desde ese día ella no se separó de mí no yo de ella, entendí al poco tiempo que tal vez algo de determinación y seguridad en tu vida no estaba mal…sin embargo nunca pude alcanzar la seguridad de mi amiga…bueno, tal vez hasta ahora. 
 -¿Aún no se lo dijiste a…Skyler? –detengo lo que estoy haciendo, con Margo pensamos en hacer pulseas de hilos. En todo el día no he pensado en él, hoy creo que no le veré y no le diré la razón. 
 -No…no quiero que se entere-niego y sigo anudando los hilos. 
 -Amara…los profesores ya lo saben, por lo que dijiste, Diego lo sabe…es mejor que se entere por ti a que por alguien rondando a su alrededor-guardo silencio, ella tiene razón, pero…no quiero, sé que si se entera él terminará destrozado y yo junto a él, sólo una vez lo vi llorar y sufrir…no quiero que pase lo mismo, él es alguien fuerte, alegre y sin preocupaciones, no quiero que nada de eso en él cambie-ah…Mara-Margo suspira-te estuvo buscando toda la mañana-levanto mi mirada y la miro a ella para saber si lo que dice es cierto…, sí, es cierto. Me encojo de hombros desinteresada. 
 -¿No le dirás hoy una razón? –la miro como diciéndole si es una broma- ¡No me pongas esa cara! –yo ruedo los ojos. 
 -¿Cómo quieres que le diga si estoy aquí postrada en esta estúpida cama a causa del puto cáncer? –exclamó con desesperación, mierda, en mi vida he puteado dos veces en la misma oración. 
 -¡No vengas a poner de excusa este puto cáncer!¡Tú puedes hacerlo si quieres! –arqueo una ceja, apenas me puedo mover-Además…ahora hay una cosa llamada celular que contiene tecnología y puedes llamar a alguien a larga distancia…ya no es necesario una paloma mensajera-Margo me mira con burla y me pasa el celular que está en mi mesa de noche. 
 -La cosa es…es que no sé qué razón darle hoy-miro detenidamente el aparato tecnológico. 
 -Ya…es un problema-bufa Margo-¿cómo es que pensaste todas las razones hasta ahora? 
 -Recuerdos que tuve con él. 
 -Entonces…sólo tienes que pensar en uno y ya-se encoje de hombros sin interés, como si fuera tan fácil… 
°°° 
 -Llámalo…llámalo…llámalo ¡Llámalo ya mujer! –me grita Margo perdiendo la poca paciencia que posee, ya he podido pensar una razón…pero me pone nerviosa el llamarlo-no es tan difícil. 
 -Es extraño estar llamando por teléfono a tu ex- argumento. 
 -Es extraño darle razones a tu ex de por qué lo amas días después de terminar. 
 -Tuche-murmuro avergonzada. Presiono la opción llamar…al segundo empieza a sonar los pitidos. 
 -En alta voz, también quiero escuchar-sin mi permiso Margo pone esa opción…un tono…dos tonos. 
 -¿Mara? –me sobresalto, Skyler contestó…mi corazón late frenéticamente-Amara-Margo me pega un leve codazo en mi costilla volviendo a la cruda realidad. 
 -Hola Skyler-no sé cómo hice, pero mi voz sale de lo más habitual. 
 -Mara ¿estás bien? ¿por qué no has ido al colegio? –sonrío ante la preocupación de Skyler, si está así de alterado ahora…estará peor en cuanto sepa que me…no le diré, al menos no por ahora. 
 -Estoy bien…ayer llegué con sueño y me quedé a dormir y hoy…ayudé a mi mamá, así que por eso no fui-Margo me blanquea los ojos, no le diré por teléfono “Skyler tengo cáncer, no me queda mucho tiempo de vida” obvio no. La ignoro y me concentro en el teléfono. 
 -Qué bueno…pensé, pensé que te había pasado algo-el pecho se me oprime, no quiero escucharlo tartamudear, cuando tartamudea…es que él…está muy preocupado, y a veces a punto de llorar. 
 -Skyler…yo te llamo para…decirte la razón de hoy… 
 -Puedo ir a tu casa y…-no, no claro que no, no quiero que me vea de esta manera. 
 -No hace falta, además…estoy con Margo…noche de chicas-que vil mentirosa resulté ser, me odio-Skyler… 
 

Razón N°19 
Te amo por la ternura de tus acciones, o la forma en que haces las cosas sin esperar nada a cambio. A veces creo que eres alguien demasiado genial para estar conmigo. Tengo más defectos que virtudes, a diferencia de ti, Skyler.