Diana:
El día siguió ya nada tenía remedió, esas palabras "Te amo Diana" permanecieron en mi mete.
- Si me amaras Lisandro no engañarías siempre.
Al día siguiente cuando baje a desayunar ya todos estaban en la mesa.
- Buenos días - camine a mi puesto de siempre.
- Buenos días mamá - me miraron con tristeza mis dos hijos.
- Buenos días Diana - su voz sonaba triste, su mirada también, ignora Diana no puedes perdonar sus revoluciones me dije.
Nadie dijo nada, todo era silencio, un silencio incómodo por cierto.
Termine de desayunar y mire a Lisandro.
- Lo pensaste mejor Lisandro ya firmarás los papeles del divorcio - me miro de inmediato con su mirada suplicante sin decir palabra - mi abogado ira a visitarte, nos vemos en el juicio Lisandro Samaniego - me sorprendí yo misma por mi voz tan fría, me dispuse a caminar cuando me llamo.
- Ya firme Diana, los puedes buscar en el despacho - lo supuse no permitiría que su nombre se manche.
- Gracias Lisandro al fin acabó lo que nunca debió de comenzar.
Lisandro:
Por que decía eso, me dolía su arrepentimiento al ser mi esposa.
- Firme pero no renuncie a ti Diana, eres la madre de mis hijos, la mujer que amo, la mujer d..- me interrumpió.
- Tu amor por mí acabo el instante que te metiste en la cama de otra Lisandro, quizás confundiste amor con obligación.
- No confundí nada yo te amo siempre lo hice desde que te conocí Diana.
- Me conociste a los diecisiete, tuvimos una relación de una año donde pensé que con mi amor podías ser diferente pero me equivoque, te casaste conmigo por que nuestras familias así lo decidieron por - suspira con tristeza - mi embarazó - podia ver su dolor en su mirada y me odie a mi mismo al ver el daño que le hice, ella es y será siempre el amor de mi vida.
- No Diana yo me case por que te ame, te amo y te amare siempre, se que estas herida por mi error pe... - me interrumpe.
- Claro que estoy herida creía ingenuamente que podía tener una familia con la llegada de Diego, nuestro matrimonio estaba bien o eso me hiciste creer cuando me entere de la llegada de David me puse mas feliz por que nuestra familia crecía - la ironía era clara.
- No digas eso Diana me duelen tus palabras p....
- A mi también me dolieron tus infidelidades ya se te pasará como a mi. El tiempo borra heridas, borra amores, borra rostros Lisandro - salió sin esperara respuesta del comedor.
- Por que la engañaste si la amas como dices papá - me miro con reproche David.
- Por imbécil, por eso - me senté.
- No será fácil recuperar su amor papá - aseguro Diego.
- Lo se pero estoy dispuesto a recuperar su amor aunque me lleve años - me pare y salí del comedor para irme a trabajar.