Capítulo 7

Lisandro:

Abro los ojos por los rayos solares que emanan mi cara y me doy cuenta que estoy en la cuarto que era de Diana y mío cuando nos casamos, seguro me vine a recordar a la mujer que perdí por idiota, lo hacía cuando bebía y anhelaba que este ahí pero me decepcionaba cuando despertaba solo, sin ella, como ahora.

Me fui a mi actual cuarto me duche y cambie con un traje azul marino impecable como siempre luego baje a desayunar, entre al comedor y ahí estaba tan linda como siempre, no entendía por que no se iba con su hijo y pareja.

- Buenos días - tome a ciento.

- Buenos días Lisandro - me miro de forma penetrante como si quisiera decir palabra pero se limito a tomar su jugo.

- Buenos días papá - dijeron al unísono David y Diego.

- Buenos días - tomo asiento y me dispongo a comer, siempre será así incómodo - Diego quien va a la reunión en Miami para ver las remodelaciones de los hoteles - rompo el silencio captando la atención de todos. 

- Aún no lo decidimos entre de David y yo, es un viaje largo - largo así dejo de pensar y hacerme a la idea de estar solo - para que todo marche en orden...

- De cuanto tiempo - lo miró.

- De un mes papá, no te preocupes esta tarde lo arreglamos con David...

- Ire yo interumpo - ustedes arreglen todo aquí, estamos en remodelación en todos los hoteles que tenemos y solo faltan el de Miami y los de aquí - irme es lo mejor tal vez cuando regresé ya Diana se haya ido de la casa con su hijo y pareja.

- Estas seguro papá, puedo ir yo - dice David mirándome con reproche porque me quiero ir.

- No iré yo - digo decidido - no olviden que el hotel Mi Vida se queda como esta - tomo mi jugo.

- Como digas papá ese hotel no se toca - saben que lo construí para Diana.

- ¿Por que todos los hoteles lo remodelan menos ese? - la miro y en ese hotel esta ella ya que me ayudo con el diseño y lo decoro ella.

- ¿Por qué? - lo pienso un momento mientras los tres me miran esperando mi respuesta - no necesita remodelación - digo serió - provechó - limpió mis labios y me pongo de pie - ¿cuando es el viaje a Miami? 

- En dos días papá.

- Dile a Isabel que me reserve un vuelo para hoy por la noche - asiente - con permiso me voy al trabajo - no espero respuesta y salgo del comedor.

Diana:

Tengo que hablar con él de donde saca que tengo un bebé y pareja, antes que se vaya lo tengo que ver y hablar con él, camino de un lado a otro en mi cuarto. Donde, pienso y pienso y no logro dar de donde saca semejante tontería, corro al despacho y busco por todo lado en los cajones, librero pero no hay nada, me siento en el sillón.

Donde Lisandro Samaniego y que mierda descubriste mejor dicho que investigaron, pienso unos segundos, me pongo de pie, muevo el sillón y si ahí esta su caja fuerte pongo la clave y se abre, mi amor tan evidente, la fecha de nuestro divorcio saco la carpeta que tienen mi nombre y los reviso, hoja tras hoja descubro que me busco desde que me fui - no encontré a la señora Diana en toda Europa eso es de un investigador - no se encuentra en Reino Unido - el segundo investigador - Señor Samaniego busque en todo lado y no encontré nada hasta hace unos meses que busque vía mar y la encontré en dos cruceros el último llego hace dos días aquí muestra a la señora Diana con un bebe y un hombre, acabe de leer y vi las fotos soy yo, mi ahijado y Marcus. Eres un estúpido Lisandro por que no me preguntas y se acabó - limpiando mis lágrimas, pongo todo como esta - tengo que hablar contigo Lisandro.

Miró mi reloj son las tres con once minutos de la tarde, llegará seguro en la noche como siempre, me voy a ver a mi ahijado mientras salgo del despacho suena mi celular, miró quien es y es Amanda.

- Hola Amanda.

- Hola Diana, a que hora vendrás a ver a Alejandro Marcus me dijo que venías hoy - se nota que esta triste.

- Si, me alisto para ir a verlo, ¿estas bien Amanda?

- No, pero tengo que ser fuerte por mi familia Diana - esta llorando.

- Calma voy para allá no te preocupes, lo arregláremos.

Por que los padres de esta sociedad no entienden que no importa la clase social, lo importante es ver a sus hijos felices. Tomo las llaves de mi auto y voy al hotel, pasada una media hora mas o menos llegó al cuarto, toco y me abre Marcus.

- Hola, ¿como están?

- Bien supongo - es clara su tristeza - pasa están en el cuarto de Alejandro - me permite entrar y sierra la puerta.

- Iré a verlos, todo se arreglara - pongo mi mano en su hombro en señal de apoyo - asiente con la cabeza y se sienta en el sillón.

Me voy a ver a mi ahijado y mi amiga, esta llorando.

- Amanda - la llamo y voltea.

- Diana se que tengo que ser fuerte pero me duele todo lo que pasa con mis padres no aceptan a Marcus ni a mi bebé fui con la esperanza que al tenerme casi dos años fuera los cambiaría, pero no sigue siendo igual que antes - se limpia sus lágrimas.

- Peleaste con Marcus - me acerco y arropó a Alejandro - por eso estas aquí llorando y el allá en la sala verdad.

- Si, él creé que me arrepiento de todo lo que pasó entre nosotros y de Alejandro, creé que reniego que este aquí conmigo con nosotros Diana - nos sentamos en los dos sillones.

- Por que piensa eso - Alejandro se mueve - príncipe quieto que hablo con mamá - muevo mis brazos para que se calme - muy bien calmado.

- Es que le dije que no debimos de huir, que mejor era quedarnos y solucionarlo allá, se enojo y me dijo que nunca hubiéramos tenido paz en mi embarazo o que tal vez lo hubiese perdido por tanto pleito entre él y mis padres - llora más.

- Por lo que me contaste de tus padres tal vez hubiera pasado lo peor Amanda - me mira mal - aunque lo niegues sabes dentro de ti que hubiese pasado eso - tomo su mano - tienes que pensar en tu felicidad y no en complacerlos a ellos, se que suena egoísta pero dime estas dispuesta a irte con Alejandro para Italia sola - se confunde - se que Marcus ira por su hijo, no intentará quitártelo por que tu tienes mas poder que él a parte que no lo haría por que te ama y ustedes son todo para él.