¿Y sí…?

Después de haber sido rescatado por Nico, Weru se encontraba en su casa descansando y reponiéndose de la peligrosa situación en la que se había encontrado. Él que había estado inconsciente durante una cuantas horas, ya que Nico llego justo a tiempo para rescatarlo, se encontraba justamente en la habitación de Nico durmiendo.

Al pasar de unas cuantas horas, Weru al fin recobró la consciencia y se despertó. Pero, en el momento en que despertó, rápidamente dijo – ¡No! Debo de salir de aq… – en eso se dio cuenta que ya no se encontraba en aquel lugar sumergido en la obscuridad total.

Él tratando de pensar en lo que estaba sucediendo ahora, miró al techo mientras trataba de llegar a conseguirle una solución a todo lo que había sucedido antes de que se desmayara. Pero, mientras estaba pensando en esto, noto un dulce aroma que le hizo regresar en sí. En ese momento en que percibió aquel aroma, empezó a pensar – es… este… algo aquí anda mal. No sé con exactitud que sea lo que está mal, pero no puedo dejar de sentirme ahora un po… – de pronto sintió que no estaba solo. Así que, dirigiendo su mirada hacia un lado, fue que la vio.

Justo a su lado de él se encontraba Nico durmiendo como si nada. Weru, mientras miraba como Nico dormía placenteramente a su lado, sintió que debía de salir de ese lugar de forma silenciosa y con mucho cuidado para no tener que despertarla. Así que, sin siquiera pensarlo dos veces, se levantó con mucho cuidado y salió sin siquiera hacer mucho ruido.

En el momento en que abrió la puerta para salir, de pronto Nico murmuró – no… no voy a dej… – lo cual hizo que Weru sintiera que ella se había despertado pero no había sido así. De esta manera, Weru salió del cuarto de Nico y empezó a bajar por las gradas para dirigirse hacia su casa.

Justo al final de las gradas, estaba María recostada en la pared esperándolo. En el momento en que Weru pasó frente a ella, María dijo – veo que no fue nada fácil. Será mejor que estés preparado para lo que se avecina, si es que puedes resistirlo por supuesto – Weru, respondiendo sin voltear a verla – voy a dar lo mejor de mí y cambiaré esto. Así que nos vemos después – con estas palabras él se fue, mientras tanto María tenía una sonrisa de satisfacción dibujado en su rostro mientras se decía a sí misma – esto es lo que estaba esperando que dijeras. Sólo espero que no termines arrepintiéndote por lo que acabas de decidir – y, dándose la media vuelta, subió al segundo nivel dirigiéndose a la habitación de Nico.

María, que estaba consciente de lo que estaba ocurriendo en ese momento, no podía dejar de pensar que si esto estaría bien, además de que empezaba a notar de que había algo que estaba mal en todo lo que ella creía y que había algo que se debería de llegar a descubrir una vez que pase el tiempo, pero… lo que podría ser el querer conocer lo que estaba por ocurrir, aquel misterio que podría revelarse, no sabía si querría llegar a conocer cuál es o no.

Estando enfrente de la habitación de Nico, abrió un poco la puerta para ver cómo estaba todo el lugar. Mientras observaba sin llegar a entrar en la habitación, pensó – es un milagro que él haya podido salir sin ni un tipo de rasguño – y con esto cerró lentamente la puerta para evitar meterse en problemas.

Nico, quien se había despertado hace ya un rato, dijo – con que no quisiste despertarme ¿Verdad?, sólo espero que pued… bueno, tendré que hacer algo si no quiero que termines en manos de ellos otra vez… si tan sólo no fueras tan… no importa lo que digo o piense, al final todo quedará en poder verse de aquí en adelante – y con esto en mente se levantó. Nico, con un pequeño suspiro, se puso un suéter antes de dirigirse hacia la cocina, lo cual podría sonar un poco extraño al ser que no se sentía fría sino que un poco de calor pero a pesar de eso ella decidió ponerse un suéter. Sin siquiera poder dejar de lado todo lo que había sucedido, Nico seguiría pensando en una forma de poder hacer que Weru se volviera fuerte como lo eran todos ellos. Ella, aunque sabía lo peligroso que sería el tratar de continuar en este mundo, no quería echarse para atrás con el de hacer que Weru fuera una parte de su agencia. Aunque, en momentos como este, no podía más que estar de acuerdo con las palabras de Felipe en que ellos podrían estar mejor para poder tomar cualquier misión sin la ayuda de Weru.

Nico, mientras pensaba seriamente en cómo poder hacer que Weru llegara a aumentar su fuerza, de pronto sintió que podría intentar hacer algunos cambios en el entrenamiento que él tenía con María y llevarlo directamente en alguna misión para así poder hacer que él pudiera experimentar lo que es estar en una misión real en lugar de uno simulado.

Con esto en mente, Nico, estando frente al refrigerador, sacó la leche y vacío un poco en un vaso para luego irse a su cuarto, por supuesto, sin antes no haberle dado una lección a María por haber espiado un poco su habitación con sumo cuidado y el dejar una pequeña muestra de estar en un campo minado y con advertencias de muerte cuando ella trato de entrar a Weru y tratarlo. Aunque ella sabía que podría ser malo el que Weru se encontrara en una mala posición, también conocía muy bien que podía hacer algo para arreglar las cosas, sin embargo María no quería cooperar en ese momento por alguna extraña razón.