2 - Parte.

Esa noche soñé con él.. su mirada, Aun sintiendo ese fuego en mi corazón, resistiendo con fuerza en mí interior. Me recitaba las palabras “ te quiero “, lo pude sentir en mí interior, la calidez que por dentro arde como a las llamas del fuego, de mí una sonrisa, que sin decir mucho, susurra “ te quiero volver a ver “. Ese sentimiento a de estar preso en mí interior, como a un tatuaje; difícil de retirar. Como olvidar aquel momento, si cada vez que cierro los ojos su imagen me vuelve a atrapar, cada vez que lo intento, algo me vuelve a recordar.

Comencé a creer que el destino fue quién se encargó de ponerle ante mí, Por la simple razón de que tal vez sea para mí. < Hermosa la forma en que impones tu querer, Destino >.

A la mañana siguiente, Mi madre y yo estábamos sentadas en la sala, me observaba con desconfianza, como si estuviese a punto de decirme algo – ¿ que pasa madre, hay algo que quieras decirme ? - , - ¡ No, estaba pensando que hacer de cenar hoy ! , ¿Porque?, ¿hay algo que quieras compartir conmigo, Emma? -, - No, todo está en orden.- me pareció muy extraño lo sucedido, tanto que hasta preferí subir a mi habitación, me sentí culpable y aun no sabía cuál era mi crimen.

Prácticamente mí corazón está ocupado por alguien a quién no puedo llamar mío, al cerrar mis ojos y recordar sus hermosos ojos, sonrió, Amo el brillo que reflejaban al verme.

< Hoy el sol tendrá un brillo inmenso, pues, las nubes le comentaron sobre ti, me han estado escuchando gritar en mi corazón que quiero volver a verte, diciendo que me gustaría  ser ese sol que te abraza y se acuesta en tu corazón >.

- ¡Que aburrimiento, necesito buscar un empleo y así poder mantenerme ocupada!.

Mis padres trabajaban parte de la mañana, hasta la puesta del sol. Tenía la casa siempre sola para mí, de lunes a sábado. Al inicio era divertido pero ahora como que me siento sola y aburrida, la única compañía que tengo es Ralf, mi perro, es mi mejor amigo.

Me dormí mientras veía una película en la laptop con Ralf, Las horas pasaban y la luna alumbrara con su luz mi ventana, las mariposas soñaban contigo, sueñan sueños borrosos de amor. Dueño de mis latidos, que en mí huellas dejas, con el calor de tus brazos pegados sobre mí piel, se pone inquieto mi corazón. Tengo el pecho retumbando, cuando ya despierta pienso en mis cómplices; las mariposas, desde mi corazón; un mar de pasión.

 <Te quiero porque solo a ti te quiero, porque te imagino, porque en mí destino yo sé que existes, Amor mío.>.

 Baje a la sala, aún era temprano, podía escuchar como mis padres atendían a terceros desde la sala, - Ven Ralf, puede que tengamos visita -.

Iba bajando las escaleras y lo vi, de terno, muy elegante. Era él, el chico del parque, ¿¡el patrón de mis padres ¡?