Los 6 reinos

Yuno y los demás se hospedaron en una pequeña posada en los suburbios de la ciudad, era pequeña, la habitación sólo tenía 2 camas donde tenían que compartirlas y un pequeño tocador de roble, ahí se encontraban en las camas apretados, ya sin sus disfraces de Elfos pues hace ya tiempo que se habían acabado las 4 horas que duraba el hechizo.
- Por qué tenemos que dormir aquí, oye Yuno si no mal recuerdo tu eres rico que no podías comprar un hotel o mínimo rentar unas habitaciones — reprochó Amer enojada al ver la pésima estancia en la que se habían quedado.
- Oye mi dinero no vale nada aquí, además éste lugar lo escogió Miguel — exclamó Yuno fingiendo estar ofendido por la acusación de Amer.
- No te quejes Amer, yo eh dormido en peores sitios — respondió Mery.
- Claro pero cuando eras una niña ahora que eres rica vives en una mansión — exclamó Amer .
- Vivía — exclamó Mery con una sonrisa haciendo enojar más a Amer que sólo cruzó sus brazos y reprochó nuevamente.
- Como sea — acto seguido la puerta de la habitación se abrió y rápidamente entró Miguel.
- Cómo están muchachos.
- ¡Genial! — gritaron Liz y Nan con una sonrisa en su rostro y el pulgar arriba mientras que Amer con los brazos cruzados reprochaba.
- ¡Mal!
- Lo siento pero fue lo que pude encontrar en tan poco tiempo, pero pasemos a lo importante, ahora que el ministro Houdini nos ayudará no tardaremos en encontrar a Gabriel, pero debemos aumentar nuestros esfuerzos de búsqueda y para eso les explicaré cómo están construidas las 6 islas, ya que sería raro que unos Elfos y un duende no tengan idea sobre las razas que existen aquí — exclamó Miguel seriamente.
- Pero no veo que allá problema, se ven muy amables — respondió Rul a lo cuál Miguel contestó.
- Claro, creen que son Elfos pero si se enteran que son humanos habrá un gran caos, por el momento solo el ministro Houdini sabe de ustedes y nadie más debe saber, escucharon.
- Si señor — respondieron todos aunque inconformes por lo que les había ordenado Miguel.
- Les explicó, existen 6 Islas que conforman las Islas Místicas, la principal es el reino de Mahebrus donde habitan los magos, hechiceros y brujas.
- Emmm… y cuál es la diferencia — exclamó Mery con curiosidad.
- Los hechiceros vienen siendo los nobles en su mundo, son los que llevan una túnica de cuerpo completo y los magos son los plebeyos, se visten como Nilrem y las brujas y brujos son seres que pactaron con algún demonio para obtener poder. Su rostro está envejecido, con una gran nariz puntiaguda y su sombrero si bien es igual que el de los magos y hechiceros este es de paja.
- Y andan en escobas voladoras y con gatos negros — exclamó Yuno animado.
- Emmm… no entiendo — respondió Miguel algo confuso.
- No le haga caso, es un estereotipo que tenemos hacía las brujas en nuestro mundo — respondió Mery dándole una palmada en la cabeza a Yuno.
- Lo siento es que no me resistí — exclamó Yuno con una sonrisa y algo de sarcasmo mientras se agarraba su nuca donde lo había golpeado Mery.
- Oh a eso se refiere, sí de echo las usan como medio de transporte, pero también los magos y hechiceros las usan.
- ¡Oh genial! Quiero una — exclamó Yuno a lo cuál al voltear a ver a Mery ésta estaba a punto de darle otra palmada.
- No espera, está bien, no diré más tonterías y tomaré enserio esta plática — respondió Yuno mientras se cubría su cabeza con ambas manos y Mery bajaba su mano lentamente mientras lo miraba fijamente, acto seguido ambos soltaron una pequeña carcajada.
- Qué curiosa pareja son ustedes — exclamó Miguel con una sonrisa en su rostro.
- Ok, continuemos con la explicación, la segunda isla es el reino Duelforis aquí habitan los Elfos y Duendes, se identifican por ser grandes guerreros en el combate cuerpo a cuerpo con espada y algunos logran controlar un elemento ya sea alguno de los 4 principales. El tercer reino lo conforman los hombres lobo y las mujeres tigre, las mujeres Tigres como dice su nombre, la parte superior de su cuerpo así como su rostro es de un humano, las orejas son de felino y poseen unos grandes dientes filosos, la parte inferior lo que vendría siendo sus piernas son de un tigre aunque éstas se mantienen erguidas como un humanos, poseen una cola que les ayuda a mantener el equilibrio, y si bien, sus brazos son humanos tienen unas grandes garras en vez de uñas, por otro lado, los hombres parecen humanos comunes y corrientes pero cuando se transforman se convierten en grandes lobos con la diferencia que aún mantienen algunos rasgos humanos como mantenerse erguidos y hablar, a ésta isla se le denominó Logreris.
- Se transforman, ¿Sin ayuda de una luna llena? – preguntó Rul sacado de onda.
- Ese es sólo un mito de los humanos, los hombres lobos pueden cambiar de forma a su antojo, a diferencia de las mujeres tigres ellas siempre están convertidas — respondió Miguel aclarando la incógnita de Rul.
- Bien, ahora la cuarta isla, el reino de Síracen donde habitan los centauros hadas y sirenas, los centauros son similares a los minotauros aunque estos ya están extintos, el último era el que custodiaba el laberinto pero el equipo Trinity lo derrotó en su ida al inframundo.
- Ese es mi equipo — respondió Yuno con una sonrisa pero rápidamente fue golpeado en la nuca por Mery.
- No es gracioso, no importa como lo veas, la muerte es triste — exclamó Mery un poco molesta por la actitud de su esposo.
- Me da gusto ver que eres la razón de éste equipo — exclamó Miguel con una sonrisa en su rostro.
- Gracias — respondió Mery sonrientemente.
- Bueno como les decía, los centauros la parte inferior es de un caballo y la parte superior humana, fuera de eso no tienen ningún otro rasgo, simplemente es un caballo con el torso de un humano. Las sirenas tienen el torso humano, la mayoría son hembras y éstas se encuentran desnudas y solo sus pechos están cubiertos por algas marinas, y lo que es la parte inferior es de un pez, su belleza es inigualable pero son seres crueles y despiadadas, cuando habitaban la tierra usaban su canto para atraer a los barqueros y pescadores hipnotizados por su belleza y su voz para luego devorarlos, los machos sólo se usan para la  reproducción. Las Hadas son de los seres más bondadosos que existen, la mayoría al igual que las sirenas son hembras aunque los machos están en decadencia por los humanos que los cazaban constantemente para hacer rituales, la mayoría viven siendo pequeños no más grande que una simple mariposa pero al igual que los lobos, pueden transformarse y éstas toman el tamaño de un humano promedio, tienen alas similares a las mariposas, curiosamente tejen su propia ropa con hojas del árbol que le da vida a su isla llamado “La semilla”. Los otros 2 reinos son muy oscuros a diferencia de los demás, estás 2 islas son volcánicas y constantemente están en erupción, el cielo siempre está oscuro por las cenizas que lanzan los volcanes.
- Supongo que como la isla de Amaterasu — interrumpió Yuno drásticamente.
- Muy similar — exclamó Miguel y luego prosiguió.
- En estas 2 islas no hay reinos, viven bestias sin razonamiento que sólo se dedican a comer y dormir, la isla más grande de las 2 es la Isla “Dragón Force”, aquí yacen los dragones, vampiros y cíclopes aunque estos últimos están en peligro de extinción, algo curioso de los cíclopes además del echo que solo lo cubre un taparrabo, es el contrato que existe ya sea con un mago, bruja o hechicero
- No lo entiendo — exclamó Lorem confundido
- Lo explicaré más claramente, hay un hechizo llamado “el ojo del maestro” donde el cíclope elegido por el creador del conjuro, crea un lazo inquebrantable donde el cíclope adquiere un poco de inteligencia y le servirá hasta la muerte al hechicero, mago o bruja que haya pactado el contrato con él, en cambio los Vampiros aunque tienen inteligencia, su sed de sangre es tanta que cuando tienen hambre pierden total control sobre lo que hacen, estos se visten muy refinados como un líder híbrido pero sólo salen de noche ya que la luz del día los quema, no por nada esa isla es su preferida ya que ésta siempre está en completa oscuridad. La última isla es la más peligrosa de todas, si bien, es muy similar a la “Dragón Force” en ésta habitan los caminantes, seres que ya no podríamos decir que se encuentran vivos pues no tienen alma son seres huecos que solo vagan por la isla en busca de comida, no poseen ningún tipo de inteligente pero son extremadamente agresivos, eviten viajar a aquél lugar.
- ¡De acuerdo! — gritamos todos al mismo tiempo a la orden que es había dado Miguel.
- Mañana seguiremos con la visita descansen joven guerreros, buenas noches — exclamó el Arcángel Miguel y acto seguido se marchó de la habitación dejando a Yuno y sus amigos descansar esa noche.