A lo largo de mi vida he tenido muchas incógnitas, me he cuestionado hasta el aleteo de una simple mariposa, pero justo ahora solo tengo una.
¿Amar?
Suena cómo algo grande, pero ahora para mí, imposible. He escuchado a la gente decir y en especial a mi abuela repetirlo: «Amaras a dos personas. Uno será aquella que te muestra ese lado rosa de la vida. Quizás no va a ser el correcto. El otro una decisión de amor propio al decidir compartir sus vidas. También te mostrara una realidad. Algo más fuerte los unirá».
«Uno es brújula, el otro es destino. Si ambos son uno, considérate con suerte».
Mi mamá siempre me dijo muchas cosas, entre ellas que lo sabría, que conocería a ese alguien qué me amara, pero aseguraba que no iba a estar enamorado todo el tiempo, yo le respondí:
—Madre no lo sé, quizás ese alguien soy yo misma, pero sigo perdida dentro de mí. He visto no solo corazones rotos, también personas. Prefiero por el momento quedarme de este lado. — Ella simplemente se reía y yo supongo que era por mi experiencia pasada.
¿Nunca les dijeron que las mamás siempre tienen la razón? Nunca entendí del todo esa frase, hasta hoy. Pero esta vez es un casi siempre.
Yo esperaba solo dos palabras y él fue tres. Él se creyó mi despedida y yo me encontré...
Amor, secretos y las consecuencias de un pasado oculto.
Editado: 06.02.2021