Jasuke.

El ambiente era tenso, se podía notar, el nerviosismo de Keirot era evidente, Jasuke estaba confundido, no sabía que ocurría pero un escalofrío recorría su espalda, sentía miedo pero no sabía a que exactamente, quizá la reacción de su amigo, pero no había nada, no podía ver algo a lo cual temerle, pero irónicamente, no ver nada era lo que le causaba temor.

Keirot seguía inmóvil, no sabía si aquello era real, pero su voz parecía serlo, miró de reojo a Jasuke y este no parecía reaccionar a nada, ¿Era una ilusión? Solo él lo podía ver, comenzaba a considerarlo como tal, a nada estuvo de girarse para continuar la plática, cuando de pronto la voz de Zet le alertó, "¡Cuidado, mocoso!", gritó el Vairant, despabilando al joven, enterándose justo a tiempo de lo que ocurría.

Aquella criatura arremetía contra ellos, corría con una clara intención de embestirlos con violencia, era una fortuna encontrarse en el estado en el cual estaba Keirot ahora, con Zet activo, él pudo reaccionar a tiempo, lanzándose contra Jasuke para apartarlo del camino, fue justo a tiempo, ya que poco después aquella bestia pasó por aquel trayecto, golpeando con furia el árbol.

Jasuke iba a reclamar, pero el sonido de las hojas y ramas sacudiéndose le daban una clara muestra de que su amigo no estaba jugando, ahora su temor se acrecentó, algo en verdad les atacaba y él no podía verlo, no sabía si era mejor o peor, lo único que sabía era la posibilidad de que sus vidas corrieran peligro.

- Keirot: ¡Debemos irnos, ya!
- Zet: ¡Espera, mocoso! ¡¿A dónde crees que te meterás?! Si huyen, esta cosa los va a perseguir, debe pensar que son una amenaza, ¡Tienes que derrotarlo!
- Keirot: ¡¿QUÉ?! ¿Estás loco? ¿Qué demonios voy a hacer yo contra eso?

Zet ni siquiera tuvo tiempo de responder, ya que ambos se enteraron de que el enemigo pronto volvió a intentar atacarlos, esta vez logrando atrapar al joven Keirot por la cabeza, toda la palma era suficiente para atrapar la cabeza y presionar la misma con los dedos, el joven se sujetaba de la muñeca ajena, presionaba y pataleaba intentar soltarse.

"¡Suéltame, asqueroso!" ordenaba Keirot junto a un pataleo insistente, intentos fallidos de propinar algún golpe en alguna parte del cuerpo. Jasuke recién estaba intentando levantarse, desde su perspectiva, solo miraba a Keirot pateando, flotando y sujetando algo frente a él, pero no podía ver ni siquiera la silueta de lo que se suponía estaba ante ellos.

Su instinto despertó, dejando de lado el miedo, pudo notar que su amigo corría peligro y él debía hacer algo o eso pensaba, deprisa se puso en pie, cogió alguna rama cercana, mismas que algunas veces podían usar para alguna hoguera, con su "arma" en mano comienza a lanzar golpes a diestra y siniestra, calculando mas o menos la ubicación de eso que agarraba a Keirot, en dado momento, la rama impactó algo, eso era tan resistente que el palo se partió con mucha facilidad y no parecía afectar a aquello que golpeó.

Jasuke se quedó atónito, mirando el trozo de rama que le quedó en las manos, si había algo, pudo ver como se partía justo frente a sus ojos al impactar la aparente "nada", el miedo regresó, está vez apoderándose de él, no le permitía moverse, sus brazos y piernas comenzaron a temblar, al fondo escuchaba los gritos de Keirot pero no lo entendía, estaba aturdido por sus propios pensamientos.

"¡VETE!", gritaba con desespero Keirot, quería que se marchara lo antes posible, la criatura solo bajó la mirada y con su extremidad libre propina un fuerte golpe con el dorso de la mano, justo en la mejilla de Jasuke, el golpe fue capaz de elevarlo un poco del suelo y hacerle volar unos cuantos metros, terminando por arrastrarse y dar un par de rebotes hasta perderse de vista entre algunos arbustos que habían cerca.

- Keirot: ¡NO! ¡JASUKE!
- ???: Parece que ese era un humano común y corriente... pobrecillo.
- Keirot: ¡HIJO DE PERRA! ¡¿CÓMO TE ATREVES A LASTIMAR A JASUKE?!

Keirot gruñó con agresividad, la musculatura de sus brazos aumentó un poco, las venas se veían un tanto resaltadas, la electricidad que rodeaba su cuerpo estaba aumentando su frecuencia, incluso emitía ese pequeño ruido chispeante, poco a poco parecía adaptarse mas y mas a los poderes que el Vairant le brindaba.

Parecía que se iba a desatar, pero antes de lograr hacer algo, aquella criatura impacta con su puño justo en el vientre del chico, golpe lo suficientemente fuerte para dejarlo sin aire y además también enviarle a volar contra el tronco de un árbol que se encontraba al otro lado del riachuelo,

El impacto hizo vibrar el tronco junto a sus ramas, varias aves volaron despavoridas por el repentino movimiento. Keirot emitió un par de quejidos, su espalda dolía un poco, pero mucho menos de lo que esperaría, ni siquiera se percató de la pequeña línea de sangre que recorrió desde la comisura de sus labios, se sentía perfectamente, tanto que se levantó al poco tiempo.

- ???: Debiste pensarlo dos veces antes de entrar al territorio de Zagam.
- Keirot: ¡En mi vida había visto cosas tan feas como tu! ¿¡Cómo esperas que supiera que este lugar era habitado por un monstruo horrendo!?
- Zagam: ¿A quién tratas de engañar? Está claro que perteneces a este mundo...
- Keirot: ¿Eh? ¿Este mundo?

Zagam no permitió que Keirot siguiera preguntando, así que sus dudas no serían resueltas, el grandulón agresivo volvió a ir contra Keirot, saltando sin problema la corriente de agua que los separaba, tenía intenciones de pisar con ambas patas al muchacho, aunque este no se quedó mirando, sabía lo que venía, por lo cual rueda en el suelo para esquivarlo, vuelve a rodar una vez mas para ponerse de pie lo antes posible.