10 Razones Para No Enamorarme De Ti

CASUALIDAD O ESTRATEGIA

Voy tarde a clases de música, esta mañana fue realmente difícil levantarme temprano, voy corriendo como loca por los pasillos cuando siento que cocho con alguien, caigo de culo al suelo. 

 

—¡Mierda! —Exclamo molesta. 

 

Levantó la mirada y observo a Kiran, quien me da una mirada de disgusto y frunce los labios molesto. 

 

—No podías buscar otra excusa más creíble para manosearme nerd —me dice con una ceja levantada. 

 

—Eres un completo imbécil, tú, te atravesaste en mi camino —le digo señalando con mi dedo de manera acusatoria. 

 

—Como si quisiera verte —dice con una sonrisa burlona y se aleja. 

 

Me deja allí tirada en el piso, eso me pone más furiosa, me levanto del suelo molesta, me quedo doliendo el trasero, continuo avanzando, ese imbécil daño mi día por completo, entro al salón y el profesor me observa con los brazos cruzados. 

 

—10 minutos tarde señorita Hall. 

 

—Lo lamento profesor —murmuro. 

 

Todo gracias a ese imbécil, pase el resto del día platicando con Natalia que se ve muy a gusto charlando conmigo, entonces decido contarle lo que sucedió esta mañana. 

 

—No puedo creerlo, ¿ni siquiera te ayudo a levantarte? —Me pregunta indignada. 

 

—Como lo escuchaste, eso fue lo que sucedió, simplemente arruinó mi día —me quejo. 

 

—Aléjate lo más que puedas, ese chico es lindo por fuera, pero un demonio por dentro. 

 

Las palabras de mi amiga retumban en mi cabeza, el castaño tiene muy mala fama, las horas empezaron a pasar rápidamente, tengo demasiada materia, estos profesores quieren volverme loca, camino hasta la salida con mi amiga, su madre vino por ella. 

 

—Nos vemos en unas horas Anto —grita mientras se despide con sus manos. 

 

Regreso a casa cerca de las tres de la tarde, me encierro en mi habitación, estoy escuchando SOS de Avicii, me acuesto en la cama, me imagino que mi amiga vendrá en unas horas, escucho el timbre, salgo de mi habitación rápidamente, bajo las escaleras de dos en dos, cuando abro la puerta me encuentro con esos hermosos ojos azules que me observan sin mostrar emociones, trae unos lentes puestos y una camiseta blanca, observo cada detalle de él, en estado shock. 

 

Mierda no sé por qué carajos me pone tan nerviosa, antes no tenía este tipo de reacción cuando veía a un chico, solo es un ser humano normal, trato de mantener la calma, quien podría verse tan bien usando lentes, ¿qué carajos hace aquí? Me pregunto a mí misma. 

 

—¿Necesitas algo? Recuerda que no te interesa hablar con una nerd como yo —me cruzó de brazos y lo miró fijamente. 

 

Trato de recordarle sus palabras, levanta una ceja y su mirada recorre mi cuerpo con descaro, se queda en silencio unos segundos, siento que voy a desmayarme, pero trato de mantener la cordura. 

 

—El perro de mi hermana cruzó la cerca, ¿puedo pasar a buscarlo? Y en realidad no me interesa hablar contigo —dice con sarcasmo. 

 

Habla sin desconectar su mirada de mí, miro al suelo para evitar que note que estoy a punto de arrojarme a sus pies, me muerdo el labio con nerviosismo, suspira molesta si no quiere hablar conmigo qué carajos hace aquí. 

 

—Está bien, ¡sígueme! Además, pudiste enviar a tus empleados, no era necesario que vinieras en persona. 

 

Camino lentamente por los pasillos, él me sigue de cerca, si mi amiga estuviera aquí fijo lo mata, trato de alejar esos pensamientos, me detengo en seco para tomar las lleves de la puerta trasera, siento cuando su cuerpo choca conmigo, me tambaleo un poco. 

 

—Lo siento —me dice cerca del oído. 

 

Diablos, siento una corriente eléctrica recorrer mi espalda, me siento más nerviosa que al principio, abro la puerta y le permito pasar, siento que está jugando conmigo. 

 

—Puedes buscar al perro —murmuró —date prisa. 

 

Me muestra una sonrisa y sale al patio, lo sigo, siento que esto no es real, creo que estoy soñando en realidad, veo que llama a la mascota y en segundos veo que aparece un precioso cachorro blanco, estaba entre las plantas de mi madre. 

 

—¿Kiran puedo saber qué diablos haces hay? 

 

Escucho la voz de Kaleb, el chico está del otro lado de la cerca observando a su mellizo con los brazos cruzados, Kiran pone los ojos en blanco y toma al cachorro en sus brazos. 

 

—Ese no es tu problema, no molestes. 

 

—¿Estás jugando a cazador y presa, no es verdad? —Escucho la risa sarcástica de su gemelo —¡Cuidado te quemas bro! 

 

Se gira y se va, observo al chico Adams con cautela, que le quiso decir su gemelo. 

 

—Listo, no necesito nada más nerd. 

 

Se gira y se pierde por la puerta, lo sigo y cierro con llave, camino por los pasillos y lo veo de pie en la puerta principal. 

 

—Gracias. 

 

Es lo único que dice, abre la puerta y sale de mi casa, bueno ese perro me hizo hablarle de nuevo al chico de ojos azules, es un completo imbécil, recuerdo lo que sucedió en la Institución y me regaño mentalmente por ser tan sumisa. 

 

Bueno, en realidad él ni me nota, no sabe que existo, fue cuestión de suerte, eso creo, subo las escaleras para volver a lo mío, esto tengo que contárselo a Natalia, cuando voy a subir de nuevo el timbre vuelve a sonar, me giro molesta, de seguro olvido algo, abro la puerta rápidamente. 



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En el texto hay: traicion, amor, badboy

Editado: 30.01.2024

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