Capítulo 7

Cual era el problema, no entendía por que me estaba gritando se le oía muy molesto hasta ahora había hecho las cosas bien

—no entiendo a que quieres llegar

—no has hecho las cosas bien acaso no te queda claro

—no me queda claro por qué lo único que haces es gritarme

—eres una insolente cuenta los días no te quedan mucho lo has escuchado

—claro que….

El muy cobrón me corto la llamada, tire el maldito teléfono sobre el sofá para después hacerlo yo todo esto era frustrante para mí no estaba acostumbrada a trabajar bajo presión  

—ven cariño dale amor a mamá —estire los brazos hacia mi gato

—tu eres el único que me comprende

Lo acaricie mientras, este se apegaba mas a mi cuerpo por un lado me presionaba uno y por el otro a quien debería de obedecer todos los malditos hombres de esa agencia eran unos completos idiotas creyendo que yo iba a seguir sus órdenes vastas con eso a hora seria yo la que jugaría su propio juego no necesitaba de su ayuda, voy a completar esta misión sin que esos babosos me ayuden y cuando termine todo arrojare todas las pruebas sobre sus asquerosas caras.

—mamá tiene que ir a patear traseros —el gato me miro para proceder a echarse sobre el sofá

—gracias por el apoyo

Sali de ahí con una sonrisa en los labios, primero tendría que ir a trabajar era en ese lugar donde tenia que conseguir todas las pruebas necesarias para destruir a ese tipo llamado Gael que hasta hora no lo he visto pero tan pronto como a si fuera haría lo que sea necesario para conseguir todo lo que quiero, no dejaría que nadie me vuelva a dar una maldita orden

—buenos días—porque estas tan contenta hoy   

—siempre estoy contenta

—no es cierto — negó la chica cruzando se brazos

El sonido de la cafetera indico que el café estaba listo, como al jefe le gustaba sin azúcar y amargo como su triste cara en ver da ese hombre era como un cubo de hielo siempre serio orden por acá orden por allá yo nací para dar ordenes era lo que todo su cuerpo decía

—su café y el informe de esta semana —puedes retirarte

Como si desea estar a su lado un segundo mas con verle la cara era suficiente para mi

—de acuerdo—ofrecí una sonrisa de labios cerrados dando media vuelta

Era un idiota, por completo me senté en mi escritorio mirando la pantalla de la computadora solo esperaba que mi maldito que jefe hoy no me deje de mucho trabajo, pero estoy pensando que solo lo hace por placer o me tiene colera una de las dos cosas, pero algo se trae conmigo eso era un echo estoy completamente segura

—mi padre vendrá esta tarde

Lleve mi mano a mi pecho el susto que me había dado casi causa que mi débil corazón se detenga en qué momento había llegado

—perdón su padre vendrá—a si es prepara los informes de contabilidad

—si ya los tengo listo seguro en unos minutos

Solo cerro los parpados, caminando nuevamente a su oficina maldito egocéntrico ojalá se resbalara y muriera en ese mismo distante, espera Amaya acaso dijo su padre no había escuchado mal su padre vendría este era mi momento.

Informes listos, todo debía de estar completamente listo

Mire con impaciencia el reloj que colgaba al frente mío nada que llegaba el famoso Gael mi verdadero jefe no podía creerlo y yo que pensaba que los grandes empresarios eran responsables

—señor disculpe—¿qué quieres?

Si no fuera mucha molestia me gustaría partirle la cara

—despierta que quieres

—yo —si tu habla

—solo le venia a decir que si su padre vendrá o no es que mi hora de trabajo

—si ya se que en pocos minutos te tienes que ir —entonces

—no lo se creo que puedes irte —de acuerdo

 Asentí con la cabeza, dando media vuelta en dirección hacia la puerta cuando detrás de mi se escucho un sonido fuerte inmediatamente volteé

Arque las cejas a tal escena, que había pasado mire a Thomas el cual tenia los ojos llorosos que había sucedido solo había dado algunos pasos las cosas del escritorio estaba tirados en el suelo claro como el no los iba a recoger no había problema  

—que le sucede—que te importa me debo de ir

Maldito idiota, que me importaba si le pasaba algo cogió su saco acaso estaba temblando

—las llaves donde están—señor le puedo ayudar

—no necesito de tu ayuda —lo veo mal puedo ayudarle en serio

—eres insoportable—ven, conduce

Cogí la llave no sabía a donde iba solo estaba conduciendo hasta que el semáforo nos impidió seguir el paso miré de reojo hacia Thomas el cual tenia una cara de disgusto

—a donde vamos—al hospital

Volteé para mirarlo con sorpresa, pero este no me mostro algún signo de vida en todo su rostro, pero si su padre no llego quizás el esta en el hospital o por dios, el señor Gael se nos murió antes de tiempo nunca había tenido tan mala suerte, sacudí mi cabeza de la estupidez que estaba pensando conduje con más prisa

Apenas el auto se detuvo, Thomas bajo con prisa corriendo hacia la entrada del hospital luego de estacionar el auto también fue detrás de, él tenía que averiguar qué estaba pasando

Y donde iba a buscar a hora el hospital era grande, mire a todos lados solo había pacientes y doctores corriendo de un lado para el otro

—disculpa—dígame —ha visto a un joven alto con rasgos de Moledo cara de pocos amigos y terno negro —la mujer me miro extrañada —tiene el cabello castaño medio ondulado

—no señorita no se a quien se refiere  

—las características que acabas de dar describen perfectamente a mi hijo

Voltee inmediatamente, al frente mío estaba un musculoso hombre bestia tan elegantemente sus ojos cafés claro impactaron con los míos una corriente re corrió todo mi cuerpo, trague saliva que demonios le estaba sucediendo a mi cuerpo

—no creo que sea su hijo usted es ..como decirlo olvídelo