Capítulo XVI- Como una oruga

Cuado escuchas la palabra renacer ¿En qué piensas?

Yo, en una oruga; cuando piensas que todo acabaría y  terminaría así, te conviertes en mariposa.

Cuando estamos pequeños, pensamos ¿Cómo será cuando tengamos 15, 20, 30, 40?

Ah, pero cuando llegamos a la cuenta de los 50, pensamos en una persona llena de arrugas, sentada en una mecedora esperando que todo llegue a su puerta, y muchas veces una persona usando hasta caja de dientes, caminando con un bastón o talvez solo decimos:

"Ya estaré muy anciana para estar en el medio, por eso viviré toda mi juventud para no andar de  loca a esa edad"

Muchas veces cuando llegamos a una edad, creemos que todo se acabó, que ya no hay más nada que explorar, sentir, vivir.

Y estamos en lo incorrecto aunque no sepamos reconocerlo, nunca deberías sentirte "Vieja" aun estando en los 70 años, si tienes ganas de vivir; Hazlo.

No dejes que las criticas, comentarios o creencia de los demás, te impidan renacer. Nunca es tarde para empezar de cero.

Cree en ti.

Porque yo a la edad que tengo, creo que sigo siendo la misma; la misma niña, adolescente, joven, adulta. Los años son solo experiencias, y las experiencias te hacen  sabio.

La oruga es el mejor ejemplo para dar a conocer que después de momentos de soledad, algo hermoso siempre sucederá. Porque todos tenemos un par de alas invisibles.

Para ser mariposa tienes que pasar por etapas; Necesitaras tiempo para convertirte y salir del capullo. Y por fin ser libre.

Porque sin proceso no hay transformación...

Mi noche fue la más ligera de toda escuchando las aventuras de mi querida Angélica, pero teniendo en mente a ese hombre de encantadora sonrisa, es que me tiene en el aire siento que estoy sanando mis pequeñas cicatrices y volviendo a sentirme así de especial empiezo adorar esta sensación...

—Abue ¿Entonces que opinas?

—¿Eh? Perdona ¿Me podrías repetir?

—Ya la perdimos...

—¿Como así? ¿A quién?

—A usted misma, mira como anda en las nubes ¡Ay! No pellizque, la neta hay que decirla usted está bien enamorada

—Angélica ya es tarde vamos a dormir.

—No, usted me va a responder... Venga cuénteme ¿Cómo le llama? "Mi amor" "Querida" "Princesa"

—Angélica si vuelves a hablar te vas de mi habitación.

—¡Ay esta enamorada!— Empece a reír ante sus carcajadas contagiosas...

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Gracias por tu apoyo.

Bendiciones.