No se hace cuanto tiempo que estoy aquí encerrada, escucho gritos afuera, pero no se que esta pasando y no quiero salir. Tengo miedo.Mis amigas, no se donde están, no han entrado al baño aun. Me dijeron que todo iba a estar bien pero no llegan.
Otra vez se escuchan disparos, creo que ya no vendrá. Estoy encerrada en uno de los cubículos clausurados, me metí por debajo todo mi vestido esta mojado por el agua del piso.
Le escribo a mi mama... le digo que todo esta bien, que volveré a horario. Ella me pregunta si estoy segura de que todo estaba bien, ya que no suelo escribirle por la noche cuando salgo con mis amigas. Le respondo que si y que la amo con toda mi alma... que la extrañare, apague mi teléfono y me abrace a el cerrando los ojos.
Escucho que alguien entra corriendo y gritando, cierra la puerta de un golpe y llora tratando de que esa persona no entre, ojala no me descubran.
Esa persona entro y le disparo a la chica que gritaba por favor que no la mate... pero a esa persona no le importo. El asesino empezó a patear las puertas del los cubículos abriéndolas y disparando en cuanto estaban totalmente abiertas. Estaba llegando a donde yo estaba, estaba cada vez mas cerca.
Desperté en mi cama, fue solo una pesadilla, me levante y fui a la cocina. Encendí la televisión y había una noticia que hizo que se me llenaran los ojos de lagrimas. El boliche donde mis amigas habían ido hubo una masacre anti-LGBT, agradezco no haber ido y lamento no haber podido persuadir a mis amigas de que no vallan, y ahora estaban muertas.
No puedo creer que aun haya gente así, gente cruel que le parece una plaga la homosexualidad. Personas sin corazón, que no pueden ver que el amor no importa a quien valla dirigido sigue siendo amor, y eso es mas fuerte que el odio de este tipo de personas