A Pesar De La Heridas || H.S

CAPITULO 5

 

Vamos de camino a Monticont, y como raro vamos muy tarde, tía Kenny, hasta que no dejo regadas las plantas, la ropa doblada, y muchas más cosas no quiso salir de la casa, soy la que tiene que aguantarse los audios de Laila, donde me dice que soy la peor amiga que jamás allá podido tener, ellos ya están en el restaurante y a nosotros aún nos falta media hora; pues si ya esperaron los más, que esperen lo menos, yo le dije que bien podrían empezar sin nosotros, pero la muy tonta dice que no me haga la ofendida cuando es ella la que me está odiando en este momento.

Al momento en que llegamos no podría sentirme más incómoda, todos están reunidos en la mesa del restaurante, y cuando digo todos es a todos. Siento la necesidad de aclararlo porque está el chico que se ha llevado mis pensamientos por las últimas semanas, tía Kenny como siempre muy amable con todos al igual que tío G.

–Creí que se habían perdido, pero como ya hemos estado muchas veces en Monticont no entiendo que pudo suceder –yo no podría ver peor a Laila, en su momento le expliqué la situación y aquí esta recriminando como si no nos sintiéramos bastante culpables. Tía Kenny, es algo más sensible que cualquier otra persona y el color de su cara me confirma que está más que avergonzada.

–Si bueno, tampoco tienes que comportarte como una perra, a veces las cosas no salen como se espera –los padres de Laila tienen su rostro perplejo por mis palabras, Kenny, me da un apretón en la muñeca, por el contrario, los amigos de Jasón tratan de aguantar la risa, mi amiga esta roja de la ira, y yo no puedo estar más que complacida con eso.  

Mientras todos se recuperan de cuales sean sus emociones nosotros tomamos asiento y estamos listos para ordenar.

Me decido por pasta, y no puedo estar más arrepentida de haberlo hecho, siempre he comido pasta por mi entrenamiento, pero nunca me he preocupado por la forma en que la como, ya que siempre como con mi tía y ella por supuesto no critica mi forma de devorar mi comida, he estado intentado llevarme el tenedor a la boca pero no quiero bajar mi cabeza hasta el plato, y menos cuando Harry, no deja de observarme, que puto, tiene una sonrisa ladeada en su rostro que me dan tantas ganas de acariciarlo con un solo golpe.

–¿Alexandra, por qué no comes? –mierda, el entrenador G, está viendo mi plato sin tocar, en el auto venía diciendo lo hambrienta que me encontraba y ahora no he dado ni una probada.

–Está caliente –lo digo por lo bajo para que nadie se dé cuenta de nuestra charla, pero eso no funciona porque parece que este señor tiene un parlante en la boca.

–Recuerda que entrenaremos al menos tres horas, no puedes perder el ritmo. –todos observan nuestro intercambio de palabras, y estoy odiando solo un poquito al entrenador G.

–¿Chicos si saben que Lex, estará en una competencia con profesionales? Es una de las mejores nadadoras que haya podido ver en toda mi vida –cállate sapo, gracias Jasón por tu halago, pero no quiero que todos me vean como lo hacen, y en especial ese idiota de ojos lindos.

–No es para tanto, solo es una competencia común –Dios, ayúdame a salir viva de esto, prometo que no volveré a asustar a las palomas, decir eso es como una bofetada al entrenador G, sus ojos no pueden estar más grandes, porque se saldrían de sus cuencas.

–¿Qué clase de mierda es esa Alexandra, una competencia común? ¿Eso es lo que significa para ti? –tía Kenny trata de que se relaje, pero él no se va a calmar tan fácilmente, nadie podría controlar a ese mastodonte cuando está enojado. –¿Quieres decir que todo el tiempo que llevamos entrenando para ti es solo algo sin importancia? –bien hecho Lex, has hecho que tu entrenador se enoje y se vaya hecho una furia del comedor.

 

Mi maravilloso tío se encuentra dándome la espalda, está apoyado en el balcón de la cabaña, y puedo notar lo tenso que se encuentra, a veces no logro entender lo fácil que es hacer que él se enoje, debe controlar sus chacras.

–Sabes que esto no es algo sin importancia para mí, sabes que amo la natación, sabes que este deporte ha hecho cosas maravillosas por mí –creo que debo decirle más seguido, lo mucho que amo la natación. 

–Tu sabes que yo, más que nadie, se la mierda por la que has pasado, pero me sentí culpable por un momento, es como si yo te hubiera obligado a hacer algo que no querías, nunca te pregunte si este deporte realmente te gustaba, mi estúpida mente solo asumió que así era, perdóname si he sido un cabeza dura –su mano se posa en mi hombro y suelta un suspiro.

–Nunca lo preguntaste porque en el fondo sabes que amo hacer esto, y más que saberlo, lo ves, las maravillas que hemos alcanzado con tu esfuerzo y el mío son sorprendentes. ¿O acaso las medallas y los trofeos que tiene tía Kenny, por toda la casa son de juguete? Por supuesto que no, ha sido de nuestro esfuerzo, de nuestro trabajo duro, somos un equipo tío…somos una familia.

–Lo siento linda, creo que la edad ya me está pasando factura –este hombre realmente es lo más precioso.

–No digas tonterías, te sigues viendo como un roble, tu eres la persona más maravillosa que podría tener conmigo, te amo tío G, nunca dudes eso.

–También te amo chica ruda. –Escuchamos unos sollozos y vemos a tía Kenny, que tiene su cara desbordando lágrimas, se acerca a nosotros y nos abraza. Esta es mi familia… para toda la vida

–Yo también los amo, no imaginan cuánto.

 

* * * * *

Voy por el pasillo que lleva directo a la piscina, para nosotros, los entrenamientos no son un juego, claro que disfruto de este deporte, pero ante todo debo esforzarme por alcanzar todas las metas que me he propuesto, voy tan perdida en mis pensamientos, que apenas caigo en cuenta, escucho pasos firmes, puedo ver la figura imponente de ese bombón de ojos lindos, ahora solo puedo pensar en que «mi meta, es que Harry, me la meta» 😲 ¡¡¡golosa!!!




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