Lo que me despertó no fue el frío.
Ni el sueño que no recordaba.
Fue ese maldito grito.
Seco.Crudo.Humano.
Como si alguien se rompiera por dentro... y por fuera.
Mi corazón se estrelló contra mi pecho y sin pensarlo, salí corriendo.
¿Por qué corrí hacia el grito y no en dirección contraria?
Ni idea. tal vez por eso mismo mi padre decía que no era normal. O que tenía la cabeza llena de sombras.
El bosque era un caos de ramas arañándome los brazos y hojas que no dejaban ver nada.La marque mi frente ardía con furia como si supiera algo que yo no.
Y entonces lo vi.
Estaba de pie.
Ahí.
Como si me hubiera estado esperando.
Era un chico.
Un jodido chico, misterioso con ojos negros.
Cabello oscuro piel manchada de sangre, expresión vacía...
Pero tan roto que casi quise tocarlo solo para asegurarme de que no se deshacía frente a mí.
Pero dió un paso.
No sé si fue el miedo o el instinto pero retrocedí.
Quise hablar, preguntar algo. No pude.
Lo único que salió fue mi respiración descompuesta.
Y corrí.
Las ramas me golpeaban la cara, la marca ardía como fuego líquido, y mi cabeza solo repetía un pensamiento:
"No te detengas".
Pero el bosque no olvida.
Tropecé.
Nose con que, solo caí.
El suelo estaba helado, las piedras cortaban.
Miré atrás.
Vacío
Él ya no estaba.
Ni el grito.
Ni el chico.
Ni nada.
Y el bosque se sentía más denso. más viejo. Me puse de pie no tenía idea de hacia dónde correr. Cada árbol me parecía igual. Cada sombra se burlaba de mí.
Y entonces lo entendí. Estaba perdida y no solo en el bosque, también dentro de mí.
Porque algo se había activado, algo que no podía detener.
Y todo empezó con ese maldito grito.
Oscuridad.
No la del cielo...
Si no es a que se te pega a la piel, que te hace sentir pequeña, ridícula,Como si el mundo pudiera tragarte sin darse cuenta. Estaba perdida.
Los árboles no eran los mismos pero tampoco diferentes, y el bosque ese maldito bosque respiraba.
Lo juro cada hoja temblaba con un ritmo que no era viento.
Me detuve gire en círculos intentando buscar algo cualquier cosa.
Nada.
--- ¡Maldita sea! --- grité.
El eco me devolvió mi rabia. Burlándose como si el bosque también supiera lo inútil que era todo esto.
El suelo crujió bajo mis pies.
Salte de pura frustración...
Que era esta sensación líquida.
¿ era un estanque?
Revise mi zapatos abajo estaba una flor
Una hermosa flor pequeña, blanca con amarilla.
¿Acaso era una nenúfar?
En cuanto note que la había aplastado lo sentí.
La marca.
Esa maldita marca en mi frente ardió como nunca antes.
Cómo si me arrancarán la piel desde dentro.
Me llevé ambas manos al rostro,
jadeando.
No podía gritar.
No podía llorar.
Es como si esa flor hubiera despertado algo.
algo que siempre había estado esperando a que yo llegara.
Algo que me estaba llamando.
Y no sabía si quería que lo encontrara...
O que huyera antes de que fuera tarde.
#657 en Fantasía
#274 en Thriller
misterio y dolor., misterio muerte traicion, libro de amor con magia
Editado: 29.06.2025