The Neighbourhood- Daddy issues
Fecha desconocida.
Odio sentir esto.
No aguanto más.
Tan solo quiero dejar de sentirme vacía, cansada.
Cada día que pasa, es un nevo recordatorio de todo lo que vivo.
Mismas personas, mismos problemas.
En ocasiones, siento que es solo una pesadilla, y ruego porque sea así, mas, sin embargo, cuando la luz traspasa las cortinas, me doy cuenta de que es solo un sueño.
Las pesadillas son una tortura, hace tiempo deje de sentirlas reales, deje de verlas, pero ahora, han vuelto con ganas de consumirme y no dejar nada.
Observo a la perfección mi yo de niña, rogándole a su padre quedarse, pidiéndole algo que jamás obtendré.
Las lagrimas bajan por mis mejillas, y me siento patética.
¿Por qué le rogaba cuando él me decía que ya no servía estar con mama? ¿Por qué me dolía ver a mis compañeros llevar a sus papas en los festivales? ¿Por qué anhele que el me ayudara con mis tareas? ¿Por qué, después de tanto tiempo, apareció? ¿Acaso no era mejor quedarme así?
Mientras esa imagen pasa, observo como mi tío me ayudaba con las tareas del kínder, tareas que me pedían ser realizadas con mi papa, pero el nunca estuvo presente.
Puedo ver a mama ocupando su lugar en los festivales.
Puedo ver mi yo escondido, escuchando los reclamos hacia el cuando llegaba tarde, y también puedo ver como le daba una bofetada, y mientras ellos estaban ahí en su discusión, yo me encontraba tapándole los oídos a mi hermanito, para que el no escuchara todo.
También puedo ver como le propino un golpe al ver como intenta repetir lo mismo de hace unos momentos un 27 de febrero a mama, como olvidar ese día.
Veo pasar todo en cámara lenta, las veces que me conformaba con las pocas migajas de amor que me daba.
Las veces que le pedía $5.00 para un chicle, y no tenía.
Y que al ver sus estados, lo miraba a el con su otra familia.
Si hay de algo en lo que me arrepienta, es cuando le permití levarme con su otra señora.
Pero, que querían que hiciera, si tan solo tenia 7 años y no sabía las cosas.
Cuando a ella la llegue a tratar como una amiga, que gran error.
Observar a mi madre recriminarme eso, me dolió bastante, en como ella hacia lo posible para que le dijera quien era ella, y que por miedo a que dejara de quererme le mentía, pero eso agraviaba las cosas, pues la mirada de decepción era tan profunda, que me sentía una basura.
También puedo ver, la vez que intenté terminar con mi dolor, aquella vez que estuve a punto de hacer una idiotez, solo para dejar de sufrir.
Observo como tomo aquel cuchillo, y sin saber qué hacía, lo pongo en donde se encuentran mis venas, con el solo pensamiento de que no dolerá, que el dolor físico será mas grande que el mental, pero que dejará de doler.
Rememoró todo eso y mucho más.
Todas las veces que herí a mis hermanos, con golpes o palabras, las veces que sin querer le pasaba a mi hermana mis inseguridades, las veces que trataba de sacar todo mi enojo, pero en personas equivocadas.
Todas las veces que desee con ganas morirme.
Terminar con todo esto.
Mas sin en cambio, nunca lo conseguí.