Capitulo 6 Un Viaje a la Ciudad de Florent
El sol apenas despuntaba en el horizonte cuando Alexis ajusto por ultima vez las correas de las alforjas. Todo lo que le quedaba en este mundo estaba ahí, dentro de dos bolsas y una manta enrollada.
La casa estaba vacia. Demasiado vacia.
Los muebles que alguna vez llenaron el hogar habían sido vendido. Las herramientas, los platos, incluso las mantas extras. Aunque realmente no le importaba tanto este asunto, su abuelo le habia dado una carta y que según sus palabras solo tenia que ir a donde un hombre que estaba en florent. Y ahí se solucionaria su vida financiera para que vivieran toda una vida cómodamente y sin preocupaciones.
Solo quedaban lo esencial: algo de comida, ropa, un cuchillo, un par de cuadernos donde solia dibujar, y lo mas importante.. el viejo caballo de su abuelo.
Alexis paso la mano por el lomo del animal.
-tu vienes con nostros cafecito-susurro, como si intentara convencerse a si mismo de que , mientras el caballo siguiera con el, algo de su abuelo tambien lo haría.
Unos pasos muy cerca de el, lo saco de sus pensamientos, cuando volteo sus amigos estaban ahí.
Jhon, el hijo del panadero con los brazos cruzados y una mueca de fastidio en el rostro.
-sabia que te irias sin despedirte- dijo con reproche pero sus ojos estaban rojos.
-bueno… despues de todo ya soy mayor de edad desde hace un mes a diferencia de ti- replico con una sonrisa.
A su lado, se encontraban Cristofer y Jhen quienes se miraban incomodos. No eran buenos con las despedidas. Y por ultimo, Karina uno de sus amores o es asi como la veía el.
La única chica del grupo con sus trenzas castañas y su expresión seria. No dijo nada, solo se acerco y le entrego una pequeña bolsa de tela.
-pan y queso…-dijo- para el camino.
Alexis tomo la bolsa con un nudo en la garganta.
-Gracias..
Jhon *suspiro*
-Florent esta a dos semanas y media de aquí… ¿estas seguro de esto?.
Alexis miro a Julie, que esperaba junto al caballo, abrazando al señor oso. A pesar de todo, la niña no lloraba.
El asintió.
-tengo que hacerlo.
*silencio*
Entonces Cristofer se acerco de golpe y lo abrazo con fuerza.
-no te olvides de nosotros, idiota.
Jhen le revolvió el cabello como solia hacerlo cuando eran niño.
Jhon solo sonrio y le dio un puñetazo ligero en el brazo.
-cuando venga a visitarte a la ciudad, preséntame a las chicas que conozcas ahí.
Alexis se rio aunque sus ojos ardían.
Karina fue la ultima. No lo abrazo no le dio un golpe o un abrazo. Solo lo miro a los ojos y dijo- nos volveremos a ver.
Alexis sintió que no podía responder solo asintió y se giro hacia su hermana.
-Es hora.
Subio al caballo y acomodo a Julie delante de el. Dio una ultima mirada a sus amigos y a su vieja casa, que habia sido su hogar y apretó las riendas.
El viaje probablemente duraría 2 semanas o 3 a mas tardar… de hecho podría ser mas corto si tomara otro camino pero miro a su hermana y negó con la cabeza. El camino mas corto era el mas peligroso, era uno por donde se podría encontrar con bandidos o monstruos… por eso, solo caravanas grandes con mucha seguridad tomarían estos caminos.
*****
El sol estaba en su punto mas alto cuando Alexis detuvo el caballo cerca de un arroyo para dejar que Julie bebiera un poco de agua. Habian avanzado bastante desde que salieron del pueblo, pero aun quedaban días de viaje.
El camino era ancho, pero de tierra compacta, con surcos dejados por ruedas de carretas. A ambos lados se extendían campos de cultivo, con campesinos inclinados sobre la tierra, sus ropas sucias de barro. Mas alla, pequeños bosques se alzaban como manchas verdes, y a lo lejos, un castillo en la cima de una colina marcaba la presencia de un señor feudal.
Cada tanto, pasaban carretas tiradas por bueyes, mercaderes con burros cargados de sacos, y campesinos que viajaban a pueblos cercanos para vender su cocechas. El aire olia a tierra, heno y estiércol, con un toque dulce de pan recien horneado cuando pasaban cerca de una aldea.
-tengo hambre..-murmuro Julie sentada delante de el en la silla de montar.
Alexis reviso su bolsa y saco un pedazo de pan y carne seca.
-Toma… solo hay esto por el momento. Compraremos algo mas llegando a un pueblo.
Julie hizo un puchero, pues no le gustaba la carne seca y el pan se sentia muy seco sin alguna bebida. Pero lo tomo sin quejarse.
Antes de que pudieran continuar, el sonido de cascos y pasos acercándose les hizo girar la cabeza. Por el camino venían tres figuras vestidas con capas de viaje y armas al cinto. Sus botas estaban cubiertas de polvo y parecían venir de un largo viaje. A simple vista pudo decir que eran aventureros.
El primero era un hombre alto, de barba corta y ojos afilados. Llevaba una armadura de cuero con placas de metal en los hombros y una espada al costado.
El segundo era mas joven, con cabello oscuro y una lanza atada a la espalda. Su ropa era mas sencilla, pero llevaba un amuleto de algun dios colgando del cuello. Y la tercera era un mujer con una túnica azul y un baston de madera. Una maga.
Cuando pasaron junto a Alexis y Julie, el de la barba los miro con curiosidad.
-No es común ver a un par de niños viajando solos… ¿viven por aquí?
Alexis sostuvo con mas fuerza las riendas. No le gustaba la forma en que lo dijo, pero tampoco quería problemas.
-vamos a Florent-respondio con calma
La maga le dio una mirada de arriba abajo y sonrio levemente.
-si ese es su destino, entonces compartimos el mismo camino. ¿les molestaría viajar con nosotros?
Alexis lo dudo. No conocia a esta gente y su abuelo le habia enseñado a desconfiar. Pero tambien sabia que el camino era peligroso. Si se quedaban solos, podrían ser presa de bandidos o bestias. El hecho de que hasta el momento no hubieran tenido problemas no le aseguraba nada.