una noche de miedo

a noche era fría y era invierno, las estrellas no se podían ver por las nubes que se mezclaban con la oscuridad de la noche mientras el pequeño Alex miraba por la ventana mientras la nieve caía, eran la dos de la mañana el todavía no podía dormir tenia insomnio por los ruidos de los carros de la ciudad el estaba en vacaciones, mientras su hermana dormía al otro lado de la habitación de el mientras la luz de la luna entraba por la ventana, todo en su mente estaba callado y tranquilo aunque sentía mucho miedo porque era la primera vez que dormía solo y en una nueva casa, el sentía que en cada esquina había alguien vigilando le y que en cualquier momento lo iban a asustar, lo único que podía ver eran las puertas de el armario y un ventilador viejo que colgaba de la pared, pero sin dejar de sentir una mirada desde la esquina de la habitación que para el no terminaba.

los pensamientos mas oscuros entraban en su pequeña imaginación, imaginaba cosas como manos que salían debajo de la cama y que también en ocasiones podía sentir que abrían la puerta pero solo era el viento que abrían la puerta, pero en igual manera en su cabeza pasaba toda una película de miedo, cada segundo era una eternidad y pesar de que asía frió el estaba sudando del el miedo que lo poseía así que cogió su cobija y se izo una fortaleza con ella, pero la sensación de que en cualquier momento algo le iba a tocar los pies.

a medida de que el tiempo pasaba las alucinaciones iban creciendo mas y mas, el no podía hacer nada ante lo que en su cabeza estaba el solo tenia siete años su imaginación era ilimitada, empezaba a sentir sueño y su miedo empezó a aumentar y cada vez eso que solo estaba en su mente lo empezaba a verlo afuera de la su mente.

esas criaturas eran deformes y con garras afiladas, solo podía ver sombras a través de la sabana, pero cada vez tenia mas sueño y poco a poco lo dominaba, aun que no era un niño que se metiera en muchos problemas pero su mente era muy tramada y nerviosa, cada vez era mas pesado y su miedo mas intenso, los ruidos se asían mas fuertes y misteriosos para el escuchaba puertas abriéndose pasos por la casa, voces susurrándole al oído el sonido del ventilador viejo sonaba mas fuerte y tétrico como si de una película de miedo como de tratase una película de miedo cada vez sus ojos se cerraban y sus alucinaciones empezaron a crecer tanto que sentía que lo tocaban, el se empezaba a acurrucarse​ mas para evitar ser tocado por lo que fuera que estuviese afuera viéndolo.

ya no podía abrir los ojos pero no iba dejar que lo que estuviese afuera lo tocara o le hiciere daño, intento mantenerse despierto y mantenerse alerta, sus pequeños ojos azules no podían mas así que se empezó a decirse a si mismo que nada era real pero no funcionaba y su miedo era mas profundo que antes pero no pudo el sueño pudo con el y tubo que dejar que su miedo lo poseyera y se durmió debajo de todas esas sabanas.