Alice slave girl

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Sinceramente, cualquiera en su lugar tendría el deseo de huir de ese lugar, y sin siquiera mirar atrás, pero ella en el fondo de su ser, tenía unas mínimas de esperanza, que crecieron luego de ver su habitación, aquella habitación rosa pálido, con decoraciones infantiles y con un notorio signo de limpieza y pintura fresca. Esto llevo a la chica que expresara su emoción ante el gran señor a su lado.

- ¿Usted estaba esperando por mí?, porque esta habitación esta tan hermosa y bien preparada que pareciera de que así fue.

Se gira con una alegría tan satisfactoria, como si todo mal pensamiento se hubiera desvanecido, trayendo la alegría nuevamente a la cara de aquella bella niña, y aquel señor solo se digna a mirarla mientras pronuncia con brevedad.

-Se podría decir que si, y que bueno que sonríes.  

Se voltea a mirarla con una sonrisa que ocultaba muchos secretos, se acerca a ella y la guía hasta el gran armario de madera donde al abrirlo se encontraban un montón de vestidos como de muñeca, y de los colores más hermosos que te puedes imaginar. Él le enseña cada uno de las aprendas que se encontraban allí y luego la guía hasta el baño que ella puede utilizar, al enseñarle cada parte de esa casa, le expresa solo 2 reglas.

-Primera regla, sonríe a diario y Segunda regla, solo puedes estar en las habitaciones ya mencionadas, a la hora de las comidas vendré por ti para que bajemos a comer y luego de eso vuelves a tú habitación. Tienes prohibido curiosear por el resto de habitaciones.  

Ella solo da un asentimiento de cabeza y ambos se dirigen de vuelta a la habitación. Él solo le dirige una fría mirada y sale de la habitación.


Ella solo se dignó a recorrer esa habitación, y disfrutar cada espacio de ella. Mientras él, en aquella cocina leía una receta para unos Hotcakes, con la única diferencia que tenían un ingrediente extra.

El arsénico... 
¿No saben lo que es el arsénico? Pues es el veneno que ha existido durante mucho tiempo, de hecho, se conocía y usaban mezclas desde el Imperio Romano.  

Pero no nos vayamos del hermoso relato, este hombre, tenía su ingrediente secreto para cada comida que le prepararía a esta pequeña niña. Te peguntaras ¿por qué? Ella no le ha hecho nada, y ten por seguro de que eso él lo sabe, pero sus intenciones solo podrías preguntárselas a él, y te aseguro.

No quieres eso.



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En el texto hay: misterio, suspenso, terror

Editado: 20.06.2020

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