Amada Mía

Capitulo 34

Armando.

Aparco mi coche en la residencia de los Úbeda. Md comunique en la mañana con David para reunirnos a conversar sobre los donativos de las dos Casa Hogar.

Bueno solo es una excusa ya que necesito información básica para poder hablar con los Castillo, sé que será una noticia fuerte si compruebo que Carime es hija de la Señora Ivania. Javier logró recaudar información en el hospital básica en el hospital.

Las grandes puertas de hierro se abrieron dándome paso. El señor David aparece junto a su señora esposa, ambos caminan hasta mí y me saludan estrechando su mano.

—Hola Armando Bienvenido.

—Hola David, hola señora Mireya gracias por la bienvenida.

—Pasemos al jardín— Sugiere Mireya.

David asiente dejando un beso en la mejilla de su esposa.

Llegamos al hermoso jardín forrado de varios tipos de plantas hermosas de varios colores inclusive una valla repleta de Margaritas. Carime se volvería loca las hermosas Margaritas.

—¿Jugo, Té o Café?—Me pregunto David sacándome se mis pensamientos.

—Un Té estará bien.

David llama a la señora de servicio y le pide que nos traigan un aperitivo y los Té. Empezamos a conversar sobre las empresas y el proyecto que empezamos a construir en unos meses.

—Disculpa Armando. Estas casado?— Pregunta David observando mi mano. Rápidamente percató que lo pregunta es por el anillo de matrimonio que llevo puesto.

—Ah, sí lo estoy— Respondí sin siquiera quitar la mirada de él.

—Pensé que estabas comprometido con la chica que trajiste, disculpa que sea entrometido pero, ¿Le has dicho a ella que eres casado?

Sabía que pesaría de esa manera, pero ni modo le diré que ella es mi esposa.

—Carime es mi esposa.

—En serio, disculpa como nos la presentaste como tu prometida.

—Descuida, lo que pasa es que yo dije eso, la verdad no tengo idea del porqué, aún esta joven y quizás no quería que se incomodara, aún no quisiera que ella se vea como una señora— Expreso sincero.

—Bueno en la edad no hay preámbulos para el amor, pero tu eres joven, rondas los 25.

—Si en eso tienes razón, nos amamos, por esa razón estamos juntos y si le llevo sus 5 años ella tiene 20 años.

—Ya que tomamos el punto de tu esposa, ¿Te fijaste el parecido que tiene con mis amigos?

Dios esto me está saliendo mejor de lo que espere, quería llegar al ese tema.

—Si me había fijado, al igual que ella, su parecido es impresionante, hasta juraría que fuesen familia— Indago para que el capte mi insinuación.

—¿A qué te refieres Armando?

Miro el pastel con relleno de fresa y pienso si sería bueno decirle todo y luego pedirle ayuda.

—David creo que mi Esposa y tus amigos tiene parentesco.

David se sorprende por lo que le dije. Niega soltando un suspiro.

—¿Cómo llegaste a esa conclusión sin conocerlos?— Cuestiona frunciendo el ceño.

—Bien, te diré que me entró la curiosidad de investigarlos y mis resultados me llevaron a esa conclusión.

—No entiendo, ella tiene a sus padres o ¿No?

—Unos malditos miserables. Discúlpame David pero da la casualidad que mi esposa no tiene rasgos de esa familia y hay cosas que ningún padre le haría a su hija. Como lo han hecho esos malditos bastardos, no me preguntes como lo sé, sólo quiero pedirte un favor. —David se afloja la corbata, toma su Té y me dice en un además que prosiga.—Necesito que le practiquemos un examen de ADN a ambos, no niegues el parecido con ella.

—Sí y mucho, pero la bebé mur…

Lo interrumpo rápidamente ya sé a qué quiere llegar.

—Si le dijeron que su bebé murió a las 5 horas de vida… pues da la casualidad que la supuesta “madre” de mi esposa perdió una bebé la misma fecha que la señora Ivania, ambas niñas y en el mismo hospital. No se te hace raro, incluso esa misma fecha desapareció la enfermera que atendió a la señora Castillo.

Se nota desconcertado lo sé.

—Dios, pueda que tengas razón ya que al nacer la bebé la vieron dos veces muerta y la doctora encargada del parto mando a decir que la bebé murió por ser prematura, luego se la llevaron y la pareja no la quiso ver al instante, sino hasta que la pusieron en el ataúd, Ivania estaba tan destrozada que solo la vio por un rato, le entregó una cadenita de perlas cristalinas a la enfermera para que se la pusiera en el cuello de la bebé, después de eso la llevamos a sepultar su cuerpecito, todo eso fue extraño, ellos estaban tan dolidos que no se percataron del rostro de la bebé.

—Todo pudo haber sido de esa manera, algo me dice que la doctora junto a la enfermera eran cómplices de ese par.

—Entonces eso quiere decir que el bebé que está enterrada en el patio de la casa de mis amigos puede ser la hija de los padres falsos de tu esposa.

—Supongo que si, por esa misma razón pido de tu ayuda, tal vez es muy poca la información y no sé cómo lo tomarían ellos en cuanto a esta noticia.

—Todo encaja a la perfección, porque la nena murió de repente y luego no lograron verla, nisiquiera mi esposa la vio porque ella paso por eso mismo aparte de eso ella es muy sensible debemos hacer esto con calma. Hablare con Mireya para que consiga un cabello de Ivania y mientras tú haces lo mismo, vamos al centro de biología molecular en la UCA. Al tener las pruebas podremos hablar con ellos, para ver como lo toman... has pensado como lo tomara tu esposa.

Ahora debo pensar claramente como decirle a mi esposa.

—No lo sé, no quiero que ella sufra, debemos llevarlo con calma lo digo por ella, espero que los Castillo acepten esta realidad y luego investigaremos como se dio todo esto, para así meter a los culpables tras las rejas.

David asiente.

—¿La cadena que ellos le dieron a la enfermera colgaba en el cuello de la nena al sepultarla? — Pregunto ya que yo pienso que esa cadena es la que me dio Carime cuando era pequeña.

—Te seré sincero, en ese momento no percatamos para nada, pero porque es la pregunta Armando.



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En el texto hay: pasión, amor, venganza

Editado: 25.04.2024

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