☀37. Nueva York parte 4.

Flashback.

No existen una relación perfecta. ¿Cuál es la verdadera clave para lograr mantenerse unidos? La confianza, la resiliencia, el trabajo en equipo. Todo esto lo tenían Alisson y Dylan, solo que ninguno de los dos estaba totalmente convencido de esto. 

Esa mañana, luego de que Alisson se durmiera en su pecho, Dylan abrió los ojos a eso de las 11 de la mañana. Lo primero que entró por sus fosas nasales fue el indescriptible olor a esencia de vainilla que desprendían los poros de la piel de la pelirroja que dormía junto a él. Con cuidado se logró remover de la posición y dejar de estar atrapado por la chica de sus sueños. Caminó hasta el baño y al verse en el espejo los males de ayer, los recuerdos de su cabello cayendo, las preocupaciones por el dinero, nada de eso estaba. Se esfumó, como su temor de decirle a la maravillosa chica de profundos sueños cuánto la quería. Muy predispuesto se cepilló los dientes. ¡Este sería su gran día! Lavó muy bien su cara, llamó a la recepción y pidió un costoso desayuno para dos. El aire que respiraba tenía aroma a felicidad y le encantaba sentirse así. Ya no se sentía el hombre indefenso, enfermo que podría no volver a mirar la vida desde la misma perspectiva que antes, quedando discapacitado en una silla de ruedas.  Pero un poco de esa felicidad se vio disuadida al recordar por qué la joven chica lo buscó. Alisson había sido terriblemente golpeada. Las piezas en su rompecabezas no terminaban de encajar. 

¿Cómo era posible que una mujer con semejante carácter y fuerza de voluntad estuviera con un maltratador? Por segundos recordó como él también la hizo sufrir, muchísimo. Su corazón se arrugó y se pregunto: ¿habría mucha diferencia entre una persona que la maltrata físicamente a una que  lo hace psicológicamente? Sabía la respuesta: no, claro que no.

Ezrael y Dylan tenían una cosa en común: ambos le hicieron daño a la chica que quería. Ezrael, por su parte, nunca llegó a quererla de verdad; mientras que Dylan, él sí que lo hizo. Sin embargo, por no hacerlo de la manera correcta perdió algo que nunca tuvo. Y ahora al tenerla cerca de nuevo piensa que es hora de que sea suya como antes no lo fue. Cada persona tiene formas tan raras de amar... una ligera línea separa amor de verdad y amor de mentira. La única verdad en toda esta historia de amor es que escogemos a quiénes nos hacen daño para que llenen vacíos de aquellos que crearon una grieta en nuestro corazón, alejando de verdad a los que nos vieron llegar hasta el hueso, dejar de ser lo que éramos y resurgir de nuestras cenizas como el  fénix. Si has leído muy bien esta historia, sabrás que Ezrael fue el que le hizo más daño a Alisson, a pesar de que Dylan desde un principio creó inseguridades en la chica de un solo brazo mientras que Alonso... todos sabemos las cosas que hizo Alonso por el amor de su vida. 

Es así como la hermosa chica de cabello color zanahoria llega a este punto, de querer a una persona imperfecta aún sabiendo que él no es el correcto, ni el amor de su vida. Pero cuando las cosas no pueden ser es muy cierto ese dicho de que... "a veces remplazamos al amor de nuestras vidas, por otro amor o por otra vida." En el caso de Alisson Rockefeller, remplazó a Alonso por otro amor. Lo que significa, que después de tanta tormenta y dolor en el corazón por esa persona con la que nunca podrá ser, ha decidido darse una nueva oportunidad. Porque ¿qué es la vida sino aprendemos de quiénes nos han herido?¿Qué es la vida si amamos a aquellos que nos han hecho más fuertes? 

Minutos después tocaron la puerta de la habitación con cuidado y Dylan temió que Alisson se despertara, pero para suerte de él no fue así. 

—Su pedido, señor.

Dylan pagó y entró dejando las bandejas en una pequeña mesa de la habitación. El estómago comenzó a rugirle fuertemente y de inmediato con el dulce aroma de huevos revueltos la bella durmiente comenzó a despertar. A Dylan se le dilataron las pupilas de ver la espalda desnuda de Alisson y recordó lo que en la madrugada había pintado en su espalda. Luego de dos horas para terminar el proceso, una sesión de fotos y otro baño se lograron dormir. Puso un pequeño gesto de dolor al sentir una terrible punzada en su rodilla pero logró continuar sonriendo para Alisson, quien no notó esto último. 

—Hey.

Cuando Alisson abrió los ojos y lo primero que vio fue a Dylan se le hizo muy extraño, pero agradable. Se estiró un poco más en la cama pero el dolor de cabeza le recordó lo de la noche anterior. 

Ezrael al entrar a la galería de artes supo de inmediato que el nerviosismo de Alisson se debía a una sola cosa: algo había sucedido entre el artista y ella. La sujetó fuertemente por el brazo y la olbigó a ir al mismo sitió donde antes se acostó con Dylan. A pesar de que Alisson gritó con miedo por el terror de estar junto a él fue en vano, pues todos se habían marchado de la galería de artes. El primer golpe de Ezrael dolió, fue el más doloroso. Pero luego de eso, todos parecían tener la misma intensidad, ella ya no sentía nada. 

No llamó a la policía, nunca había tenido las agallas para hacerlo pero si terminó con él. Lo maldijo tirada en el piso, sangrando. Ezrael la miró una vez más, se acercó y se percató de a quién había vuelto a golpear: a su pareja. Le pidió disculpas miles de veces pero Alisson solo gritó que se fuera de su vida, que la dejara en paz y que la próxima vez llamaría a la policía. El empresario frustrado la dejó tirada, amenazándola diciéndole que la próxima vez la dejaría en el hospital. Cosa que sucedió, luego de la abrupta separación de Alisson y Dylan, fue cuando Ezrael llevó su obsesión al límite y casi la mata. Pero como ya se sabe, el dinero muchas veces puede salvar a personas con poderes de crímenes terribles. 

—Pedí el desayuno.—Le dijo Dylan a Alisson contento llevándoselo hasta la cama. 

La pelirroja sonrió con timidez tapándose un poco con las sábanas y comenzó a comer en silencio. Pasaron 2, 3 hasta 5 minutos antes de que alguno de los dos mencionara una palabra. Mientras que ella tomaba jugo Dylan tomó la valentía de querer hablar de mejor manera lo sucedido ayer.