Sospechas #14

"El corazón se endurece con el paso
de los daños"
—Leunam.

[Clarissa]

Jueves 09:00 AM.

Espero a Melissa en la cafetería donde acordamos vernos, pronto llegará hace dos días que no sé de ellos Roman no responde ni siquiera a su padre, siempre me hace esto, ya no sé que hacer con él, no sé como hacer para que me escuche y haga lo que yo diga, pero él tiene que complicarlo primero.

—Clarissa— me levanto al escucharla, nos saludamos con un beso en la mejilla —. Buenos días, espero no haber tardado.

—No importa, llegué hace poco.

Ambas nos sentamos, nos trajeron nuestros cafés.

—Bueno aquí estoy, aunque sé para que.

—¿Qué pasa con ustedes que no regresan?.

Intento ver cada expresión en su rostro, se ve que algo pasó entre ellos.

—Roman no quiere regresar, ya consiguió un empleo, tiene muchos amigos— sonrío por un momento —. Dice que quiere independizarse.

—¿Y le has creído?.

—Claro que no, intenté hacerlo cambiar de opinión, como supe de su discusión intenté convencerlo de hacer lo correcto y que arregle con usted, me dijo que luego lo haría.

—Tienes que ayudarme, Melissa, puede perjudicar su rendimiento en clases, por favor.

Melissa toma mis manos, me ve con amabilidad.

—No se preocupe, yo jamás lo dejaré solo, lo ayudaré.

Roman es el único idiota que no ve lo buena que es ella para él.

—Melissa nada me alegra más que ustedes estén más juntos que antes.

—Ahora está enojado, no me escuchará, pero seguiré intentándolo, no está bien que haga esto.

—Gracias. Sobre tu papá, lo vieron moverse ésta mañana, me parece una buena noticia, pero el doctor dijo que no hay que hacerse ilusiones que eso sucede con frecuencia en casos como ese, no es bueno con las palabras, no hay que perder las esperanzas de todas formas.

—Los extraño mucho, todavía es difícil para mi adaptarme con esto, yo les agradezco a usted y a Roman por no dejarme.

Pronto dejamos la cafetería, salimos a dar un paseo por la zona, conversamos un poco sobre un par de empresas, me dejó fuera, dijo que unos socios de su padre se ocuparán de todo que no es necesaria mi ayuda, sólo la necesitan a ella supervisando de cerca las acciones, me dijo que podía acompañarla igual y orientarla un poco con el tema, tengo tanta mala suerte.

[Melissa]

Tres años después.

Escucho golpes en la puerta, acabo de llegar, me doy la vuelta abro la puerta, veo a Reese y a Cassidy en mi puerta, son mis queridos primos.

—¡Hola!— exclamé abriendo mis brazos para abrazarlos a los dos —. Que sorpresa.

Nos separamos, los ayudo con sus cosas, los bolsos pesan mucho, pero entiendo, se cabían de ropa tres veces en el día. Los llevé arriba, eligieron sus habitaciones, luego de que se acomodaron bajamos, nos sentamos juntos en el sofá estoy en medio de ellos.

—Tanto tiempo sin verlos.

—Eres a la única que queríamos ver, terminamos el año excelente, sólo Reese causó problemas, pero eso no es raro de él— dijo Cassy.

—Ay Cassidy por favor acabamos de llegar y ya empezarás con tus chismes, primero veamos si Melissa está tan bien como aparenta.

—¿Lo estás?.

Les sonrío, me abrazo a mi misma, suspiro antes de responder.

—Eh.. sí, bueno no tan bien, lo mismo mi papá no despierta, aún no termino mi carrera..— me apoyo en el hombro de Reese —. Hay un par de cosas que no saben.

—¿Qué?— preguntaron al mismo tiempo.

—Hace años que no veo a Edmond, apenas respondía mis mensajes y era cortante, entonces le dejé de escribir... llevo dos días sin hacerlo. Roman y yo hemos estado discutiendo últimamente, no se quedó a dormir aquí anoche— frunzo mis labios triste, subo mis pies abrazo mis piernas —. Soy una tonta.

—¿Por llamarte así? No eres tonta ¿qué pasó?— preguntó Cassy.

—Bueno..— elevo mi hombro un poco —. Yo creía que tenía a alguien más, entonces... yo le revisé su celular, luego Roman me encontró haciéndolo y discutimos.

—¿Y qué encontraste?— pregunta Reese.

—Nada, no tiene a nadie sospechoso, sólo hacía lo que me decía estar con sus amigos.

Cassy y Reese se miran incrédulos.

—Bien, te haremos unas preguntas.

—Ok.

—¿Sale mucho?.

—No, sólo al trabajo y regresa... bueno cuando sale con sus amigos voy con él.

—Pues no sé es el punto básico de los infieles tal vez no— dijo Cassy frustrada a mi eso me calma un poco.

—No, no espera, podría ser que esté con alguien en línea, algunos hacen mucho eso lo he visto.

—¿Quién demonios hace esas rarezas?— preguntó Cassy. Yo sólo me limito a mirarlos.

—Pues los que se enamoran de alguien a distancia por ejemplo o de una actriz porno..—

—¿Te parece Roman alguien que buscaría a una actriz porno teniendo a alguien como Melissa?.

—Puede ser ella aún es virgen, los hombres son así de raros últimamente..—

—Hey chicos..— hablé.

—Tú eres hombre— dijo Cassy.

—No cuentes conmigo.

—¡Esperen!— exclamé llamando la atención de ambos —. Roman tiene una ex novia, fueron separados hace años por sus padres, es ella en todo lo que puedo pensar ahora, él la quiso mucho, por un lado creo y por otro no, revisé su celular y no encontré nada, tal vez sólo imaginé las cosas.

—A lo mejor— dijo Reese.

Cassy en cambio se cruza de brazos con el ceño fruncido.

—Tal vez, pero lo vigilaremos de cerca hasta probar lo contrario, no hay que dejarse engañar. Mirame yo soy un imán para los hombres infieles, tengo experiencia en eso.

—Entonces ninguno de ellos se esforzó tanto contigo— dijo Reese y Cassy lo golpeó.

—Odio a los hombres, me moriré sola. Melissa por eso quiero ayudarte.

Escuchamos ruidos en la entrada, Roman aparece, se detiene a vernos está muy serio.

—Hola, Roman— saludó Reese.

—Hola— contestó sin quitar esa expresión que tiene desde que llegó, está enojado —. Melissa ¿podemos hablar?— asentí de inmediato, me levanto y lo sigo hasta el patio de atrás.