Alguien como tú #30

"Ella me gustaba. Era bueno tener un sitio donde ir cuando las cosas iban mal"
—Charles Bukowski.
 

[Melissa]

Sábado 02:25 AM.

Roman me invitó a una fiesta de sus amigos, él me agarra de la cintura, me da su vaso, bebí le di un gran trago a esa bebida, es muy dulce, Roman me abraza por detrás, mueve mi cabello hacía un costado, me besa en el cuello, el lugar está algo oscuro, las finas líneas de luces me marean, de repente Roman se aleja de mi, me doy la vuelta para mirar detrás de mi, logro ver a un chico colgado a su espalda, ese chico le besó en el cuello a Roman, me acerco ahí, veo a Roman intentando quitárselo, el chico se bajó.

—Ah estás con novia...— esa voz me es familiar —. ¡Prima!— se acerca a mi, me abraza, se voltea, puedo ver a Roman limpiando su cuello —, No puedo creer que besé a Roman, lo siento, lo confundí con un amigo.

—¿Les besas en el cuello a tus amigos, Reese?— le pregunta Roman.

—Sólo a algunos.

—¿Roman?— es Mackenzie.

—¿Qué es esto reunión familiar?— preguntó Roman.

Mackenzie se alegra al ver a Reese, se dieron un gran abrazo.

—Mackenzie, que gran sorpresa ¿vienes sola?.

—No, Joaquín ven, vine con mi hermano.

¿Joaquín? Que horrible estar con mi ex en la misma fiesta.

—Hola.

Saludó a todos, me saludó al último, me dio un beso en la mejilla que duró más de lo que debería y su mano estaba en mi cintura, claro la quité.

—Roman, vi a Hailey con un sujeto en la puerta— dijo Joaquín.

Me acerqué a Roman, él me agarra de la cintura.

—¿De quién es la maldita fiesta?— pregunté molesta.

—De Jake ¿te quieres ir?.

—Y sí, no quiero estar donde esté ella y lo sabes.

—Bueno tranquila, no tengo nada que ver con esto, maldito Jake.

—¿Chicos se van?— pregunta Reese.

—Sí— respondí.

Nos despedimos, si cruzamos a Hailey, ella no dejaba de sonreír hacía nosotros, me quedé viéndola hasta el final, alguien me agarró del brazo.

—Suelta...—

—Melissa.

Genial hasta Edmond está aquí.

Hay muchísima gente aquí debe haber unos doscientos más o menos.

—Vamos Melissa— dijo Roman.

—Hola, Edmond— saludé.

Me acerco para darle un beso en la mejilla, Edmond me besó muy cerca de mis labios, mi corazón se me está por salir del pecho.

—Melissa— dice Roman.

—Quedemos aquí un rato.

Roman pasó entre nosotros  chocando a Edmond, se va con el resto.

—¿Y ahora que hice?— me pregunta con una sonrisa encantadora.

—Es que ya nos íbamos, Joaquín, Mackenzie y Hailey están aquí, nuestros exs— dije mirándolo con una sonrisa.

—¿Y por qué nombras a Mackenzie su ex está aquí también o que?.

—Sí.

—¿Quién es?.

—Su nombre empieza con Ed y termina con mond.

—Pues se llama igual que yo.

—Ay Ed ¿de verdad, de veras no fueron novios?.

—No, sólo amigos ¿quieres bailar?.

—Sí— respondí. Miramos a nuestro alrededor, el ritmo de la música nos obligaba a bailar muy pegados, todos están apoyándose y así —. Oh.

Edmond me agarra la mano, lo miro, él se acerca a mi oreja.

—¿A Roman le molestará mucho que bailes así conmigo?.

—Sí muchísimo.

—No lo veo por aquí.

—Es verdad... bueno es sólo un baile, bailaré un poco nada más.

Antes fuimos a beber, nos quitamos nuestros abrigos, Edmond me invitó, los dos bailamos muy bien... no es que sea presumida por lo general a muchos les gusta vernos bailar.

Caminamos hasta encontrar un sitio, Edmond me hace dar una vuelta quedando detrás de mi, me comienzo a mover tratando de no apoyar a Edmond, él tiene sus manos en mi cintura, se acercó más consiguiendo que choque contra él, me abrazó fuerte, creo que será mejor tenerlo en frente, Edmond choca contra mi por la multitud nos sonreímos, su mano me acarició la espalda.

Creo que bebió un poco de más... no suele tocarme así.

Le quito su mano de mi espalda.

—¿Qué pasa?— me preguntó.

—Creo que ya es suficiente.

[Roman]

03:15 AM.

Me acomodo el pantalón, ayudo a Hailey con su sostén, ella se da la vuelta, pone su mano detrás de mi cuello, beso sus labios una vez más en esta noche, la dejo contra la puerta, meto mi lengua en su boca, nos besamos hasta quedarnos sin aliento.

—Creo que no estoy listo para soltarte.

—Roman es suficiente.

—Sólo una vez más.

Me aleja, abre la puerta, al hacerlo encuentro a Mackenzie, Reese y a Joaquín, Hailey se acomoda la ropa, sale del baño, todos se quedaron con la boca abierta viéndola, me ven a mi.

—Ah eres un imbécil— dijo Mackenzie. Pasa sus manos por su rostro —. No, no lo puedo creer... no seguiré con la boda, luego ve a explicarle a Melissa por qué— dijo yéndose.

Agarré a Reese de la camisa lo empujé contra la pared.

—Tú no hables con nadie de esto, no pasó nada ¿está bien?.

—¿Por qué le hiciste eso a Melissa?.

—Eres su primo no entraré en detalles contigo seguro no querrás escuchar.

Reese me empujó alejandome de él, sólo se fue, Joaquín me empujó dentro del baño.

—Mírate al espejo al menos, tienes más labial que Hailey, pobre Melissa no se salva de los engaños.

—Ya cállate, no puedes contarle nada, al menos que quieras...—

—Está bien.

Me lavé la cara, hago mi cabello hacía atrás, miro a Joaquín.

—¿Por qué sigues adentro del baño conmigo? Fuera.

Joaquín se ríe, se va dejándome sólo, nada me sale bien. Sé que quizás no debí buscarla, luego tuve que ayudarla, no lo resistí ese estúpido intentó aprovecharse de ella, le di una paliza, se fue, Hailey de alguna extraña manera consiguió esto.

Maldita sea, se acabó, Melissa me dejará, mi mamá querrá matarme, perderé la oportunidad de quedarme con la empresa, todo lo arruiné.

No encontré a Melissa, salí afuera a fumar y a beber, quisiera olvidarme un rato de todo el asunto, Jake aparece a mi lado.