Lo siento #34

"Da igual lo que hagas, sólo se fijarán en tu error"
—Valentina Romanetti.

[Melissa]

18:35 PM.

El joven se encargó de ayudar a mi papá a entrar en el auto, Edmond tuvo que contestar una llamada por lo que estaba alejado, me abrazo a mi misma, él se acercó a mi con una sonrisa.

—Hey, no hablamos mucho nosotros— me dijo de repente.

Sonreí nerviosa, tal vez sólo quiera ser amable y conversar, he conversado con él muy pocas veces, Clarissa por lo general es quien tiene un trato con... yo no recuerdo su nombre.

—Si... perdona olvidé tu nombre, no sé como sucedió.

Sonríe naturalmente.

—Que sincera, me llamo Connor Vann.

—Connor, genial.

—Hablé con tu papá, él necesita recuperarse, a penas puede hablar correctamente, me pidió que me quede a su lado a tiempo completo hasta que pueda andar por su cuenta, tenía que decírtelo, espero no te resulte incómodo.

¿Quiere decir que se quedará en casa con nosotros todo el día?.

—¿Puedes trabajar tanto?— pregunté preocupada.

—Sí, soy muy dedicado a mi trabajo, quiero que todo salga bien con tu papá.

—Eres brillante, he visto como cuidas de él, te encargas de todo eso tú solo, eres admirable, gracias.

—No me agradezcas es mi trabajo.

Edmond se acerca a nosotros, mira a Connor por un momento y luego a mi.

—Vamos, Mélisse.

—Connor va con nosotros.

—Está bien.

Entramos en el auto, voy adelante junto a Ed ¿por qué se ve tan serio? Estoy segura que estuvo hablando con Mackenzie, quiero saber pero, no es un buen momento para hablar del asunto, me doy la vuelta discretamente para ver a mi papá, se ve tan triste mirando por la ventana, Connor  con un pañuelo le seca sus lágrimas, le da unas palmadas a su hombro, Ed me tomó la mano consiguiendo toda mi atención.

Al llegar Edmond detiene el auto todos salimos abro el portón, Edmond me agarra el brazo.

—Melissa, tengo que hablar contigo— me avisa.

Eso me hace recordar que también tengo que hablar con Roman, en el hospital Hailey le dio las gracias por algo, estoy muy segura que ellos se han estado viendo.

—O-okey— contesté nerviosa.

¿Qué sucedió? ¿qué es lo que tiene para decirme? Él se ve tan serio.

Le entregué las llaves a Connor, ellos se fueron, me apoyo en la pared a medida que Edmond se acerca a mi sin haberme soltado el brazo, él está tan cerca, mi corazón palpita con mucha fuerza que es molesto para mi pecho, su nariz roza la mía.

—Tengo que confesarte algo...— habla cerca de mis labios.

Si me detengo a describir cada detalle de lo que estoy sintiendo ahora me llevaría a admitir que quizás también siento alguna especie de atracción por él, su hermoso perfume, su fresco aliento contra mis labios, su mano sujetando con firmeza mi brazo tan sólo eso es estremecedor para mi.

¿Qué es lo que me pasa?.

—Ed— murmuré.

—Hice algo malo— baja la mirada, su otra mano le da una caricia a mi mejilla.

—¿Qué hiciste?— pregunté.

¿Qué puede haber hecho mal? Muero por saberlo.

—En la fiesta de Jake...— su brazo rodea mi cuerpo con posesión, mi cuerpo choca contra el suyo —. En esa fiesta te besé, ambos estábamos muy bebidos, en un momento te acercaste a mi con tus ojos cerrados y no me contuve.

Me besó ¿por qué... cómo no recuerdo eso?.

—¿Y yo cómo te respondí?— pregunté preocupada.

—Me besaste también pero, me estabas confundiendo con Roman, luego no pasó nada más...— explicó.

—Hm... y-yo tengo una pregunta ¿con quién hablabas hace un momento?.

—Con mi papá, sólo quería saber donde estaba y eso.

—Ah, era eso.

Edmond fue alejando sus manos de mi cuerpo, se apoya en el portón, guarda sus manos en los bolsillos de su chaqueta.

—Espero me puedas perdonar por lo que hice esa noche.

—Estás perdonado ¿aún quieres besarme?— le pregunto.

—Siempre voy a querer todo contigo pero, eso no quiere decir que sea correcto, tienes un compromiso, ya tomaste tu decisión.

—Y tú la tuya, estarás con Mackenzie.

—Ajá. Entremos ¿quieres?.

Veo un auto estacionarse.

—Mira es Mackenzie— dije.

[Mackenzie]

19:46 PM.

Al salir del auto encuentro a Edmond y a Melissa juntos, cierro la puerta del auto, camino hacía donde están ellos, abrazo a Melissa.

—Estoy muy contenta por tu papá, Melissa es una gran noticia— dije al separarme.

Ella me sonríe alegremente, Edmond y Melissa estaban tomados de la mano.

—Luego regreso... yo olvidé algo— dijo Melissa yéndose rápidamente.

—Estás muy linda— me halaga.

Suspiro y sonrío con tristeza mirando mi atuendo.

—¿Si?.

—Sí, te ves bien.

—Estaba preparada para salir contigo pero, no llegaste nunca, luego Roman me contó de la hermosa noticia, decidí venir y aquí te encontré.

—Ah... Mackenzie lo lamento tanto pero, Melissa me pidió que estuviera con ella, era importante.

Y yo no importo.

—Está bien.

Pone su mano en mi hombro.

—Voy a mejorar para poder ser tu mejor amigo, dame otra oportunidad.

Asentí con una sonrisa, duele pero, me evite más que eso al rechazarlo.

—Okey ¿por qué estaban aquí afuera esperan a alguien?.

—No, yo tenía algo que hablar con Melissa.

—¿Se puede saber de qué?.

Se ve algo nervioso por la manera en como cambió de postura.

—Sí... le conté que en la fiesta nos besamos pero, ya estábamos muy bebidos, me disculpe con ella y me perdonó.

—¿Cómo sucedió que ella te correspondió?.

Él sonríe, pareciera que acaba de recordarlo.

—Ella estaba algo dormida, yo no lo entendí así, estaba de pie frente a mi, de un momento a otro se acercó cerrando sus ojos y nos besamos pero, ella creía que estaba con Roman.

—¿Y qué? ¿luego me besaste a mi?— recordé molesta.