3 años atrás
Alyssa
Tengo un mal presentimiento, y en todo lo que va de día lo he sentido. Nos encontramos en la playa celebrando el pre-cumpleaños número "18" de Amy, estamos emocionadas de estar juntas y de estar celebrando en esta playa, pero este mal presentimiento no me deja disfrutar. Me alejo de mis amigos hasta llegar a la orilla del mar, siento como el agua toca mis pies, dejo salir un suspiro y miro hacia el mar, siempre me ha gustado, me gusta su color, y su sonido me relaja.
— ¡Hey Ally! —la voz de Amy me saca de mis pensamientos
— ¿Qué haces aquí? ¿Por qué no estás en la fiesta? —me doy la vuelta para observarla, viene caminando hacia mí con un vaso de plástico rojo en la mano.
—No me siento bien, he tenido una sensación horrible en el pecho todo lo que va del día —le digo haciendo una mueca y volviendo mi vista hacia el mar.
Siento como se acerca hasta quedar a mi lado. — ¿Una sensación horrible en el pecho? ¿Cómo un mal presentimiento?— dice con confusión
Asiento volviendo a mirarla, su ceño esta fruncido y tiene una extraña mueca en sus labios.
—Oye —dice abrazándome y cambiando su expresión —Todo está bien cariño, no va a pasar nada. Lo único malo que puede pasar ahora es que te pierdas de celebrar mi pre-cumpleaños por estar con tus tontos presentimientos, ¡anímate! —se ríe bailando de una forma rara haciendo que se instale una expresión de burla en mi rostro.
—La tarde apenas comienza, tenemos dos fiestas por delante y debemos lucirnos con estos hermosos vestidos que compramos y con los de la noche —me guiña un ojo sonriendo de forma sensual. Tiene razón, ayer fuimos de compras y ahora las tres tenemos dos hermosos vestidos cada una, Amy está usando un precioso vestido playero blanco de tiras con flores violetas y rosas, largo, pero con un escote en la pierna derecha, Kate tiene uno igual pero en color azul, por mi parte escogí uno menos llamativo, uno de color blanco con flores rojas que me llega justo a la mitad del muslo.
—Tienes razón amiga, ahora es que comienza la fiesta, ¡vamos a divertirnos! —digo con entusiasmo y jalándola conmigo de regreso a la fiesta, escucho su risa por mi cambio de ánimo repentino.
****
Ya vamos de camino al club en donde será la fiesta de cumpleaños de Amy, estuvimos en la playa hasta que se hicieron las 12:00AM, luego fuimos al hotel donde nos estamos quedando este fin de semana para arreglarnos y ponernos nuestros sexys vestidos nuevos para la fiesta que nos espera.
—Vamos Amy canta conmigo— Grita Kate alocadamente, Amy se ríe, grita y canta junto a ella, mientras que yo voy riéndome de sus loqueras. La verdad es que ya estamos un poco borrachas las tres, las chicas van adelante, Amy conduciendo (porque hasta ahora es la más cuerda), Kate de copiloto, y yo voy sola acostada completamente en los puestos de atrás.
— ¡Aly!, es tu parte amiga —grita Amy riendo y bailando desde su puesto, empiezo a cantar locamente junto a ellas:
I don't wanna be needing your love
I just wanna be deep in your love
And it's killing me when you're away
Ooh, baby,
'Cause I really don't care where you are
I just wanna be there where you are
And I gotta get one little taste
Your sugar
Yes, please
Won't you come and put it down on me
I'm right here, 'cause I need
Little love and little sympathy
Yeah you show me good loving
Make it alright
Need a little sweetness in my life
Your sugar
Yes, please
Won't you come and put it down on me —cantamos las tres riéndonos y gritando con alegría
— Chicas las amo —grito haciendo que las dos me voltearan a ver —son las mejores, son cómo mis hermanas, quiero que nuestra amistad dure para siempre, a pesar de los malos ratos y a pesar de todo, las amo —digo con la voz rota, el alcohol definitivamente me pone emocional.
—Awww, también te amamos loquita, eres como nuestra hermanita, ¡siempre juntas! —dice Kate, su voz salió como la mía, y pude ver que sus ojos estaban cristalizados.
— ¡Siempre juntas! —gritamos Amy y yo, me meto entre los puestos y paso mis brazos por los hombros de ellas uniéndonos en un abrazo.
— ¡Te estas volviendo vieja! —le grito por sobre la música del auto a Amy quien me mira por el retrovisor y suelta una carcajada.—Y tú te quedaste atrás niñita, ahora eres la bebé del grupo — me devuelve Amy, mientras ella y Kate se burlan de mí, las chicas son mayores que yo, ambas tienen 19, pero Amy recién cumplidos mientras que yo aún tengo 17, y en un par de días 18. Las miro mal haciendo que se rían mucho más de mí. No aguanto más y empiezo a reír con ellas, seguimos cantando, gritando y riendo como locas, este momento es perfecto, nada puede arruinarlo.
Lo último que escucho es el chirrido de unos neumáticos, unas luces que nos ciegan completamente, luego un fuerte golpe. Siento como mi cuerpo es impactado con rapidez contra los puestos y escucho los gritos de mis amigas. El auto da vueltas y vueltas; gritos, golpes, dolor, y más dolor, luego vacío y finalmente silencio; el cuerpo me duele a horrores, no puedo moverme, un punzante dolor en mi cabeza me hace cerrar los ojos con fuerza, algo caliente baja por mi cara y escucho unos gemidos de dolor. Utilizo todo mi esfuerzo y la poca energía que me queda para abrir los ojos, y lo primero que veo es sangre, en el vidrio delantero del auto, es ahi cuando me doy cuenta de que estamos de cabeza, puedo ver el cuerpo de Kate colgando por el cinturón de seguridad y la sangre bajando por sus brazos, pero no veo a Amy por ningún lado y empiezo a desesperarme, pero ya no puedo más, siento mi cuerpo pesado, mis ojos empiezan a cerrarse lentamente, lucho y trato mantenerlos abiertos pero no me quedan fuerzas, hasta que ya no escucho nada, solo silencio, y entonces me dejo envolver por la oscuridad.