Amor de jefe /myg

Capitulo 16

— ¿Pasa algo?— ¡¿Y todavía lo pregunta?¡.

Me levanto de un salto y voy a la cocina a buscar un vaso con agua.

»— Malena— me llama pero le ignoró. Me sirvó el agua y la tomo toda tan rápido que siento que me ahogo, así que me es inevitable toser.

»— ¿Estás bien?— me doy de frente con Min cuando Volteo. ¡Vamos ya vete!. Da palmaditas en mi espalda y yo llevo los dedos a mis labios porque a pesar de todo aún puedo sentir los suyos sobre los míos.

— ¿Por que hiciste eso?— Digo lo más bajo posible pero se que puede escucharme.

— Porque ambos queríamos— suelta sin dudar.

Aunque lo niegue se que tiene toda la razón, de otra forma yo no hubiera permitido que pasará nada y eso es lo que me atormenta. Porque se que me gusta y él ya lo sabe, ¿De verdad he sido tan obvia?.

— No es cierto— me atrevo a mentir sin verlo alos ojos o de cualquier modo las palabras no pudieran salir de mi boca.

— ¿Entonces yo te obligué?.

— Tampoco me dejaste otra opción— continuo mirando el suelo.

— Entonces mírame a los ojos y dime qué no te gustó— coloco mis manos en puños y sacudo mi cabeza negando.

— Olvida eso y vete— me siento mal por lo que digo pero es única forma de cortar ese tema de raíz.

— No— levanta mi mentón con sus dedos para que lo mire y tragó grueso.

— Hablemos mañana, ¿que te parece?, Es muy tarde— retrocedo y el sigue avanzando. Mi trasero da con la barra y coloca sus manos a cada lado. Me siento acorralada.

— ¿Soy tan detestable?— Sus ojos desprenden un brillo que me es indescifrable. Ahora me siento culpable y no sé porque.

— Yo... solo estoy procesando todo lo que acaba de pasar eso es todo— en estos momentos mi cabeza es como la cinta de una película vieja, incapas de proyectar con exactitud el porque me deje llevar. No puedo darme explicaciones a mi misma y por lo tanto tampoco puedo dárselas a él.

— ¿Crees que estoy jugando a besarme contigo o solo me dejó llevar?. Yo se muy bien lo que quiero y puedo ser bastante insistente hasta conseguirlo.

»— No irás a ningún lado, no podrás esconderte de mi como lo haces con otras personas para evitar explicaciones— me da un beso rápido — y aunque lo hagas te buscaré hasta encontrarte y creeme que no dejaré nada de esa linda boca tuya— otro beso— no tienes muchas opciones y por lo tanto te esperaré hasta mañana, tienes toda la noche para aclarar tu mente y se cuidadosa con lo que me dirás— ¿Como espera que duerma?—se cuando estás mintiendo.

— ¿Es una amenaza?.

— Es una abvertencia— me mira con un gesto cansado. ¿Que es lo que espera de mi?, ¿Quiere que le diga que nos vamos a casar?. No es la época de piedra donde te tenías que comprometer por profanar a una chica, estoy segura que puedo vivir con eso.

— Podrías calmarte... Solo fue un beso— eso me trae recuerdos.

— Entonces tengo que recordarte la primera vez que nos conocimos— afirma — yo te bese e hiciste tal escándalo que mi cara tuvo que pagar las consecuencias.

— Esa vez fue sin mi consentimiento... Además ya no me acuerdo muy bien de eso— procuro mirar hacia otro lado, ahora el florero que está sobre la mesita me parece lo más interesante del mundo.

— Ahí está el punto— sonríe con suficiencia y solo le falta aplaudir.

¿Cómo pude ser tan tonta? 

— El único punto que hay aquí es que tú eres un acosador y que me estás presionando para que acepte un dichoso sentimiento o atracción que no es cierta— quitó su brazo para salir de ese incómodo espacio en el que creí sofocarme.

— Es imposible hablar contigo— lleva sus manos a su cara con frustración y camina hasta la puerta.

— Es porque está conversación no tiene pies ni cabeza — digo y se detiene justo antes de abrir.

Lleva los dedos a su barbilla como si pensará — Yo creo que es porque eres tan insegura que no aceptas que te morias por ese beso.

— Tu no sabes nada.

— Como digas— dice con ironía, como suele hacerlo siempre — ah y por cierto... Tu pijama es horrorosa, que crimen para la moda acabas de cometer— mofo ante sus palabras.

Se va cerrando la puerta con fuerza porque se que aunque no lo demuestre le dolió que yo no aceptará que me gustaba, pobre de él, debe tener el ego tan roto que hay que recogerlo pedazo por pedazo. 

Por otro lado y aunque me cueste reconocerlo YoonGi si me gusta... Y mucho, de eso puedo darme cuenta ahora que ya se fue, ahora que su presencia no nubla mis pensamientos puedo pensar con claridad.

No sé que rayos me invéntate mañana para evitarlo lo mejor posible, para evitar también las preguntas de Ji-eun, para evitar a Amelia y sus ocurrencias de mis amoríos, a Kim y sus intentos de conquista frustrados por YoonGi... Creo que después de todo él tiene razón, evitó a cualquier costo las situaciones que puedan ponerme en evidencia, no las enfrento y todo eso tiene un motivo... Soy una cobarde.

 

???

 

La mañana siguiente me recibe de la peor manera. Tengo unas ojeras tan grandes, soy como un panda con cuerpo de humano.

No pude dormir en toda la noche pensando en lo que me dijo señor dramas, no en lo de que mi pijama es horrorosa, para nada, ella es tan bella que las mentes humanas no tienen la capacidad de procesar tanta hermosura.

Lo que de verdad me robó el sueño es el discurso que tengo preparado para ponerle un freno a esta distorsionada relación «si así se le puede llamar» que hemos creado YoonGi y yo.

Amelia me mira desde lo lejos y levanta sus cejas varias veces — ¡No tengo nada que decir!— me levanto de la mesa y le doy un beso a Eun-tak en la cabeza— nos vemos luego cariño.

— Está bien noona— tomo mi chaqueta y mis zapatos. Me despido dando besitos al aire, cierro la puerta y bajo corriendo lo más rápido posible.

 

Fuera del edificio toda mi energía se ha agotado, arrastró mis pies a la entrada de forma perezosa, aún no ha comenzado mi día y ya estoy cansada, debí de aprovechar el día de ayer pero no pude porque cierta persona llegó a fastidiar mi existencia y robar mi sueño.




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