Capitulo 4

♡♡ Capitulo 4 ♡♡

En el trayecto ningún de los dos dice nada, solo me dedico a mirarlo de reojo, nose si está bien lo que voy hacer, meterme con otro desconocido, estaba decidida a dejar mi libertinaje y centrarme en la empresa de papa, pero la atracción que siento por este hombre es más y sé que mañana me voy arrepentir de lo que hice, además no lo volveré a ver, porque no pienso volver a esa discoteca.

Nos detenemos en un lujoso edificio, de unos diez pisos, creo, veo como se abre las puertas del lugar, entramos en el parqueo, nos estacionamos, el me ayuda a bajar, nos dirigimos a un ascensor, el presiona unos números que no visualice cuales eran, aun no hablamos, yo la verdad me siento nerviosa, nunca me he puesto nerviosa con ningún hombre, ni con mi ex, esto es ilógico, no tiene nada de sentido.

Las puertas se abren y veo por la pantallita que estamos en el piso seis, no me sorprende nada lo que veo, nada tiene color, la decoración es elegante sí, pero sin vida, algo muy sobrio, la sala es grande, muebles grises, en medio tiene una mesa de cristal, paredes blancas simples, una pared en v gris, mientras me adentro más, puedo ver un ventanal que se ve la ciudad, es una vista hermosa.

Lo único que me sorprende es que todo está organizado, que no es normal en un hombre, me doy la vuelta para encararlo, error, porque mis pies se enredan, casi me caigo, pero el me sostiene, siento otra corriente pasar por mi cuerpo, es algo extraño, nos miramos a los ojos, veo deseos en él.

--Debes de tener más cuidado-.. dice con voz ronca, yo me muerdo el labio, el empieza a negar con la cabeza.  –No hagas eso-..  voy hablar, pero el me besa.

Nos besamos frenéticamente, me subo a él enrollando mis piernas en sus caderas, comienzo a tocarlo, el empieza a caminar, creo que me lleva a su habitación, me deposita en la cama y lo veo a los ojos.  

Le voy desabotonando los botones de su camisa, el me ayuda y termina de quitársela, vuelve y se coloca arriba de mí, me da besos por todo el cuello, con su lengua me empieza a lamer desde el cuello y va bajando, se detiene en mis senos, me mira.

--Me encantan, son hermosas-.. dice con esa voz sensual. Me arranca el vestido, que solo escuche un crack.

--Oye porque lo rompiste, me costó mucho-..  le digo agitada.

--Lo siento, te compro otro-.. dice, mientras me retira mis braguitas, luego se apodera de mis senos, empieza lamiendo y chupando, con una de las manos baja a mi vagina tocando ese punto de explosión, con solo eso me esta volvió loca, suelto gemidos como poseída.  –Estas muy húmeda-..  dice y continua.

Introduce dos dedos en mi interior, arqueo mi espalda para tener más profundidad, suelta uno de mis senos para agarrar el otro y darle el mismo cariño, estoy a punto de correrme, el acelera los movimientos en un entra y sale, suelta mis senos y sale de mi interior, para el con la boca apoderarse de mi vagina, esa lengua hace maravilla, ya estoy a punto de llegar a mi orgasmo, él se da cuenta, porque introduce dos dedos mientras lame cada parte de mí.

--Me-me ve-vengo-.. le digo con la voz entre cortada.

--Córrete para mi preciosa-..  con esas palabras llego al orgasmo más maravilloso de toda mi vida. Obvio eso no se lo voy a decir.

--Ooooh, Yeees-..  grito ya liberada, me quedo temblando.

--¿Estas cansada? Aún no hemos empezado-.. me habla mientras se retira el pantalón y el boxe, mis ojos se agrandan, no creo que todo eso quepa en mí, el me da una sonrisa.  –Te gusta lo que vez-..  dice con una sonrisa arrogante, se coloca un preservativo.

No digo nada, me agrada su actitud, el sí tiene con que presumir, él se va introduciendo lentamente para que me adapte al tamaño, no puedo evitar arquear mi espalda y eso hace que entre más rápido, tiro un gritico, él se detiene y me mira. Empieza a moverse lento, luego va aumentando el ritmo. El continua a un ritmo rápido y delicioso.

--Estas tan apretada y rica-.. me dice. Yo le indico que quiero estar arriba y el con gusto acepta, yo empiezo a moverme rápido, luego lento, rápido y lento. --Me estás volviendo loco-.. dice agitado.

Sonrió maliciosamente, así lo quiero, que se vuelva loco, sigo en ese proceso de rápido y lento, empiezo a mover mis caderas a un ritmo descontrolado, que yo misma me desconozco, nunca actúe así, voy arriba y abajo, hasta que siento como estoy a punto de venirme otra vez, eso es algo que también me sorprende, no sabía que yo era tan orgásmica, acelero más rápido mi movimiento, hasta que el termina de venirse y yo le sigo, los dos tiramos un grito ahogado, me derrumbo en su pecho, exhausta, siento su corazón acelerado y respirando con dificultad, duramos un buen rato así, hasta que el habla.