Capitulo 15

♡♡Capítulo 15♡♡

SEBASTIÁN

No entiendo porque me pego, esto como que se está volviendo costumbre de que ella me pegué en cada momento, porque no la detuve, soy un idiota, tenia que detenerla y no dejarla ir.

Cuando la vi salir del carro tan vulnerable, en ese estado llorando, mi corazón quería salirse, lo sentía oprimido, me dio una molestia tan grande, nose, pero de solo pensar que alguien le hizo daño me saca de quicio. Ella tendrá que decirme que le paso y quien le hizo daño, no dejare que la lastimen, ella es increíble.

Estoy muy seguro que fue algo grave lo que le paso, por su reacción cuando me le acerque con deseos de comérmela, si, ella provoca que tenga ganas de eso y más, creo que ella lo interpreto de otra forma, será que pensó que le iba a pegar, es algo que nunca haría, a una mujer no se le pega ni con el pétalo de una rosa.

Las mujeres son sagradas, se le debe de tratar como a una reina o mas que eso, sin ella nosotros no somos nada, ellas no dan felicidad, nos dan amor, aunque algunas no, pero por eso no podemos pegarle a ninguna mujer, se que le hable mal a Sarah, pero nunca llegaría a un extremo de pegarle, juro que si me entero de que le pusieron una mano encima no lo tolerare, nose que haría, pero no me quedare tranquilo.

Pienso en lo que me dijo de que me siga cogiendo a mi secretaria, a mi mente llega Cinthia, algo le dijo para ella que se pusiera así, será que se puso celosa, no, solo es imaginación mía, rio un poco y veo a Cinthia que viene con una sonrisa.

--Cinthia que le dijiste-..  le pregunto con rabia terminando de acerarme, ella me ve y se ríe.

--Hijo que paso porque se fue, pensaba que cenaría con nosotros-.. habla mi madre preocupada.

--Nada madre, discutimos por una tontería y se fue molesta-..  digo tratando de no mostrarme molesto.

--Hijo como puedes ponerte a discutir con ella, se ve que esta muy enamorada de ti, pienso que es la mujer de tu vida, deberías llamarla y resorber las cosas, no pueden estar molesto-..  dice dándome una sonrisa de apoyo.

--Si madre la llamare-.. digo.

--No pierdas tiempo hijo nosotras las mujeres somos orgullosa-.. me sonríe de nuevo y va a la cocina.

Esa Amelia me va a volver loco, de donde saca ella que me estoy cogiendo a mi secretaria. Miro a Cinthia con deseos de matarla, algo le dijo para que se pusiera así, pero no puedo reclamarle delante de mi madre.

--Mejor preparemos de cenar, me muero de hambre-.. dice Cinthia sonriendo, mientras se va a la cocina.

Busco mi teléfono, guardo el numero de Amelia, le pondré, mi sexy pelirroja, aunque está loca, pero yo estoy más loco por ella. Mi madre empieza a preparar la cena, si ellas no hubieran llegado ahora mismo tuviera con mi pelirroja en la cama, devorándomela completa.

--Madre aun no me has dicho a qué viniste-.. le digo mientras no sentamos a cenar, luego miro a Cinthia.  –Y tú que haces aquí-..

--Hijo, solo vine a verte y para que hablemos de tu novia, ellas es una chica muy linda, me cayo muy bien-..

--Es cierto es muy linda, te quedaste corto al describirla-.. dice Cinthia.  –Y respondiendo a tu pregunta de porque estoy aquí, vine a lo mismo que tu madre, como te fuiste temprano de la empresa un poco molesto y me dijiste que habías peleado con tu novia, se lo comenté y ella decidió venir conmigo, eso es todo-.. dice tranquila como si nada, mientras me da una sonrisa.

--Y tenías que abrazarme-.. le digo un poco molesto. Ella siempre de imprudente.

--Lo siento, eso lo improvise, quería ver que tan enamorada esta ella de ti y ya lo comprobé-.. dice mientras come, yo la miro mal, que voy hacer con ella.

--Bueno, sabemos que están enamorados se les nota, pero cenemos tranquilo-.. dice mi madre, sonriendo más que nunca.

Después de cenar, empezamos hablar de cosas sin sentido, mi madre aconsejándome que tengo que casarme, que Amelia es la indicada, que hacemos linda pareja, y muchas tonterías más. Unas horas después mi madre decide irse, pero antes de irse decidió darme otro discurso.

--Hijo mío, valora a esa chica, se ve que es diferente a Sarah, olvídate del pasado, lo que importa es el presente, mira a tu padre y a mí tenemos muchos años juntos, casi no hemos discutido porque siempre hablamos si no estamos de acuerdo con algo, que por cierto en una semana cumpliremos treinta años de casados, que feliz estoy, espero que cumplas y la llames, ok, te quiero hijo-.. dice abrazándome y dándome un beso en la mejilla y se va sonriendo.