Capitulo 34

♡♡Capítulo 34♡♡

AMELIA

Ha pasado una semana desde que revisamos las grabaciones, la verdad no he tenido cabeza para nada, trato de disimular las cosas con Sebas, le miento, pero él nunca me cree nada de lo que le digo, él es un hombre muy inteligente.

Leidy aun insiste que tenemos que hablar con mi padre para decirle de buscar a alguien para recuperar la grabación, yo aun no me atrevo, él lo vería y nose como reaccionaria, pero no puedo perder mucho tiempo, Álvaro aún sigue enviándome mensajes amenazadores, eso no serviría como prueba, porque lo manda de un número desconocido.

Cada vez que leía algún mensaje quedaba aterrada, casi estuve a punto de terminar mi relación con Sebas, por miedo, pero no pude, me di cuenta de que lo que siento por él es más fuerte que todo, no me importa lo que tenga que pasar, pero no renunciare tan fácil, creo que tengo que decirle todo, ya no puedo aguantar más.

Pero me preocupa mucho que él no ha venido a molestarme personalmente, solo manda mensajes, admito que prefiero los mensajes y no tener que verlo, creo que llego el momento de hablarlo, tengo un mal presentimiento.

--Aun no me dirás que te pasa, otra vez estas actuando raro, aunque por lo menos no te alejas de mi-.. me dice mientras me besa.

El me saca de mis pensamientos, la verdad es que él tiene razón, el está en mi oficina, tocándome y dándome besos y yo tengo mi mente en otra cosa, tengo que despejarme, dejar de pensar.

--Amor ya te dije que no me pasa nada, son imaginaciones tuya, porque mejor, dejas de hablar y me haces tuya-.. le digo tocándolo.

--Quieres que te haga mía aquí, en tu oficina, en el escritorio-.. me dice mientras me sube en escritorio y me da besos por el cuello.

--Si, quiero sentirte-.. le digo jadeando y soltando unos gemidos, él se aleja dejándome tan caliente, se dirige a la puerta, cuando voy a protestar, decido no hacerlo, porque me di cuenta de que él fue a ponerle el seguro.

--Tus deseos son ordenes mi sexy pelirroja-..  

--Oh, soy sexy-.. le digo con una sonrisa, bajándome y caminando sensual, él me sonríe. –Tú te ves ardiente, pero te vieras mejor desnudo-.. digo guiñándole un ojo, él no lo piensa y se apodera de mi boca, con un beso intenso y apasionado, sus besos me vuelven loca.

--Creo que no deberíamos hacerlo aquí-.. le digo jadeando y besándolo. El sigue dándome besos por el cuello, de repente me sube al escritorio, yo no lo pienso y tiro todo al suelo, sé que tendré que arreglar luego, pero no me importa, esta es una buena fantasía.

El me sube la falda y empieza a tocar mi parte haciendo círculos, tiro mi cabeza atrás, y el va dando besos desde el cuello y va bajando hasta llegar a mis senos, me retiro la blusa y el con mucha maestría me retira el sostén, me retiro la minis tanga, y me dejo la falda, el me da una mirada deseosa.

--Eres perfecta, me encantas-.. dice con voz ronca, besándome de nuevo.

Él se retira el pantalón y el boxe, se introduce en mí de una estocada, que provoca que tire un grito, trato de callarme porque estoy en la oficina y me pueden escuchar, pero no puedo evitarlo, mis gemidos salen sin control por cada envestida, el me besa en cada momento para evitar mis gritos.

Sus movimientos son tan magnifico, que siento como estoy a punto de tener mi orgasmo. No pasa mucho tiempo y termino llegando a mi clímax, al mismo tiempo llega el y los dos tiramos un grito de placer mientras nos besamos para callar nuestros gemidos, nos derrumbamos en el escritorio tratando de controlar nuestra respiración.

Busco algo para limpiarme, lástima que no tengo un baño en mi oficina, nos empezamos a colocar la ropa, la verdad hacerlo aquí se sintió emocionante.

--Ven acá-.. me dice agarrándome y me besa.

--Me vas a dejar sin mis labios, me lo vas a gastar-.. le digo sonriendo y el ríe.

--Lo siento, es que no lo puedo evitar, tus besos son mi perdición-.. dice volviéndome a besar.

Después de un rato nos separamos porque tocaron la puerta, yo lo miro y veo el desastre que hicimos y rio, ahora como arreglo esto. Terminamos de arreglarnos la ropa, mientras pregunto quién es.

--Disculpe jefa, su padre la ha estado llamando y dice que no contesta-.. 

Ya cuando siento que estoy vestida, empiezo a recoger los papeles y Sebas va a abrir la puerta, ahora mismo me siento nerviosa, como si hubiera cometido un delito. Miro a Leidy y me está viendo algo sorprendida su mirada va a los papeles, luego a Sebas que está parado a su lado.