Capitulo 50

♡♡Capítulo 50♡♡

AMELIA

Ella está parada frente a mí, esperando respuesta, escucho que los demás hablan, yo termino aceptando, Sebas me agarra más fuerte de la cintura, me mira, le digo con una sonrisa que está bien, que no se preocupe, le doy un corto beso y empiezo a caminar detrás de ella, camino hasta que ella se detiene en la sala de la casa.

--Bien, de que quieres hablar-.. le digo calmada, no me puedo alterar, después ella se altera y habría problemas, porque yo no podría controlarme.

Ella me mira, sin decir nada aun, será que está tratando de encontrar las palabras adecuadas para hablarme, la noto algo nerviosa.

--Perdón, fui muy grosera contigo, sé que no debí, lo lamento tanto, es que ella era mi amiga, no pensé que haría algo así-.. me dice agachando la cabeza.

Por lo que veo hoy es el día de pedir perdón, por lo menos las personas que me rodean saben pedir perdón y eso me hace sentir bien, la miro sin decir nada aun, ella siempre estuvo a favor de la otra, será verdad su arrepentimiento, bueno tendré que arriesgarme.

--Cuñada te estas disculpando sin un chocolate, a tu sobrino o sobrina le encantan comerlo-.. le digo, ella levanta la cabeza y me mira, yo le sonrió, mientras me acaricio la barriga.

Ella sonríe, se me acerca y me abraza, me sorprendo, esto no lo esperaba, me siento un poco extraña con ella, nunca nos tratamos así. Nos separamos y veo que esta llorando, le seco las lágrimas, le digo que se relaje y que volvamos afuera, ella asiente que sí con una sonrisa.

Ya afuera todos nos ven, Sebas se me acerca, nos mira como sospechosas, ya venía por mí, dijo que tarde demasiado y que tenía temor a su hermana que me hiciera algo, yo solo me reí.

--Quiero disculparme con todos, sé que fui grosera con muchos y espero que me disculpen-.. habla Abigail.

Olivia la abraza y llora, después de esa emotiva reconciliación todos empezamos a cenar, entre risas y bromas, contando anécdotas. Me siento bien estando con todos, la verdad nunca me imagine estar tan feliz.

--Amor, estoy cansada, me quiero ir-.. le digo a Sebas después de varias horas.

--Espera amor, aun falta el postre-.. me dice sonriendo.

--Que postre, si ya comimos pastel-.. le digo, sobándome la barriga, porque aun me siento llena de la cena, comí demasiado.

--Vas a ver, tranquila-.. dice todavía sonriendo y me da un beso.

--Que pasa, está todo bien cuñada-.. me dice Alondra, sentándose a mi lado, yo suspiro.

--Estoy cansada y tu hermano no quiere irse, yo me quiero ir-.. le digo y ella se ríe. –No te rías, de verdad estoy agotada, el embarazo me pone así-..

--Me imagino, pero tranquila, si quieres te puedes acostar en una de las habitaciones, hasta que se vayan-..

Me dice sonriéndome, yo la miro por un rato y a mi mente llega lo que me comento mi primo.

--Tu debes de saber como me siento, porque te está pasando a ti, verdad-.. le digo con una sonrisa, ella abre más los ojos.

--El te dijo, le dije que no dijera nada-.. me dice con frustración.

--No te preocupes no diré nada, pero te puedo decir algo-.. ella asiente que sí. –Piénsalo bien, tu estas segura de lo que vas a hacer, yo cuando me entere no lo quería aceptar, pensé en... bueno, pensé en tonterías y que me arrepiento de tener esos pensamientos, ahora mírame estoy feliz y agradecida, así que te recomiendo que saques un día para analizar todo y no hagas algo que te puedas arrepentir-..

Antes de ella responderme se empieza a escucha una música, cuando miro hay unas personas tocando, pero cuando llegaron que no los vi, están tocando una música romántica.

Después de unos minutos que estoy embelesada viendo a las personas tocar, alguien me toca el hombro, veo y detrás hay un letrero enorme, con luces y corazones, que dice, te quieres casar conmigo.  

Vaya que lindo y para quien será, escucho murmullos, decido mirar a Sebas y me sorprendo al verlo arrodillado, con un anillo en una cajita de terciopelo azul, me mira con una enorme sonrisa, yo abro mucho los ojos, esto si que no lo esperaba.

--Mi vida, eres más de lo que imagine, eres un regalo que cayó del cielo, eres todo lo que anhelo, que quiero pasarme todo el resto de mi vida junto a ti, hacerte feliz porque te lo mereces, quiero que seas la madre de todos mis hijos, quiero que tu corazón no este dañado y quiero construir cualquier daño que tenga, si me das esa oportunidad, te prometo que te hare la mujer más feliz del mundo, ¿quieres casarte conmigo? -..