Infinito

No existen diferencias de ningún tipo cuando hay amor... Tú oriental, yo mexicana, nos desborda la pasión en la mirada, me besas y olvido lo que nos separa... Solo puedo sentir el amor que hay en nuestras almas.   

Acaricias mi espalda y erizas mi alma, a besos recorremos el mundo... Ese mismo mundo que nos separa.

Tú delgado de brazos fuertes, tus razgos de ojos son diferentes, con una mirada penetrante que me pone a temblar y me hace olvidar el mundo. 

Tú creyente de Buda, mi fe en Dios es absoluta, muy diferente a la tuya... No nos separa una religión, nos une el mismo amor.

Llego a la reunión en tu casa, Él se va a saludar a sus amigos, yo camino por la sala, me sorprendes con un abrazo, que correspondo efusivamente.

Me besas y trato de apartarte de mí, pero me vence el amor y te beso sin ningún pudor, caminamos a un rincón de la cocina, tus manos me acarician de principio a fin.

Solo susurro... Detente, alguien podría venir.

Mis manos recorren tu piel, paso mis dedos por debajo de la camisa negra de seda que llevas ceñida a ti para sentir tu columna, mientras beso cada parte visible de tu piel.

Disfrutamos nuestro amor y la pasión desbordada, pero interrumpe a lo lejos la voz de tus hijos y aterrizo en mi realidad. 

"Eres prohibido" recordando bruscamente a la vez "Mi compromiso".

Como quisiera sentir con él, lo que tú me haces vivir con un sólo beso... Como quisiera retroceder el tiempo y ser a ti a quien tenga en mi lecho.

Fingimos platicar al tiempo que me das un vaso con hielo, mi respiración trato de serenar.

Los niños pasan corriendo al patio trasero. 

Veo entrar a tu mujer sintiéndose de la realeza, ella sabe que tú eres mío, pero vive su mentira de amor correspondido.

Se acerca a mí y me abraza. Solo siento el vacío de su alma... Aún mi corazón late desesperado sintiendo tu cuerpo al mío abrazado, mis labios seguir sobre los tuyos. Y sé que ella  pudo sentir mi latir.

Las miradas encienden nuestros pensamientos, nos conocemos tan bien, con ropa, desnudos, el alma, en espíritu,  pero... La realidad es que no te pertenezco.

Este amor es un misterio, ella de repente sin decir una sola palabra "clava una daga" en tu cuerpo, yo grito aterrada "NOOOO", desconsolada, desesperada.

Con lágrimas y  gritando digo cuanto "Te quiero" me dejo caer  a tus brazos, beso lentamente tus labios y en tu último soplo de aliento, correspondes mis besos despidiéndote, me dices con tu voz quebrada.

—"Te esperaré en el paraíso" allí viviremos nuestro amor infinito.

Quítame la vida y llévame contigo en este momento, no quiero vivir si no te veo, si tus besos no me devuelven la pasión que vivió sumergida en hielo en mi cuerpo.

Si tus brazos no me protegen, si tus labios no me hacen perder el control.

No te vayas de mi vida sin hacerme tuya de nuevo... Ella replicó.

—No, tú te quedarás a vivir tu infierno, por haber vivido un amor a destiempo, un amor prohibido, un amor que era mío.

Yo no volteo a verla, mi vida está solo contigo, viviría en el infierno si en este preciso momento cambiara lo sucedido el destino.

Gordo de mi vida "Te Amo" y te amaré eternamente, este amor nació para vivirlo en el cielo.

No me doy cuenta de nada a mí alrededor, toda mi atención está en su cuerpo, en su mirada.

No me dejes de hablar, llegará un médico, haz un esfuerzo amor de mi vida.

Escucho el murmullo de gente a mis espaldas, no me importa nada, no me importa lo que piensen, ya sabían que nuestras almas han vivido entrelazadas por siempre.

Me apartan de tu cuerpo, entre gritos pido me dejen cerca de ti, tus ojos no se apartan de los míos y mi alma desea irse contigo... En una mirada nos decimos hasta luego, él me lleva a jalones lejos de todo tu recuerdo, tomamos un avión, no pregunté nada, no me interesa vivir, estoy muerta en vida sufriendo tu partida.

Aún sin imaginar que tus caricias y besos vivirán encendidos en mí por todo el tiempo. Este amor es un misterio que nació a destiempo, un amor que vivió para morir y volver unidos a lo eterno.

Nuestras miradas se perdieron, pero cierro los ojos y puedo sentirte en mí, esa última entrega, esas últimas caricias, esos últimos besos apasionados.

Su piel morena solo me recuerda lo blanco de tu cuerpo... Sus besos desenfrenados y desesperados por hacerme suya, a los tuyos tranquilos y apasionados que hacían de mi cuerpo un torbellino de pasión, un huracán violentando mis deseos, olvidando mis principios.

Ya no estás conmigo "Mi amor" nos separó una desgarradora muerte por amor, pero tu compañía estará siempre a mi lado, en mis pensamientos, en mi alma solo tú vives.

Tus recuerdos, nuestros encuentros a escondidas, nuestras almas se unirán espiritualmente un día.

La pasión continua como una cascada que nunca detiene su caudal, como el mar inagotable, como todo ser viviente desconocido... Nuestro amor es y será infinito.