Capitulo 1

La historia de amor de Jane y John

Jane y John se conocieron en la universidad y rápidamente se sintieron atraídos el uno por el otro. Ambos eran estudiantes de último año, estudiaban negocios y compartían una pasión por los viajes y la cultura. Después de unos pocos encuentros casuales, comenzaron a salir formalmente, y su relación se fortaleció rápidamente.

Sin embargo, justo cuando parecía que la relación estaba tomando un giro serio, John recibió una oferta de trabajo en Londres. Era una oportunidad emocionante para él, pero significaba que tendría que mudarse al otro lado del Atlántico. Jane estaba devastada al principio, pero John la convenció de que podrían hacer que la relación funcionara a pesar de la distancia.

"Vamos a hacer esto", dijo John en su última noche juntos antes de partir. "No importa la distancia, te amo y quiero estar contigo".

Jane sonrió con tristeza. "Lo sé. También te amo, John. Prometo que haremos que esto funcione".

John se fue esa mañana y los siguientes días fueron los más difíciles de la vida de Jane. Se sentía sola y triste, extrañando a John y sin saber cómo manejar una relación a larga distancia. Pero pronto descubrió que había maneras de mantener su amor vivo.

El primer mes después de que John se fue, Jane recibió una llamada de él. "Hola, cariño", dijo él. "¿Cómo estás?"

"Extrañándote muchísimo", respondió Jane. "¿Cómo te va en Londres?"

"Bien, gracias. Aunque extraño estar contigo. Pero escucha, tengo una idea. ¿Por qué no hacemos una videollamada más tarde? Podríamos vernos el uno al otro, y sentir como si estuviéramos en la misma habitación."

"¡Eso suena genial!", dijo Jane emocionada. "¿A qué hora te funciona?"

"¿Qué tal a las 8 pm hora de Londres? Eso serían las 3 pm para ti, ¿verdad?"

"Sí, perfecto. Te veré a las 3", dijo Jane con una sonrisa en su rostro.

Esa noche, Jane estaba nerviosa mientras configuraba su computadora para la videollamada. Pero cuando John apareció en la pantalla, sonriendo desde su apartamento en Londres, todo su nerviosismo se desvaneció.

"Hola, preciosa", dijo John. "Te extrañé tanto".

"También te extrañé", respondió Jane. "¡Es tan bueno verte!"

Durante las siguientes semanas, Jane y John se mantuvieron en contacto a través de videollamadas regulares, mensajes de texto y correos electrónicos. Siempre encontraban algo para hablar, y parecía que nunca se quedaban sin temas de conversación.

Sin embargo, la distancia comenzó a pesar sobre ellos, especialmente cuando se trataba de eventos importantes. Un día, Jane llamó a John para contarle la emocionante noticia de que había conseguido un trabajo en una de las principales empresas de marketing de su ciudad. Pero en lugar de sentirse feliz por ella, John parecía un poco triste.

"¿Qué pasa, John?", preguntó Jane. "No parece que estés muy contento por mí".

"Lo siento, Jane", respondió John con tristeza

"No es que no esté feliz por ti, lo estoy. Es solo que me doy cuenta de que estoy perdiéndome muchas cosas importantes en tu vida al no estar allí contigo. Me siento un poco desplazado".

Jane entendió la preocupación de John y se sintió agradecida por tener un compañero que se preocupaba tanto por ella. Decidieron que deberían seguir trabajando juntos para hacer que su relación funcione, incluso a pesar de la distancia.

A medida que pasaban los meses, la relación de Jane y John se hizo más fuerte. Las videollamadas se convirtieron en una parte regular de sus vidas y comenzaron a encontrar maneras de hacer que la distancia no fuera tan importante. A menudo veían películas juntos a través de videollamadas, y también cocinaban juntos, cada uno en su propia cocina, compartiendo la misma receta.

A pesar de que se perdían la compañía del otro, Jane y John seguían encontrando maneras de conectarse y hacer que la distancia no fuera un problema. Pero sabían que no podían mantener esta situación por siempre. Finalmente, tendrían que encontrarse de nuevo en persona.

Fue después de 10 largos meses cuando John volvió a casa para visitar a Jane. Fue un reencuentro emocionante, lleno de lágrimas y abrazos. Para celebrar su reencuentro, Jane y John decidieron tomarse unos días para viajar a la costa.

Mientras caminaban juntos por la playa, John se arrodilló en la arena y sacó un pequeño estuche de terciopelo de su bolsillo. "Jane", dijo, abriendo el estuche para revelar un hermoso anillo. "Quiero pasar el resto de mi vida contigo. ¿Te casarías conmigo?"

Jane estaba completamente sorprendida. "¡Sí, por supuesto que sí!", respondió ella, y los dos se abrazaron en la playa.

Desde ese día, Jane y John supieron que la distancia no podía separar su amor. A pesar de las dificultades y los obstáculos, habían logrado mantener su amor vivo a través de la distancia. Pero también sabían que no querían pasar más tiempo separados. Con un compromiso aún más fuerte que antes, John decidió dejar su trabajo en Londres y mudarse permanentemente a la ciudad de Jane.

"La distancia fue difícil", dijo John. "Pero valió la pena para estar juntos. Nunca volveremos a estar separados así".

"Absolutamente", respondió Jane. "Estoy muy agradecida de que hayamos podido superar la distancia juntos. Nada puede detener nuestro amor".

Con la decisión tomada, Jane y John comenzaron a planear su futuro juntos. Había mucho que hacer, desde buscar un nuevo hogar hasta encontrar un trabajo para John en la ciudad de Jane. Pero trabajando juntos, lograron hacerlo todo y se establecieron en una nueva vida juntos.