Mi vida era como la de cualquier chica de 17 años, iba a la escuela, volvía de la escuela, hacia mis deberes y ayudaba en casa. Yo no me sentía tan especial, ya que era ni muy alta ni muy baja, mi pelo castaño y ojos cafe chocolate no me hacian sentir asi.
Mis únicos amigos eran Julieta y Jorge, ellos siempre me decían lo bonita que me veía o me animaban a sacar lo mejor de mi.
-Anika tu conjunto me fascina nena pero deberías mejorar tu maquillaje- me decía Julieta tratando de ponerme pintalabios.
-Julieta por favor como si eso me ayudará en algo- algo molesta me apartaba de ellos.
-Ani porfavor tienes que alejar esos pensamientos, porque tu ya eres bella y te queremos ayudar a ser más hermosa- contra atacaba Jorge.
-Chicos ya basta por favor, saben que no me gusta llamar la atención, yo sólo quiero centrarme en el cole- tratando una vez más de distraerlos.
-Ay chica cuando vas a divertirte y ser más extrovertida, más glamorosa pero haya tu si quieres ser así de sencilla- Julieta se volteo y se dirigió a la siguiente clase
-Dejala sabes que al rato se le pasa- me decía Jorge con una sonrisa de oreja a oreja.
Siempre era así ellos querían que fuera diferente en una buena manera pero yo no me sentia con esos animos de salir ni nada que no fuera acerca de la escuela.
Hasta que algo sucedió, un día estaban acabando las clases para salir a almorzar y Julieta me paso una nota con un breve texto que decía que me tenía un chisme.
-A ver Julieta ¿cuál es ese chisme que nos tienes que decir? -preguntandole una vez que nuestro amigo se nos unió.
-Pues me enteré que en quinto semestre hay un nuevo alumno guapísimo e inteligente- nos decía casi gritando.
-Ay Julieta tú y tus cosas, yo pensé que era algo relacionado con la escuela- me queje disgustada.
-No se tu pero yo si quiero conocer a ese nuevo bizcocho- Jorge por su parte lo decia mordiendosu labio.
Puse los ojos en blanco y terminaba mis tareas mientras mis amigos seguían discutiendo sobre chico nuevo.
De pronto escuche que alguien se acercaba a nuestra mesa y mis amigos se quedaron callados con los ojos como platos, me voltee para ver que es lo que los silencio y para mi sorpresa era el prefecto de quinto semestre.
-Jóvenes buenos días espero no interumpirr nada importante, sólo pasaba un momento para enseñarle las instalaciones a nuestro nuevo alumno- señaló el prefecto a un chico que iba detrás de él.
Era la primer vez que lo veía y sentia como si mi corazón se saliera de mi pecho ya que era lato, de porte refinado, complexión fuerte y de unos ojos verde esmeralda hermosos.
Cuando desperté de mi ensoñación Jorge me están sacudiendo, ya que no me había dado cuenta que el prefecto y el chip se habían ido.
-Nena debiste a ver visto como te quédate ante el chico nuevo -me decia mientras reía.
-Ay ya cállate y déjame terminar de estudiar- le dije cortando toda fuente de burla.
-No se tu pero el chico también te veía como si ya te conociera- decía Julieta algo dudosa
-Tal vez alguien le dijo de nuestra amiga ¿no crees?- le dijo Jorge con aire de suficiencia.
-Sea como sea yo no lo quiero volver a ver- dije dando por terminada la conversación.