Amores secretos - Draco Malfoy

Capítulo 26 - EN EL OJO DEL HURACÁN

 

EN EL OJO DEL HURACÁN

 

Narra Draco

 

Después de ese día, después de todo lo que me contó Brooke, no dejé de estar alerta y mirar en todos los recovecos del castillo. Siento que alguien nos está vigilando, que alguien está al acecho, esperando su oportunidad de atacar y me pone de los nervios. Los chicos se alejan de mí porque no hay quien me aguante, estoy nervioso, crispado y salto a la mínima. Y para más dolor de cabeza, Brooke no hace más que vagar libremente por el castillo, metiéndose en líos y desapareciendo cada dos por tres, y yo necesito tenerla siempre en mi radar, saber que está salvo. Más después de las palabras que dijo el profesor Dumbledore.

De repente unos gritos resuenan en la sala común, no entiendo muy bien lo que dicen pero son voces de mujeres. Una idea asoma por mi cabeza y salgo con paso rápido de mi habitación. Bajo las escaleras y las voces comienzan a ser nítidas. Son Brooke y Pansy. ¿Qué habrán hecho ahora?

Al llegar me encuentro con el resto de mis compañeros atentos a la discusión que están teniendo.

  • ¿Por qué no te compras una vida, Parkinson? – le dice con la voz elevada Brooke.
  • Mira niñata de mierda – responde Pansy enfadada – Estoy cansada de ti. Porque no nos dejas en paz y te piras una vez de aquí.
  • No me voy a ir a ningún sitio, así que mentalízate de que me vas a tener que ver todos los días – sigue Brooke con una sonrisa pintada en la cara.
  • Borra esa estúpida sonrisa de la cara – escupe Pansy – Te recuerdo que la que manda aquí soy yo.
  • ¿Aún sigues con esa estupidez? – se ríe con ganas – De verdad, no sé que tenéis vosotros las serpientes con querer ser el centro del universo y los dueños y señores de todo. De verdad que no lo entiendo.
  • ¡No te burles! – grita Pansy – Me das pena – sigue diciendo – Te doy tanta envidia…
  • ¿Tú? ¿A mí? No me hagas reír, Parkinson.
  • Sí, estás celosa porque yo tengo a Draco y tú no – ruedo los ojos al escuchar sus palabras. ¿Por qué me tiene que sacar a relucir?
  • ¿En serio? – la mira incrédula - ¿Otra vez con lo mismo? A ver si te queda un par de cosas claras. Primero, yo no quiero nada con Malfoy y si así fuese, te tendría que dar igual, no es asunto tuyo – hace una pausa y veo como Pansy se enfurece cada vez más – Y segundo, Malfoy no es ningún juguete ni pertenece a nadie, así que deja de ir por ahí diciendo que es de tu propiedad. Él no es tuyo – sentencia de manera firme haciendo que una sonrisa se me dibuje en la cara al ver que me ha defendido.
  • No me hables de lo que no sabes – contraataca Pansy y se da la vuelta – Ojalá te pudras en el infierno – la oigo susurrar, ya que está justo enfrente de mí.
  • ¿Qué has dicho? – pregunta Brooke.
  • Nada – responde mirándola de nuevo – No te creas el centro del mundo – sonríe divertida.
  • Ya – se ríe Brooke – Puedes pudrirte tú en el infierno, aunque ya lo estás siempre así que…
  • ¿Qué me has dicho asquerosa sangre sucia? – la mira enfadada y creo que la cosa se está poniendo más fea de lo que ya estaba.
  • Ese insulto no me afecta nada, búscate uno nuevo – Brooke se da media vuelta dando por finalizada la conversación.
  • Eres una hija de pu… - ni siquiera le da tiempo a terminar la frase cuando Brooke se gira rápidamente y le asesta una bofetada en toda la cara.

Me quedo con la boca abierta de la impresión y más cuando veo que Pansy se la devuelve, empujándola y tirándola del pelo. Brooke no se queda atrás y la empuja, terminando ambas en el suelo, rodando de un lado a otro.

La gente jalea y grita, pero nadie hace nada, hasta que salgo de mi trance y avanzo hacia ellas. Alzo la mirada y me cruzo con la de Blaise y con un simple gesto de cabeza, él también avanza hacia las chicas. Cuando llegamos hasta ellas, nos abrimos paso entre brazos y piernas, recibiendo algún golpe, pero no paramos, no hasta que consigo agarrar de la cintura de Brooke y separarla.

  • ¡Suéltame! – me grita - ¡Draco, suéltame! – se retuerce entre mis brazos, pero no la suelto.
  • ¡Para ya Brooke! – le grito también para que me escuche – ¡Llévatela! – le digo a Blaise.
  • ¡Ni se te ocurra volver a insultarme gilipollas! ¡Y mucho menos a mi familia! ¿Te ha quedado claro? – le grita Brooke a Pansy, que veo que tiene el labio partido y la ceja sangrando.
  • ¡Me las vas a pagar asquerosa, sangre sucia! – grita enfadada y medio llorando por los golpes.
  • ¡Vuelve a llamarme eso y no lo cuentas! – sigue gritando aunque ya no la puede ver, porque la he cogido en volandas y la llevo fuera de la sala común. Creo que no es buena idea ir a su habitación, teniendo en cuenta que la comparten.

Recorro los pasillos sin soltarla, temiendo que vuelva a entrar e ir a por Pansy. Al final llego a una de las aulas vacías que hay en las mazmorras, entro dentro y cierro la puerta. Después bajo a Brooke y espero expectante a su reacción.

Ella me mira con los ojos cargados con furia y sonrío de forma inconsciente. Está muy guapa enfadada.

  • ¿Por qué sonríes? – me pregunta seca y brusca.
  • Estás muy guapa cuando te enfadas – digo sincero, lo que ocasiona que abra los ojos y se ruborice. He conseguido descolocarla completamente.
  • ¡Cállate idiota! – me dice histérica, nerviosa, haciendo que me ría.

Me acerco a ella y paso una de mis manos por su cintura, pegándola contra mi cuerpo. Alzo su mentón con mi mano y me doy cuenta de que tiene el labio partido, con sangre.

  • Déjame curarte – le digo en un tono más suave.
  • No te preocupes, no me duele – me dice ella también en el mismo tono.
  • No deberías de haber saltado a sus provocaciones – le digo preocupado mientras limpio la sangre seca de su barbilla con la manga de mi jersey.
  • ¿En serio me lo estás diciendo? – me mira incrédula separándose de mí.
  • No te entiendo – le digo confuso al ver su reacción.
  • ¿Qué quieres que la deje que me insulte? – sus ojos empiezan a enfurecerse y yo tenso mi cuerpo, porque sé que va a saltar conmigo.
  • No – le digo, porque entiendo porque lo ha hecho – Pero no puedes rebajarte a…
  • A ti lo que te preocupa es que ella, ¿verdad? – me interrumpe mirándome fijamente.
  • ¿Qué? ¡No! – niego con la cabeza al saber en lo que está pensando – Creo que ya te ha quedado claro que entre ella y yo no hay nada – digo con firmeza.
  • ¿Y por qué me dices que no tenía que haber saltado? – me mira sin entender nada pero aún con la rabia en sus ojos.



#70 en Fanfic
#504 en Fantasía

En el texto hay: amor, harrypotter, dracomalfoy

Editado: 24.08.2022

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.