Cristal.
Un mes después.
Estoy emocionada, mi felicidad de este día se debe a Daniel, mis padres me dieron el permiso para que fuera a Montelimar junto a mi chico, sin embargo mis hermanas deben ir porque según mi padre las gemelas no pueden sin mi. ¡Ay si como No! Pero en fin lo bueno es que pasaré un fin de semana fenomenal junto a mi novio.
En todo este mes el ha sido muy atento conmigo, venía por mi a llevarme a las clases, a veces me visitaba e íbamos al jardín, se ganó rápidamente la confianza de mis padres. La semana pasada sus padres vinieron a una cena, luego mi hermano y mi cuñada junto a los gemelos y la pequeña Alexa. Me daba mucha vergüenza que mi papá le pregunto a mi novio sin ya habíamos tenido relaciones, fue una cosa vergonzosa pero ni modo Arthur no tiene pelos en la lengua, la mamá de mi novio casi no platico mucho en aquella noche, pero el señor Alessandro era muy atento y reía mucho junto a mis padres. Mi hermano aconsejo a Daniel y le decía que no me faltara el respeto y que me tratara bien. Pensé que mi rostro se caería en ese entonces, mis hermanas igual lo atacaron al pobre, pero la noche fue llevadera y tranquila, mi cuñada igual nos aconsejo mucho.
Dejo de pensar cuando escucho mi móvil sonar y la llamada es de Camilo mi amigo.
—Hola preciosa, como estas—sonriendo respondo.
—Muy bien Camilo ¿ y tu?
—Estoy bien y me alegra saber que tu lo estas también, te llamaba para invitarte a salir mañana a la feria de Santo Domingo. — mordí mi labio y apenada le respondo.
—Lo siento Camilo, pero mañana saldré con mi novio—Camilo no responde, lo único que logro escuchar es un bufido.—Estas ahí.
—Entiendo Cristal, pero no puedes decirle a tu novio que te de un espacio con tu amigo, creo que esta siendo muy aburrido, deberías decirle que quieres salir también con amigos— Comento con molestia.
Vaya, esta celoso y esta pidiendo algo imposible.
—¿Camilo estas celoso?—pregunto molesta.
—Bueno, sabes que te quiero mucho y pues como amigos te estoy celando.
—Tú y yo apenas llevamos dos meses de conocernos como amigos y creo que estas pidiendo algo que no se podrá, Daniel no es aburrido, disfruto estar con él y bueno tu y yo apenas nos conocemos siendo amigos, no hay mucha confianza el hecho que te di mi amistad y contacto no significa que puedas tutearme, te he aprendido a apreciar, pero quiero que dejes de meterte en mi noviazgo.— es el colmo con su actitud de amigo celoso, además porque razón tendría que salir con el, estoy empezando a creer lo que me dijo Cassandra sobre Camilo, que seguro me ve con otros ojos. Suspirando decido en dejar esta platica a un lado.
—Disculpa Cristal, pero tu me gustas mucho, esto que esta pasando contigo es inevitable— susurra suspirando.
—Lo siento, lo mejor es que no sigamos con esta amistad.
—Cristal no por favor, quiero seguir siendo tu amigo, no volveré a repetir esto, lo siento tómalo como algo innecesario.
—Esta bien, espero no vuelvas a repetirlo porque será definitivo nuestra amistad.
Después de terminar mi llamada con Camilo, entre a ducharme y al mismo tiempo a pensar en este acontecimiento infortunio. Cuando el me pidió que fuera su amiga acepte sin chistear porque lo escuche sincero y no como otros chicos que buscan como enamorarte, en estos meses conversamos mucho, hasta el me hizo reír en varias ocasiones, pero no pensé que yo le gustará y ahora con la confesión de hace un rato, creo que lo mejor es que me aleje de él sin ser obvia.
Desperté con una sonrisa de felicidad, este día seguramente será inolvidable. Lo primero que hice fue saludar a mi perrita y ella ladró contenta, luego entre a ducharme para luego preparar mi maleta ya que saldremos antes del mediodía, bueno seguramente mis hermanas me ayudarán. Al finalizar mi ducha me senté en mi pequeño sofá y llamé a mi nana para pedirle mi desayuno ya que no pensaba bajar al comedor, tengo muchas cosas que preparar, mientras tanto me vestí con un vestido liso y si no me equivoco color lila o negro. Son los colores que más me gusta y se que mis padres y mi hermano busca lo que más me destaca. Cuando estoy buscando mi sandalia de piso la puerta de mi habitación se abre sin ser tocado.
—Buenos días hija Mía—entró mi madre, bueno ella siempre a sido de esa manera.
—Buenos días Ma— La salude extendiendo mi mano, ella lo toma y me ayuda a acomodarme en el sofá.
—Déjame ayudarte con tus sandalias y también con tu cabello— pidió mamá acariciando mi mejilla, Asentí señalando mi armario donde dejo ubicado mis sandalias, botines y zapatos.
—Te ves muy linda, y este vestido es color lila así que te pondré una sandalia del mismo color, luego debes comer tú desayuno que yo misma prepare.— Asiento con ganas de llorar, quisiera olvidar el pasado y ser feliz como lo estoy siendo estos días, mamá beso mi mejilla y luego peino mi cabello.
—Gracias mamá.—agradecí sonriendo.
—No me agradezcas mi niña, es mi deber como madre, ahora estas lista y más preciosa, ahora come tu desayuno o se enfriara.
— Si, porque muero de hambre.— Mi mamá me coloco la bandeja en mi pierna y empecé a comer deleitada por el sabor tan único.
—¿Te gusta?—Pregunto alegre.
—Mucho mamá, tu forma de preparar y cocinar es mejor, seguro papa le fascina cuando tu cocinas.
—Si hija, definitivamente hasta pide mas —expone riéndose, igual yo rio a carcajadas sin ser escandalosa—¿Cristal amas a ese chico?—Pregunto mi madre cambiando de Tema.
—Si mama y mucho, aunque no se lo e dicho, pero Daniel fue y sigue siendo mi primer amor.
—Tu viviste algo similar a lo mío con tu padre, solo que él sufrió mucho cuando niño y no pudimos estar juntos, hasta lo volví a conocer de una manera que no me le esperaba— Expreso mamá y yo sentí un nudo feo en la garganta.
Mi papa sufrió en su niñez y como fue todo eso— quise saber pero a la vez no.
—Sufrió mucho, pero no quiero mortificarte y remover el pasado.—Concuerdo con ella, no quisiera arruinar mi día.— Pero mi niña si un dado caso pasa algo entre tu y Daniel debes cuidarte, usar preservativo, recuerda que aun son muy jóvenes para traer un bebé...
¡Dios mío! Como se le ocurre hablar de eso, que vergüenza, creo que mi rostro está más que ruborizado.
—Mama ya no sigas diciendo esas cosas, aun no pienso hacer eso, apenas llevamos mes y medio.— Mi madre rio a carcajadas.
— Oye mama, solo ustedes están en su carcajadas, cuéntenos para disfrutar junto a ustedes—Está vez mis hermanas invaden mi habitación como siempre.
—Bueno es solo que le estoy aconsejando a mi niña que debe usar preservativo si va hacer su primera vez con Daniel.
—¡Mamá!—Chille indignada, mis hermanas chillan al mismo tiempo. Seguramente no les gusta escuchar lo mismo que yo y peor por parte de nuestros padres, mamá seguía hablando y aconsejándonos, realmente mi rostro se ruborizo aun más.
Porque a mi madre se le ocurrió tocar este tema.
¡Ay no!
Camilo.
Quería gritar por la molestia y el enojo, no puedo negarlo más estoy enamorado de Cristal y me pudre verla junto a ese chico, como quisiera alejarla de él, quisiera que ella me preste atención a mi y que yo fuera el que sostenga su mano, sin embargo eso es algo difícil porque según tengo entendido que Daniel fue su primer amor desde pequeños, pero luego él se fue y estuvo fuera por más de 5 años, por desgracia regreso quitándome la oportunidad de poder conquistarla. Nunca había celado a nadie y tampoco habia odiado a una persona, pero mi corazón esta gritando que debo odiar a ese tipo y que debo luchar por Cristal.
—¿Hermano, que haces?— Dejo de lado mis cavilaciones cuando me habla mi hermano.
—Un ensayo que entregare la otra semana— respondí sin quitar mis ojos de la computadora.
—Bueno te gustaría ir con nosotros a Montelimar, mi novia me ha invitado, iremos por unos días.— gire mi rostro hasta el marco de la puerta dónde me habla mi hermano.
—Que bien pero me imagino que Cristal no irá.
—Claro que ira, pero sabias que ella tiene su novio y el irá con nosotros—Asiento apretando mis puños.
—Ella es mi amiga, tranquilo hermano y si iré.
—Perfecto, prepara un poco de ropas.— Asiento sonriente, haré lo necesario para tenerte Cristal.