Capítulo 23: La búsqueda

Las brujas ya estaban preparadas.

Percephone les mostró el lugar. Así que cuando fueron directamente . Percephone tuvo un presentimiento muy malo que estaba por pasar.

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Jake hizo que Lucia se duerma, consolándola.

Cuando se da la vuelta. Un hombre encapuchado los miraba en la puerta.

—Shhh...—se rio por debajo—Tu...ven, si haces un movimiento en falso te dispararé. ¿De acuerdo?

Jake miró alarmado.

Asintió, dio unos pasos, mientras que ese hombre le indicó que fuera a la sala.

—¿Quién eres?—le preguntaba mientras bajaba en las escaleras.

El hombre lo empujó hasta que al fin lo condujo hasta la sala.

—Arrodíllate—le ordenó.

—¿Para que?

—¡Solo hazlo!

Jake hizo un moviendo con su mano para hacerle creer que tenia algo pero solo logra que con su poder sobrenatural lo haga estampar contra la pared.

La capucha se bajo dejando ver su rostro.

—¿¡David Knight!?

—Al parecer sabes mi historia —le sonríe mientras una pequeña linea de sangre salía de su labio.

Percephone justo llego a la zona que sentía su aura. Pero en algo se equivocó, él no estaba allí.

Jacob por su parte no podía parar de ponerse nervioso.

—¡Con un demonio, no me importa morir , de todos modos iré al infierno!

Valentine , su amigo , lo escuchaba detrás de la puerta.

—Te volviste loco—dice al entrar a la habitación en la que Jacob está.—Yo iré para protegerte. De todos modos soy un vampiro no puedo morir fácilmente.

Ambos agarraron las armas que Jacob tenía en su mansión y fueron directamente a la casa de Lucia.

Cuando llegaron , Jacob intento darle indicaciones para que Valentine fuera por detrás pero él se negó.

—Si te dejo solo es sinónimo de problemas—alzo una ceja mientras Jacob se preparaba para meter una patada a la puerta —¡Ah, espera!

Con un pequeño alambre lo introdujo a la cerradura y con el pudo abrir la puerta.

—Recuerda que no debes romper nada.

—¿Ahora eres mi madre?, ay por favor —le hizo a un lado y se adentro a la casa.

—Solo trató de que esto se haga lo más civilizadamente.

Justo cuando dice eso, Jake es arrojado muy cerca de ellos.

Su rostro estaba muy pálido y con venas violetas que se le sobresalían de su cuello.

—Me...envenenó... —murmuro Jake.

Jacob mostró su rostro más frio que de costumbre, agarro su escopeta y le apuntó a David.

—Ahora sí date por muerto.

David se rio a carcajadas. Tenía a alguien detrás de él. Le agarraba de los cabellos.

—¿Me vas a disparar, cierto?...vamos, hazlo—agarro a Lucia y lo puso delante suyo como un escudo—A ver si tienes agallas...

Jacob abrió los ojos alarmado por la situación. Jake intento levantarse pero el veneno lo hacia muy débil como para hacerlo.

—No ...lastimes a Lucia...por favor...—suplico mientras Valentine lo ayudaba a levantarse.

David la sostuvo fuerte mientras olía el cabello rizado de ella.

—Hmm tú lindo cabello me hace acordar a alguien. Es una lástima —agarro la navaja y se lo puso en su cuello.

Jacob sacó el seguro al escopeta.

—Si le haces algo...te volaré los sesos.

David sonrió divertido.

—Que curioso es saber que tu eres el hijo que muchos temen ver—jugo con una mecha del cabello de Lucia —Lucifer, el rey de las tinieblas.

Luego le arrancó esa mecha.

—¡Auch!—grito ella de dolor.

—¡Deja de jugar, y suéltala de una maldita vez!—grito Jacob.

David se rio más.

—¿Que, no te gusta lo que ves?

Sin que se diera cuenta Valentine estaba detrás suyo , tomó su mano y se lo doblo. Haciendo que suelte a Lucia.

—¡Jacob lleva a Lucia y Jake lejos de aquí! —le ordenó Valentine mientras arrojaba a David por los aires. Solo hizo que David sacara el arma y disparará contra él.

—Un vampiro... La raza más detestable junto a esos perros sarnosos... —le dio otro disparo pero Valentine logro esquivar.

—Ni yo soy tan malo como calificar a los licántropo como perros sarnosos. Es como si yo dijera que los humanos son monstruos que no necesitan un rostro para ser como nosotros.

David cambio de gesto.

—¿Cómo puedes comparar a los humanos. Si ustedes fueron los salvajes que asesinaron a muchas personas inocentes...?—saco una estaca—Tú no saldrás vivo de aquí. Serás mi premio de consuelo por la cabeza de un Williams.

Cuando dio unos pasos más. Algo lo detuvo. Escuchó que se avecinaban muchos autos.

—Ah...se acabó la diversión... —justo llega a lastimar a Valentine dándole un puñetazo en el rostro.

Muchas personas entraron a la casa , pero resultó que David Knigh se había ido.