Capitulo 4

Un domingo por la noche, Dereck me había llamado para venir en un viejo parque porque quería conversar conmigo, yo me emocione mí mente no dejaba de preguntarse ¿porqué quería que fuera al viejo parque? para conversar con él. Me dejo con una gran intriga, Salí lo antes posible de mí casa, para dirigirme al viejo parque.

Cuando llegó lo encuentro sentado en unos de los columpios del dichoso parque, observaba detenidamente la luna que no se percató de mi llegada, me senté en unos de los columpios en silencio, estábamos él y yo observando la hermosa luna.

Después de un gran silencio le dije—aún sigo recordando todas las noches el día en que nos conocimos— le dije mientras sonreía.

—Dereck: Sabes siempre te eh querido hablar, pero no tenía un motivo por el cual hablarte, me llamaba mucho la atención cada vez que estabas sola, todo los del salón hablándose entre ellos y tú la única chica solitaria.

En ese momento me sonroje como de costumbre, trataba de ocultar mis nervios pero todo fue en vano, estábamos solo en un parque a las 8:30 p.m. aunque yo diría tan solo no estábamos, porque había parejas sentadas a los lejos de unos asientos del parque.

Dereck da un gran suspiro y dice—me encanta mirar la luna por las noches mientras la brisa rosa contra mi piel, y sobre todo me gusta estar en buena compañía cada vez que observo la luna.

Me quede en silencio, aun no entendía el porque me dijo que viniera a este viejo parque, para él soy una buena compañía ¿Por qué me habría llamado especialmente a mí? De tantos amigos y amigas que tiene prefirió llamarme a mí, primero pensé que estaba triste y que quería que yo le consolara, pero…no.

Pero como sabría yo si estaba o no estaba triste, entre los días que llevo conociéndolo nunca lo eh visto con cara de tristeza, siempre al llegar al colegio me recibía con su hermosa sonrisa, que me llenaba de alegría cada vez que sonreía para mí.

Aquella noche nos quedamos conversando sobre las cosas que nos gustaban y que no nos gustaban, y ahora ya se que regalarle a Dereck para su cumpleaños se que le va a gustar, pero será para el próximo año ya que, su cumpleaños ya había pasado. Pero nunca supe el motivo especifico por el cuál me dijo que viniera a este viejo parque.

Ese domingo por la noche mientras la única iluminación que teníamos era de la luna, él me dijo que este viejo parque para él, tenía lindos recuerdos de su infancia y que este parque fue testigo de su felicidad cuando era pequeño.

Pasarón los días y yo seguía más enamorada de Dereck, aunque no estaba tan feliz porque ya ni veía a mis padres solo los escuchaba hablar por las noches, sobre cosas del trabajo a veces tenía ganas de levantarme de mi cama, eh irlos a saludar, pero el sueño me ganaba.

Un día me levantarón las voces de mis padres hablando sobre un viaje, al principio pensé que era producto del sueño que cargaba ya que llevaba pocos días sin poder dormir. Me llamo tanto la atención que decidí escuchar lo que conversaban porque se le escuchaba como si estuvieran discutiendo, y mis padres no suelen discutir.

Abrí la puerta de mí habitación con cuidado porque rechinaba cada vez que se movía, me acerqué a la puerta de mis padres y alcance oír sobre que iban a realizar un viaje, a mi mamá se le escuchaba muy triste cuando decía que iban hacer conmigo.

Mi padre respondió que ya sabía con quién dejarme. Yo aún no entendía exactamente lo que querían decir con eso.

Aleje mi oído de la puerta de mis padres, porque escuche unos pasos que se acercaban hacia la puerta, no pude escapar de ahí porque me quede pasmada sobre lo escuchado, tenía muchas preguntas que rondaban por mi mente.

Veo como la puerta se abre lentamente y la luz del cuarto de mis padres me iluminaba toda la cara ¡aún puedo escapar! Al parecer mi padre abrió la puerta, creó que se dirige a mi cuarto, porque dijo ‘’voy a ver como esta nuestra hija’’ Pero estaba mirando hacia atrás, diciéndole a mí mamá que todo iba a salir bien, y que el viaje iba a demorar un poco, pero que iba y que va a valer la pena.

Mientras mí papá decía eso pude escapar de ahí lo antes posible eh irme a mi habitación, abrí la puerta de mí habitación despacio entró a mí habitación y me hice la dormida, entre unos minutos. Después entra mi padre a mí habitación, pude saber que era él por su distinguido perfume que siempre acostumbraba usar, y porque la puerta de mí habitación pronunció que alguien había entrado, con el ruido que siempre hacía. Ya sabía que iba a venir a mí habitación.