Another Universe And a Unknown World : Outside

Capítulo 11 | Un talento cualquiera

 

Capítulo 11 | Un talento cualquiera

 

1

 

Apenas nos dimos cuenta, pero pasamos el resto de la noche sin cenar.

Recibí el regaño de Gark luego de salir a echar un vistazo unos segundos sin su consentimiento. Realmente estaba preocupado por mi seguridad, hasta llegar al punto de volver a interponerse entre la puerta para obstruir el paso.

Pensamos qué hacer para lidiar con el temible y peligroso insecto, estaba rondando por el refugio.

Un simple cuchillo como el que tiene Gark no sería suficiente para eliminarlo, y planear una trampa sería imposible sin alguna carnada. Decidimos esperar hasta el día siguiente sin continuar.

—Una... Dos...

—¡T- Tres!

Por la mañana, preferimos huir.

Abrí las puertas sin pestañear. Mientras Gark salía por delante cerré la puerta que daba a la habitación, siguiendo la que conectaba el pasillo hacia al exterior.

Fue gratificante no tener problemas durante el proceso.

Nos alejamos sin dar sospechas a los vacíos alrededores.

—Debimos hacer eso, tengo muuuucha hambre.

—Habríamos salido hace 2 HORAS, si alguien no se rehusaba a intentarlo.

—¡Nop te escucho...! ¡Na, na, na, na, na!

Ese temor a la criatura nos retrasó bastante. Supongo que su estómago vacío fue el detonante a hacerlo decidir.

Es una lástima, ya que por ahora la merienda se suspende.

—Deja el ruido, no llamemos la atención.

—¡...Na, na, na...! Oh, esto está más vacío que ayer.

El brote del Letargo Escarlata hizo que la ciudadanía entrara en alerta, llegando a tomar métodos seguros como el confinamiento. Debido a ello, las calles cada vez son menos transitadas, siendo para nosotros menos complejo ser detectados.0

Podía haber una gran posibilidad de encontrarnos con patrullas y ser interrogados, esto incluía a Confert Bluehite, Escudero de Ballery.

Tomamos una ruta distinta hacia cierto lugar para hacer las pruebas.

Cuando me refiero a «Pruebas» quiero decir que ubicaremos un espacio donde podamos comprobar las verdaderas habilidades de Gark, sin ser interrumpidos.

—¿Aquí? ¿Otra vez?

El sitio destinado fue el mismo donde ocurrió aquella persecución por una bolsa de dinero, tratándose del jardín inmenso ubicado metros adelante de la Central.

—Parece un buen lugar para «relajarse». Entre tantas plantas, dudo mucho que seamos vistos.

—Ehm... Sip. Pero nop vinimos a descansar... ¿O así era?

—Solo invento la excusa perfecta. Un día normal en la naturaleza.

Apartados de el Letargo...

Aunque alguien nos viera, sería sencillo persuadirlo.

—Uhm... Nop es justo. ¿Qué hicimos para alejarnos tanto? Me gustaba el antiguo lugar donde almorzamos...

Era obvio notar su descontento por el cambio de sitio; parece que se adapta rápidamente a un punto específico.

—Nos inculpan por extraños sucesos, eso agrega peso extra a nuestra situación.

Cualquier problema que ocurra de aquí en adelante será relacionado con nosotros, sin importar las circunstancias. La gente tiende a sospechar de quienes no reparten confianza. Nunca dudarán en lanzar tierra al más peligroso.

—Sígueme, busquemos un sitio.

Debe ser cómodo, y muy oculto a la vista del transeúnte.

Decidimos separarnos para cubrir terreno, siendo Gark quien encontraría más tarde el lugar indicado.

—Aquí está bien, ¿Nop?

—Hay una buena cantidad de árboles y enormes arbustos alrededor, además del espacio suficiente. Buen trabajo.

—¡Sip capitán!

Observamos los alrededores antes de entrar, y luego de comprobar todo, al fin comenzamos.

—Hagámoslo rápido. ¿Material?

—Listo.

Dividimos el trabajo durante nuestro transcurso hacia aquí; Conseguí una cajas de cartón desechadas fuera de los negocios; en cuanto a lo demás, Gark fue a por objetos que serían útiles en las pruebas.

Autoricé únicamente esta vez que se encargara lo último debido a su gran habilidad de hurto.

—¿Sujeto de prueba?

—Listo para correr.

Como extra, quiso encargarse de los roedores. No quisiera saber cómo logró capturar a uno enorme. Estaba siendo atrapado dentro de una cubeta metálica.

—Ponlo en el suelo.

—¿Así?

Quitó rápidamente la tapa y volteó la cubeta hasta tocar el pasto para evitar que el ratón escapara.

—Colocaré los artículos.

—Con cuidado, Jetsum.

De la bolsa que trajo Gark, saqué una trampa para ratones de tamaño considerable. También encontré una especie de tablero extraño y de pequeño tamaño, construido por piezas de metal.

Acomodé las cajas y trampas alrededor de la cubeta que contenía al ratón.

Todo wsto era con el fin de darle al animal muchas posibilidades de caer en una trampa o escapar, así comprobaremos sus diversos destinos gracias a la habilidad de Gark.

—¿Eh...?

—¿Qué ocurre?

Gark fijó su vista en mi forma de colocar todo.

—¿Sabes que es eso?

—... Sinceramente, no tengo idea.

Se refería al tablero metálico.

—¿Pero... como sabes qué es esa otra cosa?

Esta vez puso atención a la trampa de ratones. Pude notar su aterradora extrañeza y confusión.

—Puede parecerte extraño... pero me resultó familiar, en cuanto a.lo otro...

—... Raro. ¿Seguro que nop te topaste con alguna antes?

Negativo.

Aunque desconocía por completo el extraño aparato, no disipaba mi curiosidad. Me dirigí a Gark una última vez.

—... No te quedes callado. ¿Qué hace esa cosa?

Aunque ya esperaba su respuesta, no dudó en sonreir descaradamente, desviando la vista hacia otro lado.

—Descubrámoslo, jeje. Entonces... ¿Sip sabes de la trampa, también puedes hacer que funcione? Tienes que tocarla y... preferiría conservar mis deditos.



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En el texto hay: misterio, aventura

Editado: 29.04.2024

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