Capítulo 21: La paz se perturba.

Arlett 

Me despierto de un sueño complaciente para mi, ya que siento algo rosar mi trasero.

Abro los ojos y veo el pecho de Grabiel totalmente desnudo. Y esto me teletransporta a todo lo sucedido anoche.

Madre santa querida, no puedo creer que anoche me entregara en cuerpo y alma a Grabiel.

Me sonrojo por este último pensamiento. Y giro para acunar el rostro de mi novio en mis manos. Lo tomo en mis manos y paso delicadamente mis dedos por esos labios que me enloquecen.

Mis manos bajan hasta su pecho y cuando llego a este posó mis labios sobre su piel desnuda, reparto besos por todo su abdomen.

Joder este hombre tiene una abdomen que literalmente puedes lavar en el.

-Es bueno saber que no fui el único que amaneció con ganas.

Río. Por su comentario y sin esperar más beso sus tentadores labios, Grabiel profundiza el beso y con esto logra darme un gran beso Francés.

Ese beso logro que se causaran estragos en mi interior. Logro que nos convirtiéramos en una sola carne nuevamente.

Estoy esperando que Grabiel se cambie para ir a caminar y conocer Francia. Como amanecimos juguetones se nos hizo tarde y aquí estamos.

Cambiándonos a velocidad de la luz.

Me veo interrumpida ya que suenan mi teléfono, lo acuno en mis manos y puedo ver que es una vídeo llamada de mi madre.

Genial, en este preciso momento

Contesto y me quedo shockeada al ver a Zeus, transmitiéndole su esperma a una cachorra color negro.

Hasta mi perro, quiere traumarme.

-Mamá porque dejas que Zeus le trasmita su valioso esperma a esa cahorra.

Mi madre ríe y yo bufo.

-Tu puedes estar cogiendo como conejo pero el pobre perro tiene que quedarse solo toda su vida. Eso no es justo Arlett.

Me sonrojo por sus palabras y en ese instante se coloca a mi costado Grabiel.

-Tiene razon señora Gellen, nosotros podemos coger como conejos pero el pobre perro tiene que permanecer solo, eso no es nada justo para el.

Le propino un puñetazo en el estómago que lo hago doblarse de dolor.

Él puede gustarme pero, si hace algo para dañarme, llamo a la caballería pesada y le enseñamos que no se puede meter con Arlett

-Joder Arlett deja de ser tan violenta. Pensaran que yo no te eduque correctamente.

Ruedo los ojos, y mi madre enfoca a Zeus en el acto.

-Joder madre deja que mostrarme eso -mamá ríe y yo me tapó los ojos con las manos.

-Es como estar viendo porno. Pero esta vez es de animales.

Escucho que lanza una gran carcajada y yo me no se donde esconderme por las ocurrencias de mi querida peor loca madre.

-Mamá, por favor no en tortures más.

Mis dos locos favoritos juntos. Me volveré más loca de lo que estoy.

-Te prometo que te dejare tranquila, pero esto sera después que me respondas una de preguntas querida hija -Ruedo los ojos y ella ríe hasta mas no poder -Grabiel la tiene grande.

Joder mi madre me hará morir de la vergüenza.

Sonrojada me digno en contestar.

-Grande le queda pequeño madre.

Mi madre y yo nos reímos y Grabiel nos reprocha estar hablando de él, como si el no estuviera presente.

-Las chicas Shelby están realmente locas.

Mi madre finaliza al llamada alegando que tiene que despegar a Zeus de la cachorra, ya que tenían más de una hora muy apasionados.

Mierda me pervirtieron a Zeus. Pero todo es mi culpa por dejarlo con la pervertida mayor.

Cuando finalizamos la llamada Grabiel me pega a la pared y me besa apasionadamente.

-Cariño amaneciste muy apasionado -Inquiero y beso en repetidas ocaciones sus labios.

-Solo contigo cariño, solo contigo.

En cuanto llegamos a la habitación Grabiel se encamina hacia el baño y me deja sola un momento.

Aprovechó este momento para escribir en un papel el gran amor que el tengo a ese demente. Termino de escribir la carta y la dejo guardada en mi mesita de noche.

Sin decirle nada a Grabiel salgo de la habitación ha comprar un regalo para dárselo a Grabiel con la junto carta.

Camino perdida entre montones de tiendas hasta que encuentro el regalo perfecto. Dicho regalo consiste en par de gemelos para sus provocativas camisas. Además de esto le llevo par anillos con forma de alas.

Estoy casi segura que le gustara muchísimo mi regalo.