Capítulo 7. El pasado de Lucie.

Lucie, 2/3/2010.

Diario, estoy cansada de este mundo, las personas son muy crueles, creo que nadie me quiere aquí, estoy cansada del bullying, creo que vivimos en una sociedad muy cruel, el mundo es cruel, y nadie hace nada al respecto, te escribo ya que acabo de llegar del hospital, de nuevo, son los únicos de este cruel mundo que me ayudan.

En resumen, sí, han vuelto a pegarme, esta vez me han pegado varios puñetazos, tirones de pelo, y para finalizar, me han tirado por las escaleras, sí, las grandes, y después de eso último, me quedé inconsciente, y al despertarme estaba rodeada de máquinas en el hospital. Supongo que ahora, tendré que verme de nuevo con mi psicólogo, por lo mismo de siempre, que si me encuentro mentalmente y físicamente bien... Aunque creo que ya saben que no, bueno, por eso mismo me llevan a un psicólogo.

Pero la pregunta es: ¿Por qué a mí?

Todos me responden con lo mismo: "Te tiene envidia porque eres la mejor estudiante".

Pero yo pienso, hay muchos estudiantes buenos y son sus amigos, y bueno, ella también es muy buena, o bueno, mejor, ¿por qué lo hace? Pues a eso me responden: "Será por problemas familiares, lo hará para desahogarse". O también: "Lo hará sin pensarlo, porque me he enterado que su padre está muy mal." Pero mi padre también está mal y no hago algo parecido.

Pero diario, ¿y si desaparezco de este mundo? Todo me va mal, me hacen daño, no me quieren y tengo un padre al borde de la muerte, nadie me echará en falta, ¿no? Esos son mis pensamientos de ahora, pero es muy complicado para mí, en el fondo no quiero, mi mente me dice que sí, pero mi corazón que no.

Pero, siempre hay que escuchar a tu corazón, así que no, no voy a hacerlo.

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...

Como no, este pensamiento se lo tuve que contar a mi psicólogo, y claramente me dijo que no lo hiciera, y pues, no lo voy a hacer. Lo malo es que no paré de darle vueltas y vueltas a esto, ya que cuando volví al colegio, nada cambió, como siempre, ya que como esa niña tenía de padre al mejor abogado del país, pues no le reñían ni nada.

Esta niña seguía con los insultos, pero los profesores no le decía nada, sólo le mandaban a guardar silencio y ya.

Y diario, para que mentir, yo estaba rota por dentro, estaba destrozada, así que, sin pensarlo, salí corriendo de la clase y del colegio, me fui corriendo a un acantilado cercano al colegio, y allí me quedé pensando si saltar o no saltar, pero yo en ese momento estaba destrozada, así que, sin pensarlo, me tiré, lo último que recuerdo fue caer a cientos de kilómetros por hora, pero no, no quedé sin vida, los médicos me dijeron que unos árboles amortiguaron mi caída, pero quede muy grave, incluso en coma, pero una semana.

Desde ese día, policías, agente sociales... Tomaron el control del asunto, fueron a mi colegio, informaron de lo sucedido interrogaron a la niña, profesorado y directora. Según lo que me dijeron, pusieron una gran multa sobre el colegio por no hacer nada, y que también me tenía que cambiar de colegio.

Claramente mi familia y el psicólogo estaban destrozados por los sucedido, este último habló conmigo en privado, pero no pudo contener las lágrimas, al igual que mis padres y mi familia. Efectivamente, mi caso salió en las noticias locales y del país. Y bueno, al menos, ya estoy de nuevo en casa, pero ya no soy la Lucie de antes, mi vida ha cambiado desde ese intento de quitarme la vida.

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