Capítulo 11

La neblina cedió poco a poco, mis sentidos despertaron y una punzada de dolor se instaló en mi cabeza. Por instinto quise tocarme la cabeza con las manos, pero al instante el dolor se extendió por todo mi cuerpo haciéndome jadear arrepentida.

--Será mejor que no te muevas mucho por ahora cariño, el dolor durará unos días... --murmura con preocupación y toma delicadamente mi mano.

Al abrir los ojos me encontré con la mirada cariñosa de Ariel.

¿Estoy en mi habitación?... ¡¿Cómo demonios llegué aquí?!

--¿Q-qué fue lo que ocurrió?--pregunté tratando de llamar por completo mi consciencia.

--Ocurrió, que tuviste una severa infección estomacal --respondió el tío Brenan mirándome de forma severa, antes de que Ariel consiguiera decir algo.

¿Espera, qué? ¿Infección estomacal?

¿Y Jun Seok? ¿Dónde está Nuriel?

La pelea en ese edificio abandonado, el conocer al amigo de mi madre y salvar a un ángel de la muerte... ¿A caso todo eso fue solo producto de un sueño?

--No recuerdo cuando me desmayé...--murmuré con voz débil intentando disculparme-- lo siento.

Su mirada se suavizó de inmediato.

--Por suerte tu hermano estaba contigo y pude llevarte a tiempo al hospital --se sienta a mi lado en la cama y peina un poco mi cabello de forma cariñosa-- Nos preocupamos mucho cuando Call no llamó diciendo que estabas mal.

--Lo lamento...--me disculpé de nuevo.

--Lo importante ahora es que estás a salvo cariño --habla Ariel-- estás en casa y nosotros te cuidaremos hasta que te recuperes.

--Gracias.

--Y sería realmente de mucha ayuda si evitaras mentirme en el futuro --se escuchó de repente la voz de mi hermano entrando por la puerta-- debiste decirme... que te sentías mal.

Termina de hablar observando de Brenan por un segundo.

...--Estás realmente en problemas por no decirme la verdad y huir de casa de esa forma --escucho la voz de mi hermano en mi cabeza-- tuviste suerte de que llegara en el momento justo para traerte de vuelta y sanarte--...

Entonces... eso significa, que no fue solo un sueño... ¡De verdad sucedió!

--Tuviste mucha suerte de que tu hermano y yo consiguiéramos estabilizarte --interrumpe la voz del amigo de mi madre, confirmando que todo sucedió realmente.

--¡Jun Seok! --exclamé sorprendida.

¿Cómo es que está aquí? ¿Cómo es que Brenan lo dejó entrar a la casa tan fácilmente?

--¿Jun Seok? --inquiere mi tío con el ceño fruncido.

Cómo si se estuviera preguntando de dónde lo conozco.

--Cuando Marian llegó a urgencias le dije mi nombre antes de que perdiera el conocimiento --responde con tranquilidad--... es un asunto rutinario para nosotros los médicos hacerlo, para que nuestros pacientes se sientas más tranquilos al saber quién los atenderá.

Entonces, le dijeron a la familia que es doctor... por eso mi tío lo dejó tranquilamente andar por su casa.

--Oh, por supuesto...--asintió Ariel.

--El doctor Park --habló mi hermano mirándome directa e intensamente para que le siguiera el juego-- fue muy amable al aceptar monitorearte personalmente y fuera del hospital.

--Gracias de nuevo por eso Doctor Park --expresó Brenan.

...--Nuriel también está estable...--la voz de Jun Seok se escuchó en mi cabeza y tuve que esforzarme en no dar ninguna seña de nada-- gracias a ti, vivirá... aunque le tomará tiempo sanar por completo. Ariel aceptó que se quede en el sótano hasta que lo haga. Debes ayudarlo, recuerda lo que te dije, él es importante para tu propósito --...

Mi corazón se aceleró al escuchar la última parte.

Definitivamente tengo que averiguar a qué se refiere... y también debo averiguar qué tiene que ver Nuriel con mi madre y dónde está el hijo que mencionó anoche.

--No hay problema --respondió Jun Seok-- me quedaré hasta estar seguro de que se recupere por completo. 

Me miró directamente por un momento antes de que mis tíos lo invitaran a desayudar.

Dejándome así, sola con mi hermano.

--Estás en serios problemas --espetó molesto.

--Lo lamento Call, pero de haberte dicho me habrías impedido ir...

--Por supuesto que lo habría hecho --me interrumpió-- mi deber es mantenerte a salvo, ¡Por supuesto que me habría encargado de evitar que cometieras la estupidez de meterte en problemas que no te pertenecen! --terminó gritando sus regaños.

Ni siquiera me preocupo en pensar que alguien pueda escucharlo... lo más seguro es que él haya bloqueado el sonido fuera de la habitación.

--Él pidió mi ayuda --intento explicar mientras con esfuerzo me incorporo hasta quedar sentada en mi cama-- escuché su voz suplicante en mi cabeza... y algo dentro de mí me dijo que debía ayudarlo.

--¿Ahora escuchas a tus instintos? --inquirió con sorna-- La gente muere todos los días Asaliah, ese es el ciclo de la vida y eso no es problema tuyo, que viva o muera no tiene nada que ver contigo --terminó de forma severa.

Me molesté solo con escuchar la primera parte. Sé que no es completamente capaz de entender lo que sentí cuando escuché a Nuriel rogar por su vida, pero sí puede entender la forma en que mi corazón me dice cuando debo hacer lo correcto... porque es justo lo que ha hecho desde que mi madre se fue.

--¡Fuiste tú quién me dijo que me dejara guiar por mis instintos! --respondo enojada mientras intento salir de la cama soportando todo el dolor que siento-- Y han sido ustedes Calliel, los que me han enseñado desde que tengo memoria, una y otra vez que yo nací para salvar al mundo...¡Que estoy viva porque mi destino es salvar la vida de cientos y miles de inocentes! --grité también y comencé a caminar en dirección al sótano-- No vengas entonces a decirme ahora que debo dejar a ese hombre inocente completamente solo. ¡Lo estaban matando y no tienes ni la menor idea de lo que sentí al ver como la vida se escapada de su cuerpo! De no haber estado ahí, ahora estaría muerto.