Día 2: discusiones

Anna despertaba como todos los días asta que los recuerdos del día anterior la agobiaron, callando de rodeas por lo ideal de la situación dando golpes suaves y silenciosos para no llamar la atención.

Saliendo del cuarto con los ojos rojos de llorar en silencio, viendo en el pasillo que todos estaban ahí susurrando que iban hacer ahora por qué solo tenían comida para 3 meses y pocas armas 30 cuchillos y la mitad era para cocinar quedándonos 15, 2 bates, 3 palos de escoba y un rebolber con apenas balas para dos recargas, pero les faltaba revisar la primera planta, solo que nadie quería ir a una muerte casi posible.

Anna sugirió que lo hicieran a la suerte, los presente se quedaron pensando unos momentos asta que aceptaron, cada uno metió su nombre en una caga, la sacudieron y sacaron un papelito que tenia el nombre de David, sacaron otro que decía diego (diego es u revidentemente de la segunda planta), sacaron el último que decía Roberto (residentes de la tercera planta), se prepararon once dos cuchillos cada uno, dos camisa dos suéteres 3 pantalones y el zapato más grueso que encontraron.

Haci José abrió la puerta de la segunda planta, al instante bajaron los hombres.

Anna -pasado 2 horas desde que bajaron- felipe -a que horas bajaron y que horas son- Anna -se fueron a las 8:30 y lla son a las 10:30 - felipe -ahí estan- un estruendo se escucho el dueño había abierto la puerta a los cansados hombres, diego repedia esta muerto,esta muerto,¡esta mue! Le taparon la boca y secaron la puerta.

Entonces David contó todo tardo 30 minutos, contó que todo salua bien ast que un zombi entró por una ventana de un baño que no tenía rejas y que cuando lo habían a matar a lo y dijo no me maten no soy uno de ellos pero su carne estaba desgarrada y su cuello tenia un cuchillo entonces lo mataron.

Entonces solo podía pensar en mis padres y hermana muertas pensaba que era mejor que estén muertos envés que tengan que sufrir este infierno y pensó acaso dios nos castiga de esta forma a acaso dios se llevó a los buenos y dejó a los malos acaso es el fin del mundo o solo de este lugar.

Comimos almuerzo y ella noche se escuchaban voces que decían yo no soy uno de ellos ¡ ayuda¡ !déjenme entrar¡, !malditos sufrirán¡ asta llantos de bebes de niños gritando mamá soy yo o maldiciendo son unos malditos, pobres niños pensó Anna antes de caer dormida

Hola como les a parecido, mañana si puedo publicaré otro capitulo