Regalos

—¡Wasabi, apresúrate o llegaremos tarde! — Le gritaba Gogo por enésima vez desde la entrada del Lucky Cat Coffee a su amigo obsesionado por el orden y la seguridad.

—Ya casi termino. Todo debe estar perfecto y SEGURO para cuando lleguen — Respondía este, resaltando la palabra “seguro” y luego salir por fin al encuentro con su amiga, quien ya se encontraba un poco irritada por hacerlos perder el tiempo en pequeñeces.

—Wasabi, todo está seguro desde hace media hora - Decía la chica entrando al auto para por fin partir al encuentro con sus demás amigos. —Además, por tu culpa, seguro Miguel ya sospecha lo que hacemos — Fijó su mirada en su compañero que la observaba con miedo.

—No te preocupes, seguro aún ni se acuerda — Decía mientras entraba al auto en el asiento del copiloto y trataba de que su amiga se calmase un poco. —Además, seguro aún está en el parque con los chicos, esperando a Hiro — Terminó de decir al tiempo que se acomodaba el cinturón de seguridad, recordando la forma de conducir de su amiga.

—Como sea, no debemos perder más tiempo — Y diciendo esto, el auto arrancó de inmediato y salieron de aquel lugar. Sí, seguro morirán en el camino, era lo que pensaba el chico moreno obsesionado por el orden al notar que su amiga no obedecía TODAS las leyes de tránsito solo por querer llegar rápido al parque.

Una vez que estuvieron en el sitio, notaron apenas a dos de sus amigos y a Baymax en el lugar acordado, que era bajo el árbol más alto de aquel parque y por ende el que daba más sombra. Caminaron hacia ellos para saludarlos.

—Hola Miguel, hola Honey, hola Baymax — Saludó alegre Wasabi posándose al lado de sus ya mencionados amigos.

—Hola — Respondieron estos a la vez con una sonrisa en sus rostros.

—¿Hiro y Fred aún no llegan? — Habló esta vez Gogo sentándose al lado de Honey con su típica burbuja de chicle en la boca.

—No, pero ya vienen en camino — Respondió Honey animadamente

— ¿Ves? Te dije que seguro aún no llegaba — Dijo Wasabi a Gogo recordándole su conversación antes de llegar a ese lugar. —Bueno, solo hay que esperarlos —

—No se preocupen, solo están terminando los detalles de… — Se detuvo Honey al ver de reojo a Miguel y notar lo que iba a decir. —El proyecto de Hiro — Acabó de afirmar con rapidez a la vez se hacía un ademán con las manos, como restándole importancia al asunto.

—¡¿Fred ayuda a Hiro a terminar un proyecto?! — Exclamó Miguel con sorpresa. Bueno, cada día se aprende algo nuevo. —Je, je, eso sí no me esperaba. ¿Significa que Fred es un genio también? — Empezó a bromear y seguido el resto de los chicos también comenzaron a reír al escuchar la pregunta de Miguel.

—Bueno, él es un genio a su manera… — Defendió Honey a su amigo.

—Tienes razón, él es un genio que le encantan los cómics y los superhéroes y que no piensa bien cuando de la vida real se trata, ya que actúa como un niño aun siendo un adulto. — Dijo Gogo esta vez viendo hacia el cielo. Los demás le dieron la razón, aunque creyendo que las palabras de la chica fueron un poco duras. —Pero a pesar de todo es un buen amigo - Dijo esta vez viendo a sus amigos y formando una sonrisa apenas perceptible.

—Sí, tienes razón. — Afirmó ahora Wasabi.

El resto de la conversación transcurrió entre temas triviales, desde sus trabajos en la universidad hasta la forma de vestir de Miguel. Luego de varios minutos conversando, por fin llegaron los chicos faltantes con la respiración agitada, se notaba que habían corrido hasta el parque.

—Perdón por la tardanza, el vuelo se atrasó y… — No terminó de hablar, ya que el joven nipón le puso sus manos en la boca a su amigo para evitar que mencionara demás antes de tiempo.

—Tuvimos problemas con el proyecto — Aclaró Hiro de forma nerviosa aún con la respiración agitada. —Pero ya está solucionado, ¿verdad Fred? — Dijo esta vez separando las manos de la cara de su amigo mientras le daba una rápida mirada en forma de reproche para que recordara que no debía decir nada aún.

—¿Proyecto?… Ah sí, sí, sí, claro. El proyecto ya está listo y será un total éxito — Dijo muy animado, ignorando la mirada que todos le dirigían. —¿Quién quiere empezar con el genial picnic? — Dijo esta vez mientras se sentaba en la tela que estaba en el pasto en la cual ya se encontraban todas las cosas listas y también la guitarra de Miguel, que la llevó porque Hiro se lo pidió.

—Muy bien, ya que están todos, supongo que podemos empezar a comer — Comentó Honey tomando asiento a un lado de Fred mientras los demás también se sentaban y Hiro obviamente quedando a un lado de Miguel.

Estuvieron allí un par de horas, hablando de todo un poco, Miguel cantó varias veces y sus amigos no se cansaban de halagarlo aun cuando el mexicano decía que no era para tanto. Pero vamos, es uno de los mejores cantantes que han escuchado, le aseguraban cada vez que terminaba una canción.

—Y lo mejor es que gracias a ti, nuestro Hiro no es un amargado total — Dijo Gogo haciendo reír a todos y por el sonrojo de Hiro al escuchar aquello de boca de sus amigos.

Y es que era la verdad, Miguel hizo que Hiro fuera más abierto con sus emociones, alegando que cuando no pudiera decirles lo que sentía se arrepentiría de no haberlo hecho cuando pudo. La mañana pasó tranquila, Hiro y Miguel se daban uno que otro beso aún frente a sus amigos, a Hiro le daba un poco de vergüenza, pero igual lo hacía porque simplemente eran sus amigos, no es como que les fueran a ver raro por eso cuando ya tiene años que conoce a Miguel y ellos saben de su relación desde hace mucho y nunca le dijeron algo negativo de ello. La estaba pasando bien, muy bien, hacía mucho que no se divertía tanto, y más en compañía de todos sus amigos y su novio debido a la constante ausencia de Hiro por sus cosas en la universidad y lo de proteger la ciudad.

En cambio, el joven nipón estaba pensando seriamente en buscar remplazo para él o algo así mientras se calmaban las cosas con sus benditos proyectos. Pero no podía abandonar a sus amigos y buscar un remplazo implicaría revelar su identidad y definitivamente no le gustaría eso. Solo quería estar tranquilo y poder disfrutar de la compañía de sus amigos, su tía y su novio.