Bajo el mismo techo

El hermano mayor

Aunque Lucas y Tomy tengan un conflicto pendiente,tenian uno mas grande que los perseguia por varios dias.

Por lo que habia que trabajar juntos.

Lucas y Tomy se encontraban en el rincón menos iluminado del vestíbulo, observando a Mateo que estaba hablando animadamente con Sofía. Aunque su sonrisa parecía genuina, Lucas no podía evitar notar el brillo calculador en sus ojos. Tomy, de pie junto a él, frunció el ceño.

—No me gusta cómo se comporta con ella —murmuró Tomy—. Parece que está tratando de ganarse su confianza demasiado rápido.

—Sí, y no es solo eso —dijo Lucas—. He oído rumores de que Mateo tiene una reputación un poco turbia. A veces, lo que se ve por fuera no es todo lo que hay.

Tomy asintió. —Exacto. Tal vez deberíamos hablar con Sofía antes de que sea demasiado tarde.

Ambos se acercaron a Sofía en el momento justo cuando Mateo estaba inclinándose demasiado cerca, susurrándole algo al oído. Lucas hizo una señal a Tomy y se aclaró la garganta antes de hablar.

—Sofía, ¿podemos hablar contigo un momento? —dijo Lucas, tratando de mantener un tono amigable pero firme.

Sofía se volvió, visiblemente sorprendida, pero sonrió al ver a los dos chicos. Mateo, notando la interrupción, se apartó lentamente, su expresión cambiando de una sonrisa encantadora a una mirada de desdén.

—Claro, chicos, ¿qué pasa? —preguntó Sofía, aunque su voz tenía un matiz de inquietud.

Tomy dio un paso adelante, mirando a Mateo con una mezcla de desdén y determinación. —Solo queríamos asegurarnos de que estés bien, Sofía. Hay algo sobre Mateo que deberías saber.

Mateo se tensó, sus labios se curvaron en una mueca. —¿Qué intentas insinuar? —su tono era desafiante.

Lucas, manteniendo la calma, continuó: —Hemos escuchado cosas que no son muy buenas sobre Mateo. No queremos que te sientas presionada o engañada. Solo queríamos que supieras que estamos aquí para ti.

Sofía miró a Mateo y luego a Lucas y Tomy, su expresión confundida. —¿De qué están hablando?

Tomy sacó un pequeño cuaderno de notas, mostrándole algunos comentarios y pruebas que había recopilado, sin mostrar nada demasiado comprometedor. —No queríamos que esto fuera un problema, pero creímos que era importante que estuvieras informada.

Sofía examinó el cuaderno y luego miró a Mateo, cuya cara se puso pálida. Finalmente, Sofía respiró hondo y se volvió hacia Lucas y Tomy.

—Gracias por decírmelo. Necesito pensar en esto.

Mateo se dio la vuelta y se alejó, su furia evidente mientras se iba. Lucas y Tomy intercambiaron una mirada de alivio y esperanza.

—Hicimos lo correcto —dijo Lucas, mirando a Sofía.

Ella asintió, agradecida. —Sí, gracias. Lo aprecio mucho.

Tomy le sonrió. —Estamos aquí para lo que necesites.

Sofía les sonrió con calidez, sintiendo una profunda gratitud por su intervención. Lucas y Tomy se sintieron más unidos que nunca en su misión de proteger a Sofía y, a través de esta experiencia, también comenzaron a ver la verdadera esencia de la amistad y el respeto mutuo.



#6162 en Novela romántica
#2007 en Fantasía

En el texto hay: amorrrrr, tristes

Editado: 08.08.2024

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.