Elliot
Eran las cuatro de la mañana, no podia dormor, asi que fui a una cafeteria 24hrs fui a tomar una limonada para refrescarme, estaba realmente frustrado aun no pinto nada y mi carrera esta en riesgo de que se desmorone pero no puedo pintar nada, no tengo inspiracion, miro a mi alrededor y veo a una chica entrar un poco mojada por la lluvia y estaba pidiendo un cafe, se sento y sus lagrimas salian, su mirada euforica me hacia preguntarme, porque esta llorando esta hermosa criatura hecha por los mismos dioses? Era una chica muy hermosa su belleza me cegaba, era sexy y delicada, que cualquier chico qie la mirara caeria rendido a sus pies, se admirar la belleza de las cosas, pero ella es diferente alguien que jamas habia visto... rapidamente saque mi sketch book y me puse a dibujarla estaba inspirado asi que sali corriendo de la cafeteria, puse musica clasica y me puse a pintar, pinte el paraiso, pinte el infierno, pinte la soledad, y me faltaba... la belleza, necesitaba pintar a aquella mujer, queria cueste lo que cueste, corri de nuevo a la cafeteria pero ya no estaba.
-Disculpe... la chica que estaba aqui hace rato.
-Oh si, todos los chicos que la ven siempre preguntan por ella, viene cada mañana, pobrecita vive estresada.
-Bueno.. gracias de todas maneras, gracias por nada.
Me fui de la cafeteria un poco enojado, pero tenia una pista, ella venia todas las mañanas a esa cafeteria, esoerare para mañana para volver a verla.
A la mañana siguiente
Para la chica de las lagrimas...
Por tu apariencia se nota que tienes clase, se nota que eres delicada, se nota tu belleza, es imposible borrar tu rostro de mi cabeza, me inspiraste a seguir adelante, me estas inspirando, pero me falta algo, pintarte a ti, serias tan amable de aceptar esta propuesta de este hombre triste?
La mire leyendo mi carta me sonrio un poco y me miro a los ojos con ternuta.
-Que eres, Shakespeare?
-Disculpa?
-Mira, no me interesa nada en la vida, puedes tomar esto y meterlo donde mas te guste.
-Esas no sin las palabras para una señorita como tu.
-Ya dime, que quieres?
-Quiero pintarte, mira, soy artista y hace tiempo no tengo inspiracion, tu me ispiraste y ayer yo-
-Quien?
-yo.
-te pregunto.
-Si quieres te pago lo que deseas.
-no, y no sigas molestando.
-Esta bien.
Me fui a sentar y un minuto despues ella se paro y me dio una servilleta con algo escrito, se fue rapidamente, vi la servilleta y lei.
Si quieres lo que deseas te veo en el parque cerca de la libreria A, a las 10:00 pm, se puntual, solo te esperare diez minutos.
Hace un minuto me dijo que no, y ahora... asi seran todas las mujeres?