Bijoutier

Capítulo 9

-Al Pozo de la Perdición—dije y después agregué sin dar explicaciones—necesito ir a ese lugar.

 

Ellos me miraron como si me hubiera salido otra cabeza.

 

-¿Habla en serio? Yeminesa—preguntó Gunter, el amatista.

 

Asentí.

 

-¿Por qué?—preguntó Traian, el zafirito, con evidente preocupación.

 

-Tengo que comprobar una cosa y solo puedo hacerlo yendo allí—expliqué sin ser muy clara—¿Me pueden decir, cómo puedo llegar al pozo?

 

Se miraron entre ellos como si lo que dije fuera una locura. Lo era, pero no tenían porqué saber mis razones.

 

-Yeminesa, no podemos hacer eso, ir al Pozo de la Perdición es prácticamente cometer suicidio—contestó Viviann, la turquesina.

 

-Todo el que va ahí muere—reafirmó Gunter.

 

-Pues yo sobreviví y eso que tenía poco tiempo de vida—les debatí insistente.

 

-Sí, pero puede que haya sido un milagro, yeminesa. Eres la única que se conoce que ha sobrevivido al pozo—dijo Traian.

 

-¿Tan difícil es la vida de yeminesa, que quiere acabar con su vida?—preguntó Ely de forma brusca.

 

La ignoré.

 

-¿Me van a decir o debo averiguarlo por mi cuenta? Me guiaré sola con el mapa si es necesario—dije impaciente.

 

-Hay dos formas de llegar, pero dudo mucho que pueda usted sola. No tiene tampoco sus poderes desarrollados aún—me advirtió Gunter—con mucho respeto, va a acabar muerta antes de siquiera intentarlo.

 

Odié admitir que tenía razón en ese punto, iba a meterme en la boca del lobo si lo hacía sin cuidado.

 

Lo único que me quedaba era pedirles que me ayudaran a llegar al pozo, sé que podría ordenárselos, pero al ser una orden tan irracional era probable que no la acataran.

 

Una parte de mí no estaba de acuerdo, creía que no necesitaba la ayuda de unos recién conocidos, que yo sola podría.

 

Suspiré cansada.

 

-¿Cuáles son esos dos caminos al Pozo de la Perdición? si es que me pueden ayudar a ir allí, en verdad, necesito hacerlo—les pedí casi rogándoles.

 

-¿Quiere que la ayudemos a morir?—preguntó Gunter con espanto.

 

Negué con la cabeza.

 

-Quiero que me ayuden a conseguir una respuesta a un problema personal, creo que ya dije que no pienso cometer suicidio—le respondí tratando de ser menos impaciente—no iba a pedirles ayuda si no fuera que no tengo poderes aún y no conosco este mundo.

 

-¿Puede decirnos por qué?—preguntó Ely— no cree que al menos deberíamos saberlo.

 

Volví a negar con la cabeza.

 

-No, no puedo.

 

-Podemos ayudarla, pero debe prometernos que no va a acabar con su vida. Dejarnos la conciencia tranquila —comentó Traian que me miraba como si quisiera adivinar lo que pasa por mi mente.

 

Sentí que él sería quien más me daría problemas de los que ya tengo.

 

Suspiré de nuevo.

 

-Está bien, prometo que no voy a acabar con mi vida—dije enfatizando con una mano en el pecho—¿Me dirán, verdad?

 

-Como Gunter ya dijo, hay dos formas de llegar al Pozo, ¿quiere la forma rápida o la lenta?—sugirió Viviann.

 

-¿Cuál es la rápida?—pregunté mirando a la peliceleste.

 

-Por Aslaug.

 

-¡No! Definitivamente no—me levanté con brusquedad alterándome con solo pensar que tendría que volver al castillo, traté de calmarme antes de continuar— ¿cuál es el otro camino?

 

-Oh… ¿en verdad quiere ir por el largo?—se quejó Viviann con pereza.

 

Fruncí el ceño con duda.

 

-¿Qué tan largo es?—pregunté pensativa.

 

-Es por Feriskald, yeminesa—explicó Gunter

 

Entonces sí era bastante largo, si lo usaba tomaría meses. 

 

Sin embargo, ir por Aslaug no estaba dentro de mis planes menos si mi madre se enteraba que la escuché a escondidas.

 

-¿Cómo se puede llegar a Feriskald?— pregunté mientras me decidía.

 

-Navegando en bote—respondió Traian.

 

Lo pensé un buen rato antes de decidir.

 

-Feriskald será entonces—declaré.

 

-¿Cuándo quiere que empecemos el viaje? Yeminesa—preguntó Traian.

 

-De inmediato.

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Feriskald era del tamaño de un continente, aún si se juntaran las islas de Aslaug y Amáfiro no se alcanzaría ni la mitad de este. Estábamos por el costado suroeste de Amáfiro para atravesar un canal que conectaba con la parte más cercana de Feriskald.




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