Día 8. Soledad.

Al principio es algo que me provocó miedo, pero la verdad fue algo inevitable caer en ella, al hacer vivido en una especie de burbuja social, en la cual siempre había estado acompañando, me sentí desconcertado, al saber que de ese momento en adelante tendría que enfrentarme a la vida, solo, sin un compañero fiel que me acompañara en esos momentos que afrontaría, pero de igual manera, era algo tan inevitable como necesario para mí, lo que más me asusto no fue sentir, que no tendría a nadie que me acompañará en el futuro, sino el sentir que los que consideraba amigos y fieles amigos, se estaban alejando y dejándome a la deriva mientras yo veía como ellos combinan mi amistad por la de alguien más que aparente era mejor que yo, cosa que según la sociedad era así, y cómo iba yo a saber que pensaba la sociedad a esa edad, la respuesta, en ese momento la sociedad que yo conocía era con la que tenía contacto y podía entender, es decir, el colegio, mi grupo de clase…. 
En momentos de oscuridad, lo peor no es estar ahí, lo peor vine cuando olvidas que estabas ahí… 
En mi caso, fueron semanas tortuosas de pensamientos profundos y hasta dolorosos, que giraban en torno a ¿Qué haré, sin un amigo que este a mi lado siempre?, Después de mucho tiempo, me acostumbre a estar solo, y en realidad no es tan malo, tienes todo tu tiempo para descubrir que te gusta e invertirlo en ello, pero también tiene sus puntos malos, por ejemplo, no tienes siempre a tu lado, alguien que te preste su hombro para que tú le puedas contar tus penas… 
Estar solo, es un mundo que te da mucho, te ayuda a comprender el mundo, incluso te ayuda a comprender a los demás, es un lugar que a pesar de ser en muchas ocasiones frío y condenado a lo desértico, te ayuda a comprender te, a como eres en realidad, a qué te hace odiar, a conocer que es lo que te aburre, lo que te llena, lo que te enserio disfrutas ¿Y cómo sabes que lo disfrutas?, Porque es algo que a pesar de estar solo te llena y te embarga de verdadera satisfacción, lo cual muchas veces no esta claro cuando te ves influenciado por tu grupo social a hacer algo que a pesar de ser interesante y divertido, no te llena como ese algo que tú quieres hacer y esos amigos tuyos, consideran es algo estúpido, y que tú, por no ir en contra de eso, les sigues la corriente pero por dentro deseas hacerlo, y que sabes es para lo que naciste y lo que en este momento te llenaría mil veces más que esas risas fingidas con tus “amigos”. Porque si no tienes la confianza suficiente para decirle a esos amigos, lo que enserio te apasiona, tal vez, no son tus amigos, tal vez solo son un mecanismo de defensa que has creado para sentirte protegido en la sociedad, y el mentir sobre tus gustos, no es más que miedo de sentirte rechazado y tener que enfrentarte al mundo solo, viendo cómo los que consideras amigos se alejan de ti, dándote la espalda porque no te valoran, no valoran lo que te apasiona, y tú miedo al igual que el mío, en ese entonces es saber que no tienes a nadie a quien contarle tus problemas y te diga, así sea de manera hipócrita “todo estará bien”.