Cuando la bola negra pierde su presión y fuerza, deja de empujar a Maicol, quien mantiene sus manos sobre ella para evitar que impacte su cuerpo. Finalmente, la bola negra se queda sin energía de impulso y regresa tranquilamente al lado de Evelyn. Ahora, tanto la bola blanca como la negra giran armoniosamente alrededor de ella, formando un espectáculo visual que resalta su poder y control.
—Esa combinación de ataque y defensa te hace la mejor maga tipo arma de Herel —dice Maicol con un tono de admiración, sin poder ignorar lo imponente y elegante que se ve Evelyn con su espada decorada con las dos serpientes y las bolas girando a su alrededor.
"Sí, debo admitirlo, mi hermana está totalmente espléndida. Es como si estuviera en el centro de una obra de arte mágico en movimiento".
Evelyn responde con una sonrisa que combina confianza y elegancia:
—Si debo admitirlo, me siento muy cómoda con mi tercera transformación.
Por un momento, el combate parece detenerse en una pausa llena de respeto mutuo, pero entonces, Maicol rompe el momento.
— ¡BUKAI! —grita con toda su fuerza, activando su última transformación.
En un instante, el aura mágica que lo rodea comienza a desaparecer, como si se estuviera desvaneciendo en el aire. La figura del mono mágico que lo envolvía se disuelve completamente, y toda esa magia se concentra en sus dos manos, transformándose gradualmente en dos pistolas mágicas.
Es un espectáculo impresionante. El BUKAI, el punto final de las transformaciones de un mago ha llegado. Y, como bien se sabe, para los magos tipo guerrero, el BUKAI siempre toma la forma de un arma definitiva.
Mientras las dos pistolas chisporrotean con magia acumulada, Maicol se ve más peligroso que nunca. No puedo evitar reflexionar: "Es interesante. Mientras que el BUKAI de los magos tipo guerrero es un arma, el BUKAI de los magos tipo arma toma la forma de un espíritu animal que rodea todo su cuerpo. Es como si sus roles se invirtieran en este punto final".
La tensión crece nuevamente, con ambos contendientes mostrando sus poderes mágicos. Evelyn, rodeada de sus dos esferas y su majestuosa espada, y Maicol, con sus dos pistolas mágicas listas para desatar una lluvia de poder.
"Esto está por llegar a su clímax", pienso mientras me preparo para lo que parece ser el último y más intenso enfrentamiento entre estos dos titanes mágicos.
—La última vez que peleamos, ninguno de los dos dominamos nuestro BUKAI —dice Maicol, con una sonrisa llena de confianza—. Tenía esta sorpresa bajo secreto, y será lo que me llevará a la victoria. Lo siento, Evelyn, pero esto termina aquí.
"Esto se pone cada vez más emocionante", pienso, mientras no aparto la vista de ellos.
Evelyn, con su postura siempre elegante, responde:
—La verdad, al inicio del año escolar estaba en esta Capital 13 entrenando mi BUKAI, pero por cuestiones de mi hermano, tuve que dejar ese entrenamiento a medias. Quién sabe si en este momento lo dominó por completo también.
Esa respuesta me transporta a un recuerdo bastante incómodo: el día que mi hermana irrumpió en mi dormitorio, y yo, medio dormido, terminé agarrándole un seno por accidente. Sacudo la cabeza rápidamente para enfocarme en el presente. "No, este no es el momento para recordar eso".
Maicol, evidentemente irritado, cortó el intercambio de palabras:
—No inventes excusas, Evelyn. Este es tu final.
Sin perder tiempo, empieza a disparar con sus pistolas mágicas, y las balas que salen de ellas no son comunes: están cargadas con electricidad que chisporrotea mientras vuela hacia Evelyn.
Pero, como siempre, la bola blanca de Evelyn se coloca frente a ella, creando un muro de hielo que bloquea los disparos. Las balas impactan la pared, pero no llegan a Evelyn. Pienso: "Bien jugado, bola blanca".
En un movimiento rápido, Maicol aparece mágicamente detrás de Evelyn, intentando conectarle una patada devastadora. Sin embargo, el ojo izquierdo de Evelyn comienza a girar, ralentizando todo a su alrededor. En cámara lenta, Evelyn esquiva la patada con precisión, mostrando una vez más su maestría en la batalla.
Pero Maicol no se detiene ahí. Con su mano derecha, dispara un tiro directo a la bola negra, mandándola a volar lejos del campo de batalla, dejándola fuera de juego momentáneamente. Luego, con su mano izquierda, dispara otro tiro hacia Evelyn, quien, a pesar de tener todo ralentizado por su ojo mágico, no logra reaccionar a tiempo.
Las balas no son solo poderosas, sino que tienen un efecto paralizador. Al impactar, una corriente eléctrica mágica recorre todo el cuerpo de Evelyn, inmovilizándola por completo. Desde mi asiento, la veo de pie, incapaz de moverse, con su cuerpo temblando por los efectos de las balas.
"Ahora lo entiendo", pienso, mientras observo a Evelyn paralizada. Esas balas no están diseñadas para herir esencialmente, sino para neutralizar a los oponentes. Maicol ha demostrado que su BUKAI no solo es poderoso, sino también estratégicamente diseñado para darle ventaja en cualquier batalla.
Mientras Evelyn lucha por liberarse, el suspenso sigue creciendo, y no puedo evitar preguntarme: "¿Cómo saldrá de esta mi hermana?".
Aprovechando que Evelyn está paralizada, Maicol no pierde tiempo. Le da un rodillazo directo al estómago, sacándole el aire y dejando claro que no tiene intención de contenerse. Sigue con una patada ascendente, que lanza a Evelyn hacia arriba, como si la gravedad no existiera por un momento.
Mientras Evelyn flota hacia arriba, Maicol, demostrando nuevamente su velocidad y agilidad, aparece mágicamente a su lado en el aire. Con un giro perfecto, le da una patada devastadora, enviándola de vuelta al suelo a una velocidad increíble.
El impacto sería catastrófico... pero entonces, el ojo izquierdo de Evelyn comienza a girar en sentido inverso, activando su habilidad de devolver el tiempo.
En un instante, el cuerpo de Evelyn impacta contra el suelo del estadio, haciendo un enorme agujero en el proceso. Sin embargo, lo que queda en el cráter no es la Evelyn actual, sino una versión sin vida de ella misma, un reflejo de lo que habría sucedido sin su habilidad mágica.