Capítulo 10

Es bastante tarde cuando Ker da por terminado su entrenamiento, no se detuvo hasta sentirse realmente agotada, era el único escape para sus complicados sentimientos, lo que más le molesta es que el día prácticamente ha terminado y no ha preparado nada para la reunión de líderes. Con semblante cansado sale de la habitación de entrenamiento y se encamina por el pasillo hacia las escaleras para llegar a la sala, una vez ahí toma asiento en el sofá de mayor tamaño y mira al frente.

– ¡Tiana, ven aquí!– llama a la joven destinada a ayudarle en la mansión Takura.

– Dígame, señorita Takura.

– Llámame, Ker, no me gusta que me llamen de esa manera, ¿Cuál de las dos se encargara o mejor dicho, tiene un trato más directo con el joven Myers?

– Yo, señorita, es por ello que mi misión es ser su asistente.

– Comprendo, ahora que te retires imagino que te reunirás con él, ¿Cierto?–cuestiona Ker, Tiana se limita a mover su cabeza de manera afirmativa–. En ese caso, cuando lo veas, dile que tenemos mucho que resolver y que lo espero a primera hora mañana.

– Si, señorita Takura.

– Ya te dije que me llames Ker, si te vuelvo a escuchar llamarme señorita Takura pediré que envíen a alguien más.

– Lo siento, no me parece muy adecuado, usted es nuestra líder y debemos hablarle con respeto.

– Guarda ese discurso, a mí me no me gustan esas formalidades, me incomodan demasiado, estoy acostumbrada a que me llamen Ker, crecí con personas que nunca me llamaron con tanto respeto, donde todos éramos iguales.

– Entiendo, trataré de hacerlo pero no se moleste si me resulta complicado, después de todo, mi educación desde que nací ha sido la misma, respeto incondicional por los lideres.

– De acuerdo, encárgate de informar a Bryson, puedes retirarte.

– La cena ya se encuentra preparada–informa sin marcharse.

– No tengo apetito.

– Pero no ha comido nada desde que desayuno con el joven Dixon–insiste la joven al ver la negativa de Ker.

– Esta bien, lo haré si comparten la mesa conmigo, no me gusta comer sola.

– Pero no es adecuado.

– Lo es si yo lo ordeno, las espero a ambas para que me acompañen–indica poniéndose de pie y encaminándose hacia el comedor sin esperar respuesta.

Ker llega hasta su lugar en el comedor y espera pacientemente a que las dos jóvenes hagan acto de presencia para acompañarla, comprende bien lo complicado que resulta para ellas sentarse en la mesa del líder. Sin atreverse a contradecir a la princesa y al mismo tiempo sintiéndose realmente contrariada, Tiana se encamina a la cocina donde se encuentra su compañera.

–Acompañaremos a la princesa en la mesa–informa con seriedad.

– ¿Bromeas acaso? Eso no es correcto, el señor Myers nos castigará.

–Ella lo pidió, no podemos desobedecerla.

–Disculpa lo que diré, Tiana, pero esa princesa está realmente loca, nos sacrifica por un capricho y deja entrar a los enemigos en la mansión, nos llevará a la ruina.

–Guarda silencio, Keira, estamos aquí para obedecer y no para pensar o juzgar algo, vamos.

Keira siempre ha sido imprudente, aunque eficiente y dedicada en sus misiones, con su extrema sinceridad se excede en ocasiones, muchas veces ha sido advertida pero le resulta muy complicado contener sus comentarios, Tiana es más prudente y es por ello que es la elegida por Bryson para mantenerse en contacto con él. Una al lado de la otra avanzan dirigiéndose al comedor, Ker se encuentra en el asiento principal que es su lugar, en la mesa todo se encuentra preparado y aunque únicamente hay un lugar listo, ahí se encuentra todo lo necesario para poner dos puestos más en la mesa. Ker se percata de la presencia de ambas, las escucha y escucha sus pensamientos, ambas se encuentran sumamente inseguras y tienen miedo de cometer un error que les cueste la vida.

– Relájense un poco, no soy un ogro, se lo que piensan pero entiéndanme, estoy muy sola en este lugar, no me gusta comer totalmente aislada, tomen asiento de una vez–expresa sin mirarlas, sorprendidas por el comentario avanzan y toman asiento cada una a un lado de la mesa, acomodan su respectivo lugar en completo silencio–. Háblenme un poco más sobre ustedes, considerando que se encuentran cerca de mí, debo saber con quién trato.

– Mi nombre es Keira, señorita Takura–se anima a decir la joven al lado derecho de la mesa–. Me siento muy incómoda, no es correcto que comporta la mesa conmigo, usted es la princesa, quien se encuentra en el más alto status social, más aun que cualquier líder clan, mientras que yo me encuentro en una posición baja.

– No digas eso, a mi no me interesan esas ideas, Keira, para mi todos son iguales y llámame Ker, por favor–responde Ker con una sonrisa sincera.

– Si el señor Myers escucha una insolencia como esa de mi parte me castigará, señorita.

– Bryson sabe mejor que nadie que detesto esa manera de pensar, yo me encargaré de él, ustedes estarán a cerca de mí a partir de ahora, no las quiero considerar desconocidas, ¿Qué habilidades poseen?

– Tengo la telepatía–interviene Tiana al percatarse que el comentario de Keira ha molestado a Ker y lo mejor que puede hacer es relajarse y comportarse como se espera.

– Yo levitación–indica Keira sin ser capaz de relajarse, aunque la princesa parece sumamente humilde y amable desprende un aura fría y asesina que consigue ponerla nerviosa, ni siquiera es capaz de percibir si realmente es así o simplemente es su imaginación.

– ¡Fantástico! Dime, Keira, ¿Me tienes miedo?–cuestiona Ker con tono relajado.

– ¿Quien no lo tendría? Es usted demasiado fuerte, podría quitarnos la vida con un solo movimiento o eso es lo que dicen.

–Dicen muchas cosas, ¿Cómo saber que es verdad y que es mentira? Aunque sea verdad puedes estar tranquila, no lo haré, valoro mucho a los miembros de mi clan, no me importan los estatus sociales ni nada por el estilo, mi deber es protegerlos y es lo que haré.